Charles Bukowski
el soldado, su mujer y el vagabundo

yo era un vagabundo en San Francisco pero una vez conseguí

entrar en un concierto de música clásica junto con la gente

bien vestida

y la música era buena pero había algo en el

público que no lo era

y algo en la orquesta

y en el director que

no lo era,

aunque el edificio estaba bien y la

acústica era perfecta

yo prefería escuchar música a solas

en mi radio

y después volví a mi cuarto y

encendí la radio pero

entonces me golpearon la pared:

«¡APAGA ESE MALDITO CACHARRO!»


había un soldado en el cuarto de al lado

que vivía con su mujer

y pronto se iría lejos a

protegerme de Hitler así que

apagué la radio y entonces oí que su

mujer decía: «no deberías haber hecho eso.»

y el soldado dijo: «¡ANDA Y QUE LE FOLLEN!»

pensé que era muy amable por su parte

sugerirle a su mujer que lo hiciera.

por supuesto,

ella nunca vino a follar conmigo.


de todos modos, nunca fui a otro concierto

y aquella noche escuché la radio muy

bajita, con la oreja pegada al

aparato.


la guerra tiene su precio y la paz nunca dura y

millones de jóvenes morían por todas partes

y mientras escuchaba música clásica les

oía hacer el amor, con desesperación y

tristeza, a través de Shostakovich, Brahms,

Mozart, a través de crescendos y clímax,

a través del muro común

de nuestra oscuridad.


Charles Bukowski de Peleando a la contra (1993) [2006]

Trad. José Manuel Álvarez Flórez, Ángela Pérez y Jorge García Berlanga.