PICO DE LAS ALEGAS

La ruta comienza en el cortijo de Juan Manuel, al que se accede por una pista transitable por vehículos tipo turismo desde la población granadina de Cañar, tras recorrer unos 8km aproximadamente. Nosotros comenzamos aquí y no en el área recreativa de Puente Palo, porque es en este cortijo donde nos hospedamos para celebrar los cumpleaños de las dos Teresas.

Tras recorrer 2km más por la pista forestal, entre el bosque de robles de Cañar, llegamos a la mencionada área recreativa, que abandonamos siguiendo la pista hasta llegar a la acequia del Alminar, donde tomaremos otro camino carretero a nuestra derecha, que asciende zigzagueante unos 300m de desnivel hasta superar ligeramente la cota 2000m, en la que nos mantendremos en los próximos 3km.

Pronto el camino gira en dirección norte y nos adentramos en el valle del Poqueira, contemplando majestuoso el Pico Mulhacén y su enorme loma en la que cuelgan las poblaciones de Capileira, Bubión y Pampaneira. Las vistas del valle y los tresmiles entre el Mulhacén y el Veleta son magníficas, también hacia el sur vemos el mar Mediterraneo que refleja como un espejo el sol que disfrutamos en una mañana tan soleada.

Al llegar a unas casetas, que supongo están relacionadas con el suministro de aguas, abandonamos el camino y trochamos campo a través por el pinar, donde decidimos parar para descansar y comer algo. Reanudamos la marcha y en la parte más alta del bosque de pinos, cruzamos por donde podemos, pues los árboles tienen un porte bajo debido a la altitud, procurando no engancharnos ni hacernos daño con las ramas. Cuando salimos del pinar sentimos alivio y nos encontramos con una enorme loma de suave pendiente que vamos ascendiendo tranquilamente y sin dificultad hasta llegar a los prados del Cebollar, donde nos sorprende un camino carretero del que solo se conservan las rodadas de los vehículos y que seguiremos, pues casi llegará hasta la cima del pico de las Alegas (2.705m). Las vistas desde aquí son todavía mejores y más espectaculares, la nevada vertiente sur de los tresmiles es magnífica, destacando el pico Veleta, que nos ofrece un aspecto piramidal que nunca antes había observado en esta formidable montaña. La parada es obligatoria para comer algo, descansar y disfrutar con las vistas.

El descenso lo hacemos por el barranco del río Chico, al principio sin sendero nos dirigimos hacia el refugio no guardado del Cebollar, muy amplio y que se encuentra en buen estado. Allí tomamos una senda que se dirige hacia un pinar, por el cual cruzaremos en zigzaguenate descenso hasta alcanzar el río, donde la senda se convierte en camino carretero en no muy buen estado, pero por el que caminamos rápidamente y sin problemas. El camino mejora conforme bajamos de cota y atravesamos un pinar en explotación, hasta llegar al área recreativa de Puente Palo, desandando el camino por el que vinimos por la mañana hasta llegar con las últimas luces de la tarde a nuestro cortijo donde la fiestuki de celebración de los cumpleaños ya está preparándose.

Mulhacén desde los prados del Cebollar.

Loma de Cañar y pico Tajo de los Machos.

Cima del pico de las Alegas y vista sur de los tresmiles occidentales.

Cara sureste del Mulhacén.

Cerro de las Alegas y sierra de Lujar al fondo.

Atardecer en el cortijo de Juan Manuel (previo a la fiestuki).