Charles Bukowski
La teoría

nunca tuve problema en encontrar

trabajo, aunque no tenía oficio.

un amigo me dijo que me resultaba fácil encontrarlo

porque como era tan feo sabían

que si me contrataban estaría

tan contento con mi trabajo que

no lo dejaría.

puede que estuviera en lo cierto pero mi

amigo Bob se equivocó en el segundo

punto: casi nunca me quedaba mucho tiempo,

a menudo una semana, a veces dos

o tres, o un mes como máximo.


a mi amigo se le tenía por una persona inteligente

y talentosa

y me explicó aquella noche

mientras hacíamos horas extra

que a mucha gente le da miedo

contratar a hombres inteligentes como él

porque sabe que los hombres como él

cambian tarde o temprano de trabajo.


todo eso me lo decía hace 12 años.


ahora cuando me encuentro por la calle

con alguien de la fábrica

y le pregunto:

«por cierto, ¿sigue Bobby trabajando allí?»


la respuesta es siempre la misma:

«oh, sí, allí sigue…».


en fin, una cosa que sí tienen

los trabajadores es un fantástico

aparcamiento de tres niveles, pero la cafetería

es pésima

y el trabajo monótono y extenuante,

aunque mi amigo Bobby siempre tendrá

un bonito lugar en el que

aparcar

su

coche.


Charles Bukowski de El padecimiento continuo [2009]

Trad. Silvia Barbero