DESCRIPCIÓN DE LA RUTA
Esta ruta es una de las más bonitas y completas que pueden hacerse en la zona de Fuencaliente (Ciudad Real) pues combina el paso por la cascada de la Batanera y sus pinturas rupestres, así como por las existentes en Peña Escrita (cuyo nombre lo dice todo), finalizando con la ascensión al cerro de la Bañuela, techo de toda Sierra Morena (ver ruta en Wikiloc) Aparcamos el vehículo junto a la explanada que hay en el campo de futbol a un par de kilómetros del pueblo y desde allí ascendemos por un camino carretero caminando por el unos tres kilómetros, hasta llegar a unas casas donde un cartel nos indica que hemos de desviarnos por un sendero acondicionado para el gran público, con barandas y que nos permitirá acceder a la cascada y pinturas rupestres de la Batanera.
Lo primero que llama la atención es la frondosidad de la vegetación que rodea al río Cereceda, así como la roca desnuda que el río ha dejado al descubierto y la brecha final por la que se precipita el chorro de escaso caudal del río en esas fechas. También se puede ver enfrente, la verja que protege las pinturas rupestres en las paredes rocosas de la montaña. Allí se puede permanecer un largo rato haciendo fotos de la cascada, pudiendo descender aguas abajo, casi hasta su base para contemplar el salto y disfrutar del sombrío lugar. Las pinturas a mi no me parecieron especialmente llamativas, pues no se distinguen con claridad, aunque su valor histórico y antropológico nadie se lo puede negar.
Continuamos cruzando el puente sobre el río y ascendiendo la montaña por un senderillo que hay a la izquierda de la pared con las pinturas y cuando llegamos a la parte superior hallaremos otro camino carretero y una valla metálica que habrá que atravesar para proseguir por el camino cortafuegos que hay al otro lado de ella. Este camino nos llevará hasta un punto elevado donde el camino termina, antes de descender al barranquillo de las Piedras. Ahora deberemos buscar entre el matorral un sendero que en acusado y resbaladizo descenso nos lleva al fondo del barranquillo, para luego subir por su otra ladera donde tras andar unos cientos de metros veremos aparecer sobre nosotros las cueva de Peña Escrita. Tendremos que descender hasta el camino por el que transitan los vehículos y en el aparcamiento tomar el sendero acondicionado que lleva a los visitantes hasta las pinturas rupestres que se encuentran protegidas del vandalismo por una verja. Estas pinturas se pueden ver con claridad por su excelente estado de conservación. Según se puede leer en los paneles informativos fueron las primeras pinturas rupestres descubiertas en el mundo, tras las cuales han llegado todas las demás.
Despues de recoger y comer los frutos maduros de los innumerables madroños que bordean el camino, sorteamos la cadena que impide el paso a los vehículos a motor y nos dirigimos hacia el arroyo de Peña Escrita por cuyo valle habremos de descender a la vuelta. Así que continuamos andando por el camino carretero unos tres kilómetros más, pasando a la vertiente sur de la sierra Madrona, hasta llegar a un mojon en el lado izquierdo del camino que nos indicará el punto en el cual hemos de tomar un sendero bien marcado y amojonado que nos llevará a la cima de la Bañuela (1.322 m). Se va ganando altura superando un desnivel de algo más de 500m, sin riesgo de equivocarse, porque el sendero se abre paso entre el matorral y el bosquecillo mediterraneo que puebla la ladera sur de la sierra. Una vez que llegamos a la parte alta donde nace un arroyo, las cosas cambian, pues el sendero se vuelve confuso entre el sotobosque y provocará que en más de una ocasión tengamos que abrirnos paso por donde podamos pues lo más normal será perder el sendero si es que existe. Cuando llegamos a la cuerda, todo vuelve a estar más claro y alcanzaremos la cima sin gran dificultad. Desde allí arriba la vistas hacia el sur son amplias y si el día está claro, como era el nuestro, alcanzaremos a ver las cumbres con nieve de Sierra Nevada sobresaliendo en el horizonte.
Descendemos hasta el punto donde se gana la cuerda de la sierra y nos desviamos esta vez hacia la derecha para adentrarnos en el valle por donde discurre el arroyo de Peña Escrita. El sendero atraviesa una zona de roca suelta cubierta de verde musgo que pierde altura muy lentamente, pues casi se mantiene paralelo a la mencionada cuerda, encontrando de vez en cuando mojones que nos orientan e indican por donde hemos de avanzar, Proseguimos descendiendo pediendo altura progresivamente y llegamos a la zona boscosa donde el camino ya no tiene pérdida y está muy bien trazado. Casi al final de este tramos por el valle de Peña Escrita, llegaremos a una buitrera, que a última hora de la tarde y con los ya escasos rayos de sol, nos permitirá disfrutar de la vista de los buitres posados en los escarpes del peñón. Continuemos descendiendo hasta llegar al camino carretero por el que pasamos horas antes. Una vez alcando, volveremos al aparcamiento de peña escrita donde allí me esperaban con el coche los compañeros que a medio día desistieron de subir a la Bañuela, dando por finalizada la ruta cuando ya casi era de noche.
Se puede continuar caminando hasta el aparcamiento del campo de futbol de Fuencaliente donde por la mañana habíamos dejado el coche, aunque en mi caso no lo hice así porque la noche ya se nos había echado encima y los compañeros que decidieron no subir al cerro de la Bañuela para poder recoger setas, acudieron preocupados a recogerme y volver en el coche al hotel Sierra Madrona en las proximidades de Fuencaliente.
Álbum de Google Fotos (ver en presentación de diapositivas)
Aquí tienes el track de la ruta:
PANORAMAS