HOJALDRE RELLENO DE ALCACHOFAS Y QUESO

 INGREDIENTES:  6 personas DIFICULTAD: Fácil PREPARACIÓN: 15 min COCCIÓN: 45 min

-400 g de alcachofas congeladas cortadas en cuartos. 

-1 trozo de puerro

-2 dientes de ajo

-4 huevos L

-100 g de nata líquida o de leche evaporada

-50 g de queso mozzarella rallado

-2 planchas de hojaldre

-aceite de oliva 

-sal y pimenta negra recién molida

1. Pica un trozo de puerro, pela los dientes de ajo y pícalos también. 

2. Pon un chorrito de aceite de oliva en una sartén amplia y sofríe el puerro y los ajos picado a fuego suave.  

3. Incorpora las alcachofas que previamente habrás descongelado y retirado el posible exceso de agua si lo tuviera. Sofríe un poco más dando vueltas de vez en cuando con una cuchara. Reserva.  

4. En un bol casca los huevos y bátelos junto con la nata o leche evaporada y el queso rallado. Añade un poco de sal y pimienta al gusto.  

5. Incorpora el sofrito de puerro y alcachofas y mezcla.  

6. Extiende una de las planchas de hojaldre, pon encima el molde que vayas a usar (el mío una tartera desmontable de 20 cm de diámetro) y recorta el hojaldre algo más grande que el molde y retira el hojaldre sobrante.  

7. Acomoda el hojaldre encima del molde que estará bien engrasado y pon el relleno de puerro y alcachofas encima.  

8. Pon la otra plancha de hojaldre encima y recorta todos los sobrantes. Tienes que dejar un poco más de masa por los lados. Pellizca las dos masas y lleva hacia dentro haciéndole un borde de hojaldre alrededor.  

9. Con un cortapizzas o con un cuchillo marca líneas en zig-zag por toda la superficie. Pincela también con un poco de aceite de oliva y hornea en horno precalentado a 200º C, primero con calor sólo abajo durante 15 minutos, después, pon el calor arriba y abajo y deja cocer durante 30 minutos más. Si ves que se dora demasiado, cubre con papel de aluminio. Sirve tibio.  

NOTA: Puedes utilizar alcachofas frescas para hacer esta receta. utiliza más cantidad, pues tendrás que limpiarlas bien y dejar sólo los corazones. Córtalos en cuartos y mete en agua con limón para que no se oxiden.