INGREDIENTES: 12 bolas DIFICULTAD: Media PREPARACIÓN: 45 min COCCIÓN: 20 min REPOSO: 12 horas
Para el rebozado:
-25 g de coco rallado
-colorante rojo y amarillo alimentario
-1 cucharadita de azúcar glas
-1 cucharadita de maicena
Para las bolas de coco:
-2 láminas de gelatina
-50 ml de agua
-125 g de azúcar glas
-1 cucharadita de aroma de vainilla
1. Deja preparado en primer lugar el rebozado para la bolas de coco. Mezcla en coco con el colorante hasta que el coco quede de un color homogéneo. Yo hice la mitad del coco con colorante amarillo y la otra mitad con colorante rojo. Es mejor que uses colorante líquido, aunque yo sólo tenía en pasta y lo tuve que deshacer con las yemas de los dedos mezclando bien con el coco.
2. Incorpora el azúcar glas y la maicena y mezcla bien hasta que quede todo del mismo color. Reserva para más adelante.
3. Ahora, procedo con las bolas de coco. Pon a hidratar las dos hojas de gelatina en agua. 4. Pon en un cazo al fuego los 50 ml de agua junto al azúcar glas y el extracto de vainilla líquida. Lleva a ebullición hasta que alcance los 115º C.
5. Si no tienes termómetro, no te preocupes, puedes hacer igualmente la receta, este punto que llega a alcanzar el azúcar a 115º C, se llama al punto de bola blanda, para ello, saca una cucharadita del almíbar creado y echa en un vasito con un poco de agua, mete los dedos y coge el líquido que has vertido con los dedos, saca del agua y forma una bolita blanda de azúcar. Si ves que no la puedes coger con los dedos o si la coges, no llega a formarse una bolita blanda, es que todavía le falta. Por el contrario, si la bola está muy dura, es que te has pasado del punto. Yo tuve la preparación en el fuego durante 16 minutos a potencia media (en mi vitrocerámica a 6).
6. Una vez tengamos el almíbar en su punto, retiramos del fuego, escurrimos las hojas de la gelatina y la añadimos removiendo bien para que se integre perfectamente al almíbar.
7. Cambia el almíbar de bol y deja que enfríe hasta llegar a 30º C. No te preocupes tampoco por no tener termómetro, simplemente toca las paredes del bol, y cuando estén tibias, ya estará listo. También puedes acelerar el proceso metiendo el bol en un poco de agua (no hace falta que sea fría). Una vez haya bajado de temperatura el almíbar, bate con unas varillas eléctricas hasta que la mezcla doble su volumen o la triplique. Tendrás que batir un buen rato, verás como el almíbar se convierte en una espuma muy blanca, parecerá un merengue.
8. Una vez esté bien montado, añade el coco rallado y esta vez, mezcla con una espátula hasta que esté bien integrado. La masa será muy pegajosa y un poco dura.
9. Con ayuda de dos cucharitas forma unos pequeños montones con la mezcla. También puedes hacerlo con las manos, aunque las primeras cuestan más y conforme se van secando se trabaja mejor con ellas. Puedes hacerle un poco de forma, yo no las dejé redondas del todo, las achaté un poco en la base y les di una forma más picuda en la parte de arriba.
10. Reboza en el coco coloreado que teníamos reservado. Haz lo mismo con cada bolita que formes.
11. Deja secar durante 12 horas en una rejilla. Una vez secas, guárdalas en un bote hermético fuera de la nevera, en un lugar seco. Aguantan hasta tres semanas bien tapadas.
PASO 5
PASO 7
PASO 9
PASO 10