Pompas superesistentes

Cómo hacer burbujas súper resistentes

En el experimento de hoy, vamos a enseñaros a hacer divertidas pompas de jabón súper resistentes de manera casera con unos materiales muy simples y fáciles de encontrar. Los más pequeños de la casa disfrutarán haciendo grandes burbujas de jabón de una forma muy sencilla.

Materiales

- Agua

- Jabón concentrado para lavar los platos

- Glicerina (se puede conseguir en farmacias)

- Un vaso grande

- Un vaso pequeño de chupito

- Una cucharilla

- Pajitas o popotes

Procedimiento

Para hacer burbujas súper resistentes hay una fórmula secreta y nosotros os la vamos a desvelar ahora mismo, así que estad muy atentos.

El primer paso es echar dos partes de agua, así que vamos a llenar un par de vasos pequeños y los vertemos en el vaso grande.

De jabón concentrado necesitamos solamente una parte, así que echamos sólo un vasito.

Ya solo queda el último ingrediente: una parte de glicerina, que, como veis, es un poco más espesa que el agua.

¡Ahora sí! Ya está lista nuestra fórmula secreta, así que ahora solamente queda remover todo con una cucharilla.

Ahora que la mezcla está preparada, ha llegado la hora de divertirse. Cogemos una pajita o popote y mojamos el extremo en el líquido. A continuación, soplamos por el otro extremo y... ¡empezarán a salir pompas ultra resistentes!

Explicación

Pero, ¿qué es lo que ha ocurrido aquí? La explicación es que las burbujas son capaces de formarse gracias a la llamada tensión superficial del agua. Esto es una capa de moléculas de agua que se unen fuertemente y evita que esta pompa explote.

Como sabéis, normalmente las pompas suelen ser muy débiles pero, gracias a la glicerina, aumentamos la fuerza de estas burbujas y se vuelven ultra resistentes.