TARTALETAS DE TOMATES CHERRY Y LAVANDA

INGREDIENTES: 4 tartaletas DIFICULTAD: Fácil

Para el relleno:

-2 bandejitas de tomates cherry (unos 500 g aprox)

-1 cucharada de miel

-hojas de lavanda al gusto

-una vaina de vainilla

-un manojo de ajetes frescos

-2 cucharadas de piñones

-1 cucharada de romero picado

-1 cucharada de tomillo picado

-aceite de oliva virgen

-sal y pimienta.

Para la masa quebrada de queso:

-100 g de harina

-100 g de queso rallado (preferiblemente parmesano)

-1 yema

-una cucharada de agua

-100 g de mantequilla (cortada en dados)

1. Poner los tomates cherry en una bandeja apta para el horno. Repartir en el recipiente las hojas de lavanda, la miel derretida y la vaina de vainilla abierta por la mitad. Regar con un buen chorro de aceite de oliva virgen. Hornear a 180º C en horno precalentado durante 15-20 min. Dejar enfriar.

2. Mientras, en un bol amplio disponer la harina y hacer un hueco en el centro. Poner en él todos los ingredientes de la masa quebrada de queso y trabajar con las manos.

3. Enharinar ligeramente la mesa de trabajo, y trabajar en ella la masa(pero no en exceso). Estirar con ayuda de un rodillo, envolver así estirada en papel flim transparente y guardar en la nevera hasta que los tomates cherry se hayan enfriado.

4. Mientras, limpiar los ajetes y cortarlos en trocitos. Poner en una sartén un chorrito de aceite de oliva y dorar.

5. Poner los ajetes dorados en un bol, añadir los piñones, la cucharada de romero y tomillo, un poco de pimienta y sal si se desea. Mezclar.

6. Precalentar el horno a 180ºC. Engrasar unos moldes para tartaletas con un poco de aceite o de mantequilla. Poner un poco de relleno en cada tartaleta.

7. Repartir encima los tomates cherry.

8. Sacar la masa del frigorífico. Con ayuda de un cortapastas o de una tartaleta, recortar círculos de masa quebrada.

9. Poner los círculos de masa encima de los tomates cherry metiendo los bordes por los extremos. Hornear 30 min. a 180ª C. Servir tibio.

NOTA: si no tenéis hojas de lavanda, podéis hacer igualmente la receta. Es cierto, que a la hora de comer estas tartaletas, el sabor a lavanda está muy presente y le da un sabor distinto y peculiar.