INGREDIENTES: 4 personas DIFICULTAD: Media PREPARACIÓN: 30 min REPOSO: 2 horas COCCIÓN: 20 min
-450 g de harina de fuerza
-1 cucharadita de sal
-4 cucharadas de aceite de oliva
-1 sobre de levadura seca de panadería (unos 5 g)
-250 ml de agua tibia
-1 ramillete de cebollino
-unas ramitas de perejil fresco
-5 tomates cherry rojos
-2 tomates cherry amarillos
-aceite de oliva y sal para espolvorear
1. Pon en un bol la harina de fuerza junto con la sal, mezcla un poco y añade el sobre de levadura seca, las cuatro cucharadas soperas de aceite de oliva y el los 250 ml de agua tibia (recuerda que tiene que estar sólo tibia y no caliente). Mezcla a mano o con el gancho de amasar si usas una amasadora. Amasa hasta que la masa se despegue de las paredes del bol. Tiene que quedar una masa algo pegajosa.
2. Cubre con papel film y deja reposar en un lugar cálido sin corrientes de aire durante 1 hora 30 min.
3. Engrasa un molde rectangular de unos 16x26 cm o forra con papel de horno y acomoda la masa en el molde. Rocía con unas gotitas de aceite de oliva por toda la superficie.
4. Ata con cebollino un ramillete no muy grueso de cebollino y pon encima de la focaccia abriendo un poco los tallos. No lo pongas muy en el centro, ponlo hacia un lado para extender lo que simula las ramas de un ramo. Presiona un poco para que se fije a la focaccia. En la parte inferior que queda sin cebollino, presiona un poco con la yema de los dedos para que no suba esa parte en exceso al hornear.
5. Haz cortes en tres tomates cherry rojos y en los dos amarillos para simular una flor. Retira las semillas. Los otros tomates cherry rojos los vamos a laminar en rodajas.
6. Pon las hojitas de perejil repartidas entre el ramo de cebollino.
7. Dispón los tomates cherrys por el ramo de cebollino como más te guste para simular flores. Espolvorea con un poco de sal cubre con un paño. Precalienta el horno a 200º C y deja reposar la focaccia hasta que el horno esté bien caliente.
8. Hornea a 200º C con calor arriba y abajo durante 20 minutos o hasta que la focaccia esté un poco dorada. Desmolda con cuidado y deja reposar en una rejilla. Consume preferiblemente en el mismo día.