Charles Bukowski
Un lugar agradable

en un día determinado tanto si uno

se siente bien o normal o mal

puede sentarse en este lugar

entre fondeaderos

y escoger un centollo

fresco y vivo

por un dólar veinte la libra

te lo cocinan

y tú te llevas un martillo de palo y una hoja

de periódico

a una mesa de madera astillada

y miras los barcos pesqueros

allí atracados

a la vez que cascas tu centollo

y te lo comes

bajo el sol

y te bebes una cerveza

mientras la gente a tu alrededor está cómoda

y normal y cansada.


sí.

casca ese

centollo

mientras

el sol brilla a través de la

cerveza.