INGREDIENTES: 4 personas DIDICULTAD: Fácil PREPARACIÓN: 30 min COCCIÓN: 50 min
-1 calabaza para asar de unos 2 kilos
-2 cucharadas de aceite de oliva
-sal y pimienta
-un puerro pequeño
-100 g de mantequilla sin sal
-100 ml de nata líquida para cocinar
-150 ml de leche (puede ser desnatada)
-el zumo de medio limón
-1 cucharadita de eneldo molido
-1 cucharadita de perejil picado
-semillas de calabaza tostadas
1. Precalienta el horno a 180º C. Parte la calabaza en dos partes, no las hagas iguales, la parte de abajo será más grande, pues es en ella donde vamos a servir la crema y nos hará de recipiente. Retira las pepitas y pincela toda la superficie de las dos mitades de la calabaza con aceite de oliva.
2. Añade sal y pimienta al gusto y hornea en la bandeja del horno a 180º C con calor arriba y abajo durante unos 40 minutos o hasta que la carne de la calabaza quede bien tierna. No dejes que se queme en exceso la calabaza, una vez veas que está dorada, cubre con papel de aluminio.
3. Una vez tengas la calabaza cocida, retira con cuidado la carne de la calabaza. Pero no la quites toda, tienes que dejar un poco a los lados y en el fondo para que no se deforme y luego albergue la crema de calabaza. La mitad de la calabaza más pequeña, sí que puedes quitarle toda la carne bien. Reserva.
4. Lava el puerro, sécalo y trocea finamente. Si es grande, no lo pongas todo, con un trozo será suficiente.
5. En una sartén amplia, pon 25 g de mantequilla, y una vez esté fundida, añade el puerro y póchalo lentamente.
6. Una vez esté pochado el puerro, añade la pulpa de la calabaza y remueve durante dos minutos.
7. Añade la nata y la leche, sigue removiendo durante un minuto o dos. Si ves que la crema queda muy espesa, añade un poco más de leche, déjala a tu gusto, más o menos espesa. Retira del fuego y reserva.
8. Deja que enfríe un poco la crema de calabaza y tritura con una batidora para que quede más fina.
9. Una vez tengas cocinada la crema de calabaza, pon en una sartén no muy grande el resto de la mantequilla (75 g) y dórala a fuego no muy fuerte, no tengas pisa en hacerlo. Y una vez tenga un marrón bonito, añade el zumo de medio limón. Te cuidado aquí pues suele hacer efervescencia.
10. Retira del fuego, cuela una o dos veces para que no queden impurezas y añade las especias. Mezcla bien.
11. A la hora de servir, puedes volver a calentar la crema de calabaza para servirla calentita. Vierte la crema en el interior de la calabaza (es probable que no coja toda en ella).
12. Decora con las pipas de calabaza tostadas y con la mantequilla clarificada de especias. Sirve enseguida. Presenta en la mesa de esta manera y después reparte con un cazo repartidor.