KUIH LAPIS (Pastel malayo)

INGREDIENTES: 8 personas DIFICULTAD: Media PREPARACIÓN: 20 min COCCIÓN: 1 hora

-100 gr de harina

-1/4 de cucharadita de especias (canela y pimienta de Jamaica en polvo)

-150 gr de azúcar

-150 gr de mantequilla sin sal

-7 huevos

-1 cucharada de leche condensada

-1 cucharada de brandy

-1 cucharadita de extracto de vainilla

1. Preferiblemente sacar tanto los huevos y la mantequilla el día de antes a temperatura ambiente.

Tamizar la harina junto con las especias y reservar (podéis utilizar otras especias si os gustan más).

2. Engrasar un molde cuadrado no más grande de 17x17 cm. No engraséis en exceso para que el pastel no quede aceitoso. Para que no se pegue la parte de abajo, podéis poner también justo en el fondo un papel de horno del tamaño del molde. Reservar.

3. Poner en un bol el azúcar junto a la mantequilla reblandecida. Batir con las varillas de una batidora eléctrica hasta que la mezcla esté blanquecina.

4. Separar las yemas de las claras. Reservar las claras y añadir las yemas a la mezcla de mantequilla y azúcar. Batir con la batidora hasta que esté todo bien integrado.

5. Incorporar el brandy, el extracto de vainilla y la leche condensada. Batir de nuevo.

6. Incorporar la harina tamizada con las especias y mezclar, esta vez, con la ayuda de una espátula.

7. Montar las claras a punto de nieve y mezclar suavemente con la espátula a la mezcla anterior, pero dejando una masa lisa, sin restos de clara montada.

8. Poner el horno a 200º C, pero sólo la parte del grill y sube la bandeja del horno para que el pastel quede más arriba y se gratine bien.

Verter un cucharón de masa en el molde que teníamos reservado y extender bien la masa. Tiene que quedar una capa fina. Hornear unos minutos (sólo el grill a 200º C), hasta que el grill haya dorado un poco la superficie.

9. Sacar rápidamente del horno, pinchar la capa horneada con una brocheta, pincho o palillo... toda la superficie.

10. Aplanar con una espátula presionando hacia abajo para chafar un poco la capa de bizcocho (si tenéis una paleta de fondant, es ideal para chafar el pastel).

11. Verter otro cucharón de masa y extender rápidamente, volver a meter al horno y hornear unos minutos hasta que esté dorada la capa. Volver a sacar, pinchar la superficie, aplanar y repetir la operación hasta acabar con la masa. La última capa dejar dorar un poco más.

12. Sacar del horno, dejar enfriar unos minutos y desmoldar con cuidado en una rejilla presionando un poco en ella para que queden marcadas las rayas de la rejilla en el pastel. Retirar con cuidado el papel de horno que habíamos puesto en el fondo del molde. Cortar los extremos del pastel para que se aprecie el interior. Cuando esté frío del todo, dar la vuelta con cuidado para que se vea el dibujo que ha dejado la rejilla enfriadora y servir cortado por la mitad y cortado a su vez en tiras muy finas.

15. Existen variantes para poder hacer las capas a colores. Para las variantes hay que separar una vez hecha la masa en dos y a una de ellas añadirle, por ejemplo una cucharada de té matcha o una cucharada de cacao en polvo, colorante...lo que os apetezca. Sólo debéis alternar una capa normal, con otra que lleve el ingrediente deseado, así el efecto de capas será mayor. El de la foto, lleva capas combinadas con té matcha.

NOTA: Aplastar bien las capas para que queden bien marcadas las líneas. Si doráis mucho las capas, visualmente os quedará mucho más bonito, pero para mi gusto, queda un poco más reseco. Las líneas que separan las capas se van a notar igualmente, aunque más suaves, pero ganaréis en sabor.

Es un pastel que está muy bueno el día de su elaboración y al día siguiente, pero después queda muy mazacote, así que preferiblemente consumir pronto.

El molde no tiene que ser grande, más bien pequeño, si lo hacéis en uno amplio, a penas si tendréis capas y no se verá el efecto que precisamente tiene este pastel, así que preferiblemente un molde pequeño, cuadrado y alto.

Tenéis que recordar el trabajar rápido entre capa y capa.

La pimienta de Jamaica la compré en el Lidl y como era en grano la tuve que machacar finamente con un mortero.