INGREDIENTES: 6 personas DIFICULTAD: Fácil PREPARACIÓN: 30 min COCCIÓN: 30min
-1 kg 500 g de mejillones
-1 rama de apio
-3 chalotas o una cebolla común
-1 tomate
-1 diente de ajo
-3 cucharadas de aceite de oliva
-3 ramitas de tomillo fresco
-250 ml de vino blanco de buena calidad
-350 ml de caldo de pescado (puede ser de compra si no se tiene casero)
-300 ml de nata 35% materia grasa
-2 cucharadas de maicena
-2 pizcas de hebras de azafrán
-pimienta negra recién molida
1. Limpia los mejillones para tenerlos preparados y reserva. Trocea la rama de apio, pela las chalotas y pícalas, pela el ajo y lamínalo. Pela el tomate, despepita y córtalo en cubos no muy grandes.
2. Pon el aceite de oliva en una olla amplia y cuando esté caliente, incorpora el apio troceado junto con al cebolla y sofríe.
3. Incorpora el ajo y el tomate troceado y sofríe unos 4-5 minutos.
4. Añadir a la olla los mejillones, el vino blanco y las hojitas de tomillo (pelamos la ramita de tomillo con los dedos para añadir sólo las hojitas). Cubrir con una tapadera. subir el fuego y dejar hacer durante 5 minutos removiendo la olla de vez en cuando para que los mejillones se hagan de forma homogénea.
5. Retira del fuego una vez abiertos los mejillones. Filtrar el jugo de la cocción de los mejillones y reservarlo.
6. Con los mejillones lo que hice, fue retirar unos pocos para decorar enteros (esto es opcional), y al resto le quité la cáscara. También reservé unos poquitos sin cáscara para decorar. En total, me guardé una tercera parte de ellos con y sin cáscara para decorar.
7. Diluye en un poquito de la nata la maicena hasta que quede sin grumos. Aunque, también puedes prescindir de la maicena si no te guste, quedará más líquida, pero muy rica igualmente.
8. Pon en una olla amplia los mejillones sin cáscara que no sean los reservados para decorar, el jugo filtrado de los mejillones, el caldo de pescado, la nata líquida, la maicena diluida, las hebras de azafrán y pimienta recién molida. Lleva a ebullición removiendo de vez en cuando, baja un poco el fuego y remueve hasta que la crema tome un poco de cuerpo, aunque no espesará mucho. Prueba de sal, yo no le tuve que añadir nada, por eso no la he puesto entre los ingredientes. Ya fuera del fuego, tritura con la batidora eléctrica para dejar una crema más fina.
9. A la hora de servir, pon en cada cuenco unos poquitos mejillones sin cáscara y otros con ella para decorar. Sirve caliente.
NOTA: La crema de mejillones se puede hacer con antelación, pero habrá que calentarla bien antes de servirla. No importa que los mejillones para decorar ya estén fríos, al ponerlos en la crema caliente perderán el frío.
La maicena es para que tome un poco de cuerpo, pero podéis prescindir de ella, aunque quede algo más líquida, la crem con la maicena, tampoco es muy espesa.
Al llevar nata, consumir preferiblemente en dos días.