Reloj de areana

Pues bien, como sabemos el reloj de arena es un instrumento mecánico de medición muy antiguo.

Sirve para medir intervalos de tiempos (este intervalo se cuenta desde el momento en que la arena comienza a caer desde el bulbo superior al inferior).

Actualmente está en desuso, pues debido a los avances de la tecnología ahora es sustituido por el reloj de pared o de pulsera; pero se puede utilizar con fines decorativos.


Éste experimento es sencillo y práctico de elaborar, y para su realización necesitaremos los siguientes materiales:

  • 1 vela
  • 2 botellas de plástico de ½ litro
  • 2 Kg de arena fina
  • Pegamento


Para que nuestro reloj de arena nos salga de manera óptima debemos realizar minuciosamente los siguientes pasos:

  1. Dilatar el pico de una de las botellas mediante el calor de una vela encendida, previamente quitar su tapa.
  2. Hacer un orificio de 1 cm. de diámetro en la tapa d la otra botella.
  3. Introducir la botella con tapa dentro de la botella dilatada. Si es necesario volver a dilatar hasta que entre a presión.
  4. Luego, proceda a volver a separar las botellas.
  5. Desenroscar la tapa de la botella, que contiene de ésta.
  6. Echar la arena en la botella hasta casi llenarla y vuelva a taparla.
  7. Introducir nuevamente la botella tapada en el interior de la botella dilatada.
  8. Voltear la botella de arena sobre la botella vací­a.
  9. Con un cronometro mida el tiempo que tarda en caer toda la arena sobre la botella vací­a. El tiempo controlado debe ser de 3 minutos, en caso contrario vaya disminuyendo la cantidad de arena.
  10. Si ya tienes medida la cantidad de arena que utilizarás, pues entonces asegura la unión de las botellas con un poco de pegamento.

PREVIO: Debemos de ser muy cuidadosos al momento de la dilatación de la botella para poder evitar cualquier tipo de quemadura