Charles Bukowski
tú
eres una bestia, dijo ella
con tu panza blanca
y esos pies peludos.
nunca te cortas las uñas
y tienes manos gordas
garras como un gato
esa nariz roja brillante
y las pelotas más grandes
que he visto nunca.
disparas esperma como una
ballena dispara agua por el
agujero de su lomo.
bestia bestia bestia
me besó
¿qué quieres para
desayunar?