Charles Bukowski
Acerca de un lector preocupado por mi obra:
¿pero de qué escribirá?
me pregunta.
ya no vive con
putas,
ya no se mete
en peleas de bares,
¿sobre qué escribirá?
parece que le afecta muy de verdad
que los problemas no me
encuentren
o que yo no los
busque.
le digo que
los problemas siempre llegan,
que no se preocupe por
eso.
pero no
está dispuesto
a creerme.
parece pensar que
me he inventado mi
vida
para que se adapte a mi máquina de escribir
y que si mi vida va
bien
mi escritura irá
mal.
¿pero qué pensará
su público —me pregunta—
sobre el hecho de que viva en
una casa bonita y de que tenga dinero
en el
banco?
mi público puede seguir leyendo a Norman
Mailer, le
digo.
pero usted es muy distinto a Mailer,
me asegura.
en absoluto, le digo,
ambos pesamos unos 20 kilos
de más.
perplejo,
se me queda mirando a través
de unos ojos
grises de anciano