CHEESECAKE DE FRAMBUESA (SIN HORNO)

INGREDIENTES: 8 personas DIFICULTAD: Fácil PREPARACIÓN: 40 min REPOSO: 4 horas


Para la base:

-200 g de galletas (las mías Soft Baked White Chocolate & Lemon de Lild)

-75 g de chocolate blanco para postres

-25 g de mantequilla

Para el relleno:

-275 g de frambuesas

-1 sobre para preparado de gelatina de frambuesa o de fresa (el mío de 85 g)

-200 ml de agua

-400 g de queso fresco tipo philadelphia

-150 g de azúcar

-200 g de nata para montar

Para la decoración:

-200 g de nata para montar

-1 cucharada sopera de azúcar glas

-50 g de frambuesas

-unas hojitas de menta


1. Para la base, tritura las galletas con un robot de cocina.

2. Derrite la mantequilla y el chocolate en el microondas poco a poco y añade al polvo de galletas. Mezcla bien. Yo he utilizado unas galletas de limón con trozos de chocolate blanco del Lild, y le daban un sabor muy rico a la tarta. Si usas otras galletas, añade unas gotitas de zumo de limón a la base de galletas, le dará un sabor muy rico y un buen contraste.

3. Engrasa un molde desmontable de unos 19 cm de diámetro. Como quería una tarta no muy alta y mis moldes son pequeños, lo que hice es que usé sólo el aro de un molde desmontable más pequeño y lo abrí del todo para usarlo de molde. Así que puse el aro en el plato donde iba a servir la tarta y engrasé el fondo del plato también. Puse en el fondo las galletas trituradas con la mezcla de chocolate y mantequilla fundida y lo aplané bien con la mano. Reserva.

4. Tritura las frambuesas con una batidora eléctrica y cuela el puré obtenido por un chino para retirar todas las semillas. Reserva.

5. Pon a hervir los 200 ml de agua. Retira enseguida del fuego y disuelve en el agua caliente el sobre para gelatina de frambuesa o de fresa. Remueve bien. Reserva.

6. Pon en un bol amplio el azúcar junto con el queso crema y mezcla bien con un batidor o con un tenedor.

7. Incorpora poco a poco la gelatina disuelta en el agua mientras vamos batiendo.

8. Añade el puré de frambuesas y mezcla bien.

9. Bate los 200 g de nata con unas varillas eléctricas y añade poco a poco a la mezcla anterior.

10. Vierte la mezcla de queso y frambuesa en la base de la tarta que teníamos reservada. Deja que se solidifique en la nevera unas dos horas. También puedes acelerar el proceso en el congelador durante 1 hora.

11. Para decorar la tarta, monta los 200 g de nata con unas varillas eléctricas y cuando esté casi montada, añade una cucharada de azúcar glas. Yo desmoldé la tarta antes de ponerle la nata por encima, pero puedes ponerla dentro del molde y desmoldar justo antes de servir.

12. Por último, decora con las frambuesas y con hojitas de menta frescas. Reserva en la nevera otras dos horas más.