JBEL BOUHACHEM

-Vista en Googleearth, de la ruta del primer día, compuesta por los circuitos:

• Nº1 - Circuit écoturistique des tourbières

• Nº3 - Circuit ècoturistique de la Cèdraie de Bouhachem

- Vista en Googleearth, de la ruta del segundo día, compuesta por los circuitos:

• Nº2 - Circuit écoturistique de Cèdre mort

• Nº4 - Circuit ècoturistique des Saints de la transhumance

- Perfil de la ruta

-Perfil de la ruta

1º- Participantes de esta ruta y algún lugareño que se añadió. De Derecha a izquierda:

Marcin, Mario, Montse, Roberto, Rose Marie, Ana Luna y Lourdes, Teresa, Esteban, Therese, Paqui, Lugareño, Juan Antonio, guía de la expedición y Antonio (servidor).

Esta es la casa rural "Gite Abdeslam", donde se quedó una parte del grupo. Se encuentra justo frente al área recreativa de Lamtahan, donde se encuentra una zona encharcada, que marca el comienzo de la ruta que vamos a seguir.

1º- Antes de comenzar la ruta nos hicimos esta fotografía con la familia que regenta la casa rural Gite Bakkali, en la cual nos hospedamos. No recuerdo sus nombres, pero sirva esta imagen como recuerdo por la atención y la hospitalidad que en todo momento mostraron.

Para iniciar esta ruta hemos de desplazarnos hasta un punto ubicado entre las dos casas rurales en las cuales nos alojamos y comenzar a ascender por un amplio camino que comunica a algunas viviendas desperdigadas por la montaña.

2º- Comenzamos ascendiendo entre espesos pinares, que parece son de la época de colonización española. Al principio solomente encontramos pinos, pero un poco más arriba comienzan a aparecer otras especies arbóreas como los quejigos y encinas, más propios de este lugar. En la primera terraza de la ladera, nos encontraremos con la turbera, llamada de Merj Esemlil, rodeada de hermosos ejemplares de pinos y helechales y el bosque de quejigos y robles que pueblan la vertiente norte de la sierra.

2º- Pronto el camino se convierte en senda y continúa la ascensión entre una variada arboleda donde predominan los pinos. Los guías nos llevan hasta algunos lugares de interés, como son unas cuevas abandonadas que servían de refugio a la población durante las batallas coloniales con España o que servían de refugio a santones anacoretas que se retiraban a estas montañas llevando una vida pía y pura. Aquí nos cuentan también la historia de la existencia de un tesoro enterrado que a pesar las creencias populares y la búsqueda nunca apareció.

3º- Continuamos caminando por un amplio claro en la ladera, supongo que fruto de algún incendio forestal, ya que se aprecian restos de troncos calcinados. En este tramo, ante la sorpresa de todos, el perro del guía detectó la presencia de una manada de monos, que rápidamemte subieron a los árboles, pudiendo contemplarlos saltando por las ramas de las copas en su despavorida huida. En la foto aparece la casa forestal española, actualmente deshabitada, rodeada de una zona de huertos. Un poco más adelante se encuentra un gran castaño, donde descansamos para esperar a nuestro guía oficial Mohamed.

3º- Continuamos ascendiendo, dejamos los pinares y nos metemos en alcornocales, quejigales, encinares y casi llegando a la cuerda de la sierra, nos encontraremos una fuente en cuyo pequeño estanque habitaban salamandras, por eso la bauticé así en el track y por encima de esta, una gran explanada, parece que llamada de Bab Lamâiz, donde descansamos antes de arremeter la última cuesta antes de llegar a la divisoria de aguas. Aquí pudimos volver a contemplar otra vez la magnífica vista de los bosques que se encuentran en la vertiente sur, así como la cresta de la sierra cubierta de cedros, donde estuvimos el día anterior.

4º- Proseguimos caminando por un camino carretero que pronto comenzará a subir con más pendiente hacia la parte más alta de la sierra, llegando pronto a esta planicie de

Mqyl Tayersan, donde se encuentra un aljibe y numerosos árboles de porte excepcional.

4º- La ascensión no termina aquí y tras conversar con algún pastor, subimos por lugares con arboleda muy bonita, hasta llagar a la tumba del imán Sidi Wali, ubicada en uno de los puntos más elevados de Jbel Bouhachem. En la foto servidor con la cresta de la sierra al fondo.

5º- El camino continúa siendo carretero, conduciéndonos hasta un puerto con planicie denominado Tafaifra, donde vemos la vertiente sur de Jbel Bouhachem y donde pararemos a descansar. Esta es una zona de pastoreo donde encontramos algunos rebaños de cabras con sus pastores y unos perros muy simpáticos que nos acompañan durante la comida a la espera de que algo les caiga a ellos también. Las vistas en la ascensión de Chef Chaouen y las montañas que la rodean son estupendas, como puede apreciarse en la imagen.

5º- Foto de grupo en la tumba del iman Sidi Wali, que no es más que un círculo de piedras y una puerta de paso, para acceder al interior, donde se supone que descansan los restos del santón.

Las vistas son espectaculares en todas las direcciones, aunque hacia el norte y entre las rocas observamos a un grupo de monos, que gracias a la considerable distancia que nos separaba, se confiaron y con los prismáticos pudimos contemplarlos durante un buen rato, pues esta nota de exotismo no se da en todas las rutas que hacemos en España.

6º- Abandonamos el camino y por un senderillo que atraviesa una zona de matorral bajo y que después se pierde, vamos buscando el robledal que se ve al fondo con ejemplares magníficos, donde pararemos a hacer algunas fotos porque el lugar lo merece. Nos dirigiremos ahora hacia la cresta de la sierra que se ve al fondo cubierta de hermosos cedros, realizando el último tramo de ascensión antes de llegar al puntos más alto de nuestro recorrido.

6º- Abandonamos el lugar de la tumba y proseguimos por la cresta de la sierra, que es amplia y nos permite avanzar rápidamente. Cruzamos en repetidas ocasiones por bosquecillos muy hermosos y llegamos a un punto donde nos cruzamos con un sendero que atraviesa la sierra transversalmente, tomando en este caso el ramal que desciende hacia el sur, entre el arbolado del bosque y su hojarasca, que hacen el descenso muy resbaladizo y prestando un cuidado extremo en no caer.

7º- Ese punto más alto se llama Richa y se encuentra a algo más de 1.500m de altitud. Aquí se encuentra el Cedro Muerto unos de los puntos más característicos de este lugar. Las vistas desde aquí de todo el entorno son maravillosas.

7º- El bosque de quejigos y robles melojos es impresionante, porque en España no creo que exista uno igual o que se puede equiparar a este. En la foto un estanque, aunque la sequía lo tenía algo depauperado.

8º- Inicamos el descenso por la cara norte, entre bosques de robles, encinas y quejigos de porte extraordinario, que nos llaman mucho la atención. El lugar es excepcional, al menos a mi me lo parecía, por eso paramos e hicimos esta foto de grupo para el recuerdo.

8º- La senda pronto va a dar a un camino carretero y como los guías se entretienen dando algunas explicaciones del lugar, un grupo se separa y se adelanta, tomando un rumbo equivocado. Los guías entonces, proponen seguirles hasta darles alcance y una vez lo hagamos, paremos a comer antes de iniciar el camino de regreso.

9º- En el camino de regreso nos encontramos con esta segunda turbera, denominada Merj Lkhil, que se encuentra algo por encima de la que nos encontramos por la mañana, ya que pronto fuimos a dar con ella otra vez. En ese momento ante la falta de luz, decidimos regresar por el bosque de pinos por el que comenzamos en la mañana. Nos llamó muchísimo la atención ver como un grupo de muchachos hacían un fuego para cocinar algo de cena, en medio del pinar, sin tomar ninguna precaución por el peligro que representa hacer algo así en un invierno tan seco. Creo que falta de comopromiso y concienciación de los lugareños, de la necesidad de proteger y cuidar estos bosques, que sin duda alguna pueden ser una fuente de riqueza y progreso para esta tierra.

9º- Decidimos volver abandonando el camino, para proseguir por un sendero que atraviesa el bosque y nos lleva a lugares tan pintorescos como el de la imagen nº8. Poco a poco vamos ascendiendo y llegamos al puerto donde además hay una fuente, incluso numerosos hoyos excavados en el suelo que atestiguan la búsqueda del tesoro del que antes hablamos.

Pasado el puerto descendemos hacia el norte por sendero que pronto se convierte en camino en mal estado y que en su día sirvió para el transporte de la madera explotada como un importante recurso económico.

Finalmente llegamos a la carretera asfaltada y caminamos por ella un par de kilómetros hasta llegar a nuestras casitas donde nos esperaban con la merienda ya preparada .