Capítulo 87- Una mirada lejana
Se tambaleaba y su cabeza temblaba tremendamente. Sabia que alguien corría con fuerza, sosteniendo su cintura a un lado.
No es la primera vez que la llevan así. No es que esté acostumbrada a que la traten como a un objeto, pero ser llevada de esta manera por ella, menos considerada compañera, era algo poco común.
Meili: Vamos, Elsa.
Siempre es difícil saber cómo describirla, alguien que no le escucha por más que le advierta. No confió en ella lo suficiente como para llamarla su compañera, y no estaba lo suficientemente cerca como para llamarla su hermana o madre. No es una amiga, ni siquiera lo suficientemente cercana para ser una conocida.
Es por eso que siempre estaba perdida. ¿Cómo debe debe llamarla? ¿Qué pensaba Elsa que era ella?
Meili: No me sacudas.
No es algo que se pueda curar diciéndolo, pero no es bueno que la gente piense que se ha rendido sin decirlo, así que se quejó, o lo intentó, aunque sabía que no podía alcanzarla.
Antes de que pudiera hacerlo, cosas calientes salían de su boca, como si estuviera pintando sobre las palabras. Con un vomitó, creyó que había devuelto la comida, pero no. Era sangre roja, que salía de las profundidades de su propio cuerpo.
Subaru: ¡Mierda! ¡No puede dejar de sangrar! ¡Beako! ¿Qué debo hacer?
Beatrice: ¡De todas formas! ¡Veamos si puede terminar de vomitar toda la sangre! ¡No quieres que se ahogue con eso!
Escuchó a un hombre y a una mujer gritándose en su oído, y luego se inclinaron hacia un lado. Tosía y tosía, la sangre seguía fluyendo de su garganta a sus labios. Algo le golpeó en la boca, chupando la sangre imparable. Su garganta apenas estaba libre, y el aire fluía hacia sus pulmones y cerebro asfixiados.
Subaru: ¡Sí, eso es...! ¡Recuperó el aliento! ¡Magia de curación por favor!
Beatrice: ¡Ya sabes lo que quiero decir! Pero no puedo molestarme con eso todo el tiempo, supongo.
Subaru: ¡Tú también lo sabes! Fue mi error dejar que Meili fuera demasiado lejos. Asumiré las consecuencias por eso.
Discutían sobre algo que estaba por encima de su cabeza, pero en cuanto pudo respirar, su cuerpo empezó a sentirse cada vez más pesado. No, tal vez su cuerpo siempre había sido pesado. Con el cambio en la gravedad de la situación, su conciencia se vuelve hacia el resto del mundo, y como resultado, puede ver todo el cuadro del daño.
Las extremidades, no se mueven. Su cabeza está tambaleante. La cantidad de sangre que ha vomitado es de unas tres tazas de sangre. Todo su cuerpo está muy caliente, pero es su espalda la que está especialmente más caliente.
En general, sintió algo muy incómodo en su espalda. Probablemente por eso no puede mover su cuerpo adecuadamente y por eso esta vomitando sangre. No puede recordar lo que pasó justo antes, o lo que pasó con el chico y la chica que estaban discutiendo entre ellos. Pero hay algo que se adhiere en el oscuro y vago mundo de todo eso y es...
Subaru: Rápido, rápido.
Sintió que había intercambiado eso con alguien más, y eso es todo lo que podía pensar.
※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※
En el momento en que el color del cuerpo del gran escorpión cambió, la luz que explotó fue la más grande hasta ahora. La hinchada luz blanca se dispersó en todas direcciones, los múltiples Reyes Caballo Hambrientos apuntaron a su caparazón de color carmesí, que se rompió en trozos, y las secuelas se expandieron, y el mar de arena se agrietó.
Por supuesto, Subaru y Beatrice no se salvaron del daño, pero la que fue aún peor golpeada fue Meili. Había estado al frente del comando de las mabestias, y fue golpeada por el gran escorpión, el contraataque del Escorpión Rojo fue bastante intenso.
La parte afortunada era que había escapado de un golpe directo del aguijón de la cola, que era la verdadera identidad de la luz. Si hubiera sido arrebatada por el aguijón de la cola, el pequeño cuerpo de la chica se habría vaporizado en un instante.
No tenía que ser así. Sin embargo, el gancho de cola desviado aplastó el mar de arena y dio un buen mordisco a la onda expansiva que se generó cuando lo hizo. Eso solo fue más que suficiente para causar una herida cercana a la muerte.
Beatrice y Subaru: ¡Meili!
Se veía terrible cuando Subaru y Beatrice se precipitaron debajo de ella mientras caía a la arena y la recogieron. Se enrolló rápidamente, y la mayor parte del impacto de la onda expansiva fue en su espalda. Su capa negra había sido volada, revelando la corteza triturada debajo de su ropa desgarrada.
Parece que hay severas laceraciones y quemaduras, y por un momento, los ojos de Subaru se oscurecen delante de ella.
Subaru: ¡Soy un idiota! ¿Para qué estoy aquí?
Llamando a su conciencia distante con sus puños y huesos, Subaru llama a su fuerza interior. Utilizando el poder del 『Corazón de León』, que se activa constantemente, para asumir la carga de sus amigos, asumió el daño casi fatal que recibió Meili. Por supuesto, si todo el asunto se quita y Subaru cae, sería todo eso para nada.
Es necesario mantener a Meili viva y al mismo tiempo evitar que Subaru caiga en coma.
Subaru: Está bien. Puedo hacerlo. Puedes hacerlo, Natsuki Subaru.
En el pasado, podría haber estado desconcertado, angustiado y expuesto aquí como una abominación desdichada. Pero después de recorrer el camino seguido por Natsuki Subaru, Subaru se miró a sí mismo de nuevo. Sin mencionar su propio papel, y lo que sólo él podía hacer. Así que...
Subaru: Emilia-tan y Julius estarán bien. Echidna, Patrasche y Rem estarán bien.
Explora las reacciones de sus compañeros en la torre y busca la mejor solución en sus respectivos estados. La falta de respuesta de Emilia es preocupante, y la condición de Julius mientras lucha contra Reid también es preocupante.
La posición de Echidna y Patrasche y los demás también era preocupante, pero la confianza la hizo a un lado. En cambio, la atención de Subaru se centra en Ram y en Meili frente a él.
Meili: Gu...
Instantáneamente, la agonía que Meili saboreaba fluía, y Subaru se quejaba del dolor que le quemaba las tripas. Para ser honesto, el peso de la carga de Ram fue bastante agotador. Pero hacerse cargo de las heridas cercanas a la muerte de Meili, sería un verdadero suicidio.
Subaru: ¡Oh no!
A pesar de su discurso, era imposible asumir ambas cosas hasta el limite. Si ese fuera el caso, no tendría más remedio que dar prioridad a la vida de Meili, y Subaru no tendría más remedio que reducir el grado de carga que fluía de Ram a él. Tal vez eso sea suficiente para decirle a la perspicaz Ram lo que está pasando.
Subaru: Más tarde, definitivamente me regañaran.
"¡Ja! Después de todo ese discurso, así es como te ves. Típico de Barusu."
Se imagino una reacción asquerosamente realista, y Subaru soporta el sabor de la sangre con una sensación amarga.
El efecto del 『Corazón de León』 se supone que es sólo una carga, pero el hecho de que se pueda sentir el sabor de la sangre es la prueba de que algún tipo de consecuencia está ocurriendo en el cuerpo de Subaru.
El efecto de las creencias en el cuerpo es extraordinariamente grande. Ha oído que el fenómeno de las quemaduras reales puede ocurrir en los cuerpos de aquellos que creen que han sido presionados con hierro quemado.
En otras palabras, hacerse cargo del daño de la espalda y los órganos internos gravemente heridos de Meili produciría la misma reacción en el cuerpo de Subaru. Si esto no se hace bien, podría resultar en el nacimiento de dos cadáveres con la misma causa de muerte.
Subaru: Eso es un pequeño problema, así que...
Escupiendo la sangre que se le acumulaba en la boca, se puso de pie, llevando el cuerpo de Meili. Luego se echó hacia atrás y esquivó la lanza flameante del Rey Caballo Hambriento y se distanció con el Minya de Beatrice. El Rey Caballo Hambriento que los atacó ahora, era una de las mabestias que había llevado a Subaru y a los otros hace un momento.
Tan pronto como la situación se puso mala, la mabestia que era inteligente en sus intereses los traicionó inesperadamente, no es que fuera una traición, es sólo que la Protección Divina de Meili se agotó y volvió a su forma normal de tratar con las cosas.
Si no fuera por las instrucciones de Meili, las mabestias que son las alimañas de la humanidad que consideran a Subaru y a los demás como sus enemigos. Y tales mabestias existen ahora en un numero incontable en este mar de arena.
Meili: Gehoho.
Subaru: ¡Meili!
Meili vomita sangre en el brazo de Subaru mientras corre, manteniendo la distancia de la mabestia. Meili tose sangre y su agonía aumenta en frustración. Ni siquiera tiene tiempo para calmarse y tratarla. Si este es el caso...
Subaru: ¡Mierda! ¡No puede dejar de sangrar! ¿Beako!Qué debo hacer?
Beatrice: ¡De todas formas! ¡Veamos si puede terminar de vomitar toda la sangre de su boca! ¡No quieres que se ahogue con eso!
Beatrice usa su poco maná para mantener a las mabestias circundantes lejos de ella, mientras llena la diferencia de zancadas con trabajo duro. Mientras tanto, Subaru sacude el cuerpo de Meili e intenta que escupa la sangre de su garganta.
Sin embargo, eso no cambio el color de la cara de Meili y la sangre no se detuvo. Cuando no se pudo evitar, Subaru creo un tubo improvisado hecho con su puño contra la boca de la chica y chupó la sangre a través de ella.
Meili: ¡Eho...! Cielos.
Subaru: ¡Sí, eso es...! ¿Recuperó el aliento! ¡Magia de curación por favor!
Beatrice: ¡Ya sabes lo que quiero decir! Pero no puedo molestarme con eso todo el tiempo, supongo.
Subaru: ¡Tú también lo sabes! Fue mi error dejar que Meili fuera demasiado lejos. Asumiré las consecuencias por eso.
Técnicamente, la factura de su error ya ha empezado a ser pagada por Subaru. Sin embargo, los intereses se acumulaban a un ritmo tremendo, y Subaru ya respiraba con dificultad, incluso mientras reducía el peso a Ram. Se pregunto cuanto tiempo mas puede comprar a este ritmo.
Subaru: No, aquí es donde de estar. Si no lo hago aquí, la situación se pondrá...
Beatrice: ¡Uh! ¡Me sorprende! ¡Oh!
Subaru apretó los dientes y corrió con Meili en sus brazos mientras saboreaba los efectos de su Autoridad en todo su cuerpo. Beatrice de repente salta sobre la cabeza de Subaru. Inesperadamente, Subaru se sorprende al descubrir que ha tomado la forma de un carruaje con sus hombros.
Por supuesto, Beatrice es tan ligera como el algodón de azúcar, así que eso no impedirá que escape, pero...
Subaru: Beako...
Beatrice: Subaru, no tienes que pasar por todo por ti mismo. Betty y Subaru son socios, y Meili es probablemente una de ellas. No es sólo Subaru que prometió ayudar.
Subaru: ――――
Sosteniendo suavemente toda la cabeza de Subaru en sus brazos, Beatrice lo llama con voz baja. A través de Subaru, que se calla al oírlo, comienza a tratar las heridas de Meili con su suave magia curativa. La sensación de una luz cálida que cura suavemente a Meili, que se transmite a Subaru a través de ella también. Esta calidez también significa que Beatrice está pensando en todos.
Escorpión: ――――ϡ
Subaru: ――――
Detrás de ellos, la rivalidad de las mabestias continuó. Afortunadamente, parece que aunque la Protección Divina de Meili fue cortada, no hubo paz inmediata entre el Escorpión Rojo y los Reyes Caballo Hambrientos. Lo mismo sucedió con las mabestias.
Las grandes tenazas y el aguijón de la cola del Escorpión Rojo eliminarán la mitad de las mabestias que se acercan a Subaru y a los demás. Naturalmente, la otra mitad no se lo tomará con calma mientras les apunten.
Subaru: La opción es...
De hecho, no es que no lo haya. Teniendo en cuenta las palabras que Beatrice le había dado, y sus pensamientos sobre el cuidado de Meili, había ciertamente un medio de cambiar, si no de romper con esta situación en la que se encontraba.
Sin embargo, como era imposible saber si era tactible o no sin intentarlo, y como el modelo de ese método era el peor oponente para Subaru, dudó en ejecutarlo. Sin embargo...
Beatrice: ¡Subaru! Si la razón de la duda es por Betty, ¡entonces no la quiero! Si la razón no es Betty, ¡puedes disculparte conmigo más tarde!
Subaru: ――――
Beatrice: Quiero sufrir contigo, quiero alegrarme contigo y quiero que dejes a Betty fuera de esto. Me pregunto si es una condición del contrato de Betty con Subaru.
Beatrice grita con rabia por lo que ve en el perfil de Subaru, que la tiene en sus brazos. No puedo ver la cara actual de Beatrice porque está justo detrás de su cabeza. Pero es la orgullosa compañera de Subaru la que es adorable incluso cuando esta enojada.
Así que las palabras de esa compañera le dan valor, y Subaru se endulza con ellas. No hay tiempo para preocuparse por eso.
No hay necesidad de preocuparse por eso, porque su compañera le dijo que no lo hiciera. Y así...
Subaru: Te quiero, Beako.
Beatrice: Betty es mejor de lo que crees.
Intercambiaron afecto entre ellos, y Subaru miró a la moribunda Meili en sus brazos. Y entonces decidió nunca quitarle esa vida, y...
Subaru: Corazón de León, Segunda Fase.
Dando un nuevo nombre al 『Corazón de León』 que él mismo había nombrado, claramente cambió de marcha dentro de si mismo. Al hacerlo, expandió su Autoridad como un Pequeño Rey autoimpuesto, una forma de ser un rey solitario, parado en la espalda de los pensamientos de todos, y fue regañado por ello.
Pero eso no significa que no pueda ser desvergonzadamente Codicioso al imponer sus cargas a otra persona. Así que lo que Subaru quiere al final de esta Autoridad es compartir su carga con sus amigos que quieren estar con el y que quieren que el esté. En otras palabras...
Subaru: Segunda Fase: Compartir la carga.
Esta es la carga que Subaru tuvo que probar solo y con todo su trabajo, y sus amigos. La carga que Subaru tuvo que soportar solo y con otros que estaban dispuestos a compartir. Por ahora, por el momento...
Beatrice: Subaru.
Subaru: Si.
Beatrice: ¡Espero que no sea demasiado difícil para ti!
Subaru: ¡Oh, es tan jodidamente difícil!
Se activa la Segunda Fase del Corazón de León y se distribuye la carga tomada por Subaru.
No es la mitad. Es más o menos la mitad de la mitad, pero aun así, la carga de Subaru se hace mucho más ligera, y Beatrice, que lleva la carga con él, se vuelve más pálida. Beatrice le gritó como para disimular su dolor, y Subaru también le gritó en voz alta.
Doloroso. Es doloroso. No puede hacerlo. Va a asumir toda la carga de todos los demás, al diablo con ser un rey. No puede estar solo, el Pequeño Rey no puede estar solo, así que es gracias a todos los que quieren apoyarlo que puede estar de pie.
Subaru: Por cierto, este sufrimiento, no lo compartiré con ustedes.
Escorpión: ――――ϡ
Beatrice: Qué pena que no lo hagamos.
Mientras Beatrice, que comparte la carga y la lleva sobre sus hombros, trata a Meili, Subaru dirige su atención al Escorpión Rojo. Siente que la identidad es Shaula, y que sigue conectada a ella en la existencia a través del 『Corazón de León』. Que hay una débil y gran luz allí.
Pero, por desgracia, ella es aparentemente incapaz de entregar la carga que Subaru y Beatrice prueban a ese Escorpión Rojo. Porque la voluntad de recibirlo no está en ella en este momento. La única persona que puede apoyar al Pequeño Rey es la persona que quiere apoyarlo.
Es muy fácil de entender y saber que es poder inflexible. Por eso no tiebe que ser arrogante. Porque nunca puede olvidar que tiene el apoyo de otra persona.
Subaru: ¡Un Beako! ¡Deja de jugar en mi cabeza y cura su cuerpo!
Beatrice: ¡Es la clase de tipo que pide las órdenes más duras!
El cuerpo pide la continuación del tratamiento de Meili, y la cabeza pide el siguiente avance en la situación juntos. Debido a que la luminiscente cola del Escorpión Rojo apunta a Subaru y a los otros...
Subaru: ¡E • M • M!
La primera carta de triunfo, la Magia de la Invencibilidad Absoluta, fue puesta y una onda de choque envolvió a Subaru y a los otros tres.
※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※
Los eventos bajo las nubes no se transmiten a Emilia por encima de las nubes. Sin embargo, al igual que sus amigos que luchaban por sus vidas, Emilia había llegado finalmente al lugar al final de la feroz batalla que había atravesado.
Emilia: ――――
Alcanzando el piso superior de la Atalaya de Pléyades, incluso más alto que un piso, la parte superior del verdadero significado de la palabra. En ese lugar, al que se llegó después del sacrificio de un gran numero de Soldados de Hielo, lo que Emilia vio fue la base del pilar central, y el monolito negro colocado allí.
El monolito en sí parece ser el mismo que se vio durante la 『Prueba』 del tercer piso. La diferencia era que el monolito no estaba flotando,y había un rasgo llamativo en la superficie de lo que debería haber sido una superficie plana. Fue...
Emilia: ¿De quién es la huella de esta mano?
Los ojos amatista de Emilia se enrollaron, y en su visión había múltiples huellas de manos estampadas en la superficie del monolito, seis en total, las huellas de diferentes manos tanto de hombres y mujeres.
Por el tamaño de sus palmas y el grosor de sus dedos, uno podría decir que eran todas manos humanas separadas. Sin embargo, como se tomaron la molestia de dejar sus huellas en tal lugar, no hay duda de que estas personas estaban cerca unas de otras y que estaban relacionadas con esta torre de vigilancia, y...
Emilia: ¿Podría ser que son del maestro de Shaula o Reid?
Es lo único en lo que Emilia piensa cuando piensa en la gente involucrada en la torre. Y luego esta Volcánica, aunque también está Volcánica, no hay señales de que un dragón haya dejado sus huellas, ya que todas son huellas de manos humanas aquí.
Así que sólo hay dos de las seis personas que corresponden a las huellas de la mano que Emilia puede pensar.
Emilia: Espera, esto es...
Habiendo pensado tanto, Emilia se sintió incómoda con una de las huellas. Era una huella de mano estampada un poco al final de las huellas, hay una huella de una mano al lado que es aproximadamente del mismo tamaño, pero sólo las dos del final son claramente más pequeñas.
Probablemente porque esos son las únicas dos huellas que son femeninas. fue eso lo que atrajo la atención de Emilia.
Emilia: ¿Estas huellas son mías?
Emilia frunce el ceño, mirando hacia abajo a su mano derecha y murmurando para si misma dijo eso. Es una cosa extraña, pero no se siente así. Una de las huellas de manos estampadas en ese monolito, parece que es la de Emilia.
Emilia: ――――
Jadeando, Emilia se enfrentó al monolito. Entonces, para aclarar sus propias dudas, extendió su mano derecha a la huella, y...
Volcánica: Tú, desafiante, que has llegado a la cima. Deberás atravesar este primer piso.
Emilia: ¡Hey! ¡Has vuelto!
Justo antes de tocar el monolito, Emilia se giró ante la voz severa que descendía desde arriba. Luego, agitando sus alas y descendiendo al piso superior estaba Volcánica, que se retorcía violentamente cuando el Soldado de Hielo de Emilia tocó antes la escama blanca de su garganta.
Emilia: ――――
Con el monolito a sus espaldas, Emilia se enfrenta una vez más al 『Dragón
Divino』. La lucha para subir a los pilares también fue muy difícil, pero si es una continuación de la anterior aquí, tendrá una lucha muy dura. Aunque hay una cantidad razonable de espacio, el espacio en el piso superior es más pequeño que el primer piso, lo que hace difícil mantenerse de pie.
Emilia: Además, si el monolito es destruido, estaremos en grandes problemas.
No sabe cuán fuerte es el monolito. Incluso cuando se encontraron con el monolito en el tercer piso, fueron detenidos Julius, Ram y los demás para que no intentaran golpearlo, por lo que su resistencia sigue siendo desconocida.
Sin embargo, no importa lo fuerte que se haya hecho, es muy difícil para Emilia creer que estaría a salvo de ser golpeada con todas sus fuerzas por el 『Dragón Divino』.
Emilia: Si lo golpeas, estoy segura de que será destruido. Así que...
No puede dejar que lo haga, Emilia convoca de nuevo a siete Soldados de Hielo a su alrededor. Estos Soldados de Hielo fueron aplastados para llegar al piso más alto, pero como en Emilia, sus rostros están llenos de motivación y tranquilidad.
Mientras preparaban sus armas de hielo, tomaron las dos espadas de hielo de Emilia en ambas manos. Entonces, como uno con los siete Soldados de Hielo, se precipitaron hacia Volcánica.
Emilia: ¡Vamos, chicos! ¡Volcánica tiene un punto débil color blanco en su cuello!
Como mostró una reacción tan feroz, esa escama blanca es el punto débil de Volcánica. No quiere llegar a dañarlo, pero si alguien puede alcanzarlo, aunque sólo sea un toque, Emilia debería poder tomarse el tiempo de examinar ese monolito.
Emilia: ¿Qué?
En el siguiente momento, Emilia se desvanece mientras su visión se mueve hacia arriba y hacia abajo en círculos.
Emilia: ――――
Fue demasiado rápido para juzgar lo que había sucedido. Lo único que sintió fue la sensación de que algo tocaba rápidamente su pie al dar un paso adelante. También fue tan modesto que se dio cuenta de que le habían tocado después de que se diera la vuelta. Y al mismo tiempo...
Emilia: Oh.
Alrededor de Emilia, cuyo cielo y tierra se pusieron patas arriba, siete Soldados de Hielo se rompieron todos a la vez. Todos ellos tenían sólo sus cabezas aplastadas con destreza, transformándose en polvo de maná sin ninguna forma de hacerlo. Cuando lo sintió en su piel, Emilia se dio cuenta con un escalofrío. Esa era la cola de Volcánica.
La cola de Volcánica rozó las piernas de Emilia a gran velocidad y partió las cabezas de los Soldados de Hielo con la misma cola. Su garganta se congeló cuando se dio cuenta de que esto se logro con un giro de la cola de alta velocidad. Rápidamente, fue un orden de magnitud más rápido que el primer golpe sorpresa que Emilia había podido evitar.
Si el látigo de Subaru fuera un uno, el golpe de la cola de Volcánica sería de mil o diez mil, o algo así. Antes de ese poderoso ataque, incluso Emilia habría sido despiadadamente derrotada. Así que al ver eso le surgió una pregunta.
Emilia: ¿Por qué has sido tan amable conmigo?
Contra Emilia, fue un barrido de pies, y contra los Soldados de Hielo, fue un aplastamiento de sus cabezas. ¿Cuál es la diferencia que se creó aquí? Aunque es difícil de creer que se la haya menospreciado porque tiene la misma cara que acaba de tocar las escamas blancas.
Y después de pensar tan lejos, Emilia se recuerda a si misma que aun no ha salido de la situación del cielo y tierra invertidos.
Emilia: No debería...
Tal como está, casi se ha tirado de cabeza al suelo. Una vez más, un suave golpe golpeó las piernas de Emilia en el aire cuando se dio la vuelta y la golpeó de lado.
Emilia: ¡Woah, ah, ah!
Desde el estado invertido, Emilia fue girada y medio girada, y aterrizó peligrosamente. Y entonces, cuando ella mira de cerca...
Volcánica: ¿Qué estás haciendo?
Mientras decía eso, estaba la figura del 『Dragón Divino』 metiendo su cara delante de los ojos de Emilia.
Emilia: ¿Eh?
Estaba literalmente delante de sus ojos y su nariz. Tan cerca que si Emilia pusiera su cara hacia adelante por un momento, su nariz estaría en contacto con su piel robusta y afilada como una roca. La presencia del rostro del dragón a esa distancia, en si misma, fue una sorpresa para Emilia. Pero lo que desconcertó a Emilia aun más que eso fue...
Emilia: ¡Estás hablando de forma diferente a como lo has estado haciendo antes!
Volcánica: ――――
Emilia: ¿Has entrado en razón? Entonces, ¿puedes contarme más sobre esto? Tengo muchas dudas sobre la 『Prueba』 y el cambio de las reglas de esta Torre de Vigilancia y así sucesivamente...
Viendo la esperanza en la condición de Volcánica, Emilia la llamó en rápida sucesión. Si el 『Dragón Divino』 que ella pensaba que se había vuelto muerto de la mente ha revivido, entonces puede hablar de la 『Prueba』 de nuevo. Entonces no hay necesidad de recurrir a medios irrazonables y violentos.
Emilia: ¡Oye, por favor! Hablemos de esto adecuadamente.
Volcánica: ¿Qué harás si te caes? Estoy seguro de que seré reprendido si algo sale mal. Porque no puedo alcanzarla a usted.
Emilia: ¿Volcánica?
Emilia está preocupada por el estado de todos los de la torre y lo llama desesperadamente, Volcánica una vez más dice algo que no es una repetición de lo que le dijo a Emilia. Sin embargo, el contenido de estas palabras no parecía ser una respuesta a las palabras de Emilia, y su confusión se profundizó.
Sólo que los ojos dorados de Volcánica mirando a Emilia, los ojos dorados de Volcánica, tenian un color tranquilo. Es una luz de emoción, diferente del estupor y la ambigüedad de la anterior. Mira a Emilia suave, calmadamente, compasivamente, y...
Volcánica: ¿Dónde están Flugel y Reid? Shaula te echará de menos si no tienes algo para despedirte. Farsale, también, hagamos algo de ruido.
Emilia: ――――
Volcánica sigue hablando mientras mira a Emilia con ojos amables. Con sus ojos mirando algún objeto distante, el dragón dijo los nombres de Flugel, Reid, Shaula, y el otro que le era difícil saber con seguridad quién era sin preguntar el nombre de la familia, pero Emilia recordaba cómo sonaba. Farsale y si era como Emilia lo recordaba.
Emilia: ¿Farsale, Farsale Lugunica? ¿Un rey hace cuatrocientos años?
Es un hombre cuyo nombre ha sido mencionado muchas veces en la literatura en sus estudios para la Selección Real. Farsale Lugunica, el trigésimo quinto rey del Reino de Lugunica y un gran hombre que gobernó el país durante la época de la Bruja hace cuatrocientos años.
Y el último Rey León, que firmó un pacto con nada menos que Volcánica, el 『Dragón Divino』, y marcó el primer paso en la larga prosperidad del Reino de Lugunica.
Emilia: ――――
Mirando a su alrededor, Emilia vuelve su mirada al monolito que hay detrás de ella. Las seis huellas, si las palabras de Volcánica no son irrelevantes, entonces las tres personas en las huellas son Flugel, Reid, y quizás Farsale.
Los otros tres son desconocidos, pero uno de ellos puede coincidir con la huella de la mano de Emilia, aunque no está confirmado. El resto son probablemente un hombre y una mujer.
Emilia: ¿Entonces la huella de la mujer es la de Shaula?
Como posibilidad, ese es el escenario más probable. No sabe la identidad de la última huella de hombre, pero se conforma con eso por ahora. Como siempre, el mayor problema en este momento es el hecho de que tiene su propia huella que no conoce, y...
Emilia: De ninguna manera, todavía te olvidas de algo que no sea yo, ¡Madre del Bosque!
Si empieza a dudar, Emilia tiene una historia de mantener sus propios recuerdos. Incluso si no lo hace, está en un estado en el que sabe que gracias a la presencia del Arzobispo del Pecado de la Gula, sus 『Recuerdos』 y su 『Nombre』 pueden ser estropeados. No está segura de que Emilia haya venido aquí antes y puesto su huella, pero se haya olvidado de ello.
Emilia: No, no debería ser así a cualquier precio. Si Puck hubiera estado aquí, lo habría sabido si hubiera estado aquí.
Volcánica: ¿Qué pasa? ¿Te molesta algo?
Emilia: No, estoy bien. Gracias por preocuparse por mí. Gracias.
Al final, el establecimiento de una conversación con Volcánica se siente sospechoso, y Emilia está molesta. Es mucho mejor que ser golpeada por su cola y sus patas sin duda, pero el hecho de que la situación siga en el limbo en cuanto a la 『Prueba』, permanece. Lo que hay que hacer, Emilia reflexiona sobre ello.
Volcánica: Habla. Habla y dime lo que tienes que decir, y yo te quitaré la duda, Satella.
Así es como la llamó, y ella sólo se quedó en silenció.
Emilia: ――――
Satella, no es la primera vez que la llaman así. Cabello plateado, ojos amatista y una media-elfo, muchos humanos en este mundo asocian a Emilia con el mismo ser cuando la ven con sus rasgos. La única otra diferencia es cómo la llaman.
Algunos la llaman Satella, otros la llaman la peor calamidad, y otros la llaman la 『Bruja de la Envidia』. Así que no es una sorpresa que alguien llamara así a Emilia. Sin embargo, fue extraño que Volcánica nombrará el nombre de Satella con tanto afecto.
Porque Volcánica, Reid y Flugel, que habían obligado a Shaula a tomar el crédito por sus propios logros, fueron los que sellaron a Satella, que fue llamada la 『Bruja de la Envidia』. ¿Cómo puede ser ese el caso?
Emilia: ¿Por qué me hablas en voz baja de la 『Bruja de la Envidia』?
Fue una pregunta algo inadvertida llamarla así. Habría sido terrible pedirle a Emilia que se diera cuenta en este momento, pero al menos, al mirar la situación objetivamente, era esta única palabra la que se había convertido en el punto de partida. O tal vez podría haber sido Satella, o incluso Bruja.
Algunos la llaman Satella, otros la llaman la peor calamidad, otros la llaman Bruja. Y Emilia la llamó la 『Bruja de la Envidia』. Es por eso que...
Volcánica: La 『Bruja de la Envidia』.
Produjo un cambio en los ojos como una mirada distante por parte de Volcánica. Los ojos dorados de Volcánica, el cambio que ocurrió allí fue dramático. Sin cambios, la cabeza del dragón que miraba a Emilia estaba justo delante de sus ojos y su nariz.
Por eso todo el cuerpo de Emilia se paró de punta, captando la magnitud del cambio de cerca personalmente, y todo el cuerpo de Emilia se erizó. Tiene la sensación de que este no es un buen cambio. Emilia, que creció en el bosque, tiene la experiencia de haber crecido en la naturaleza.
En tal situación, ha visto muchos animales que cambian y mabestias que cambian muchas veces. Siguiendo sus sentidos, Emilia voló hacia atrás como si estuviera jugando. Esa fue la decisión correcta.
Emilia: ――――
Instantáneamente, el aire frente a Emilia explotó frente a ella. No fue una exageración ni nada, fue literalmente una compresión del espacio, e inmediatamente después se hinchó y explotó. El fenómeno sin principios era extraño, como si el espacio mismo se hubiera retorcido, y si estabas en esa posición, se retorcía sin importar la dureza o la suavidad de su protección.
Y ocurrió justo donde estaba la cabeza de Emilia. Si hubiera tardado en bajar la cabeza un momento, Emilia habría muerto. Ya fuera por el golpe en la cola o por el actual giro en el espacio, Emilia había experimentado muchas situaciones que podrían haberle causado la muerte desde que subió a la cima de la torre.
Puede que sea la primera vez que se encuentra en una situación tan peligrosa para su vida.
Emilia: Pero si todo es manejable, eso significa que podríamos estar en una situación inesperada.
Si el elemento de la suerte de su lado mantuvo viva a Emilia, entonces el hecho de que fuera capaz de respirar así fue resultado de su buena suerte, por lo que Emilia interpretó su situación de forma positiva. Si no, casi se sentiría humillada por los continuos cambios en la situación.
Volcánica: Satella.
Es porque Volcánica, que ha desplegado sus alas de nuevo, está apuntando una cierta hostilidad hacia ella. Viendo esto, Emilia soporta el deseo de pisar el suelo. Aunque parecía que Volcánica había vuelto a sus sentidos por fin, ha vuelto a la batalla. Por el contrario, a diferencia de cuando parecía estar medio dormido antes, parece estar más motivado.
Emilia: Linea de Carámbanos.
Por lo tanto, Emilia no tuvo nada fácil para ella, y desató su propio poder mágico con una resolución inquebrantable. La atmósfera se agrietó fríamente y una neblina blanca comenzó lentamente a entrar. No cambia si es el piso superior de la Torre de Vigilancia situada sobre las nubes o no, lo que hace que el mundo se congele en blanco.
Haciendo un sonido y levantándose lentamente es una armadura de hielo, sacando una lanza de ellos que se pega al suelo, Emilia la gira y la apunta al frente. Una vez más, se preparó para una batalla contra Volcánica. Sin embargo, si el tiro que barrió a Emilia de sus pies, si eso fue una jugada seria de Volcánica, entonces no sabe si Emilia será capaz de responder a este próximo ataque.
El es un orden de magnitud mas fuerte que cuando estaba "muerto", no, todavía parece estar "muerto" ahora.
Emilia: Pero...
Mirando fijamente a los ojos dorados del otro, Emilia no quiso descartar la actitud de Volcánica como si fuera un "muerto". Porque los ojos de Volcánica estaban llenos de dolor y de tristeza.
Volcánica: Satella, eso es, Satella. Debemos evitar que te conviertas en la 『Bruja de la Envidia』.
Emilia: ¿Eran buenos amigos?
Volcánica: Si no hubiera vacilado ese día, nadie habría vacilado ese día. Si no hubiera vacilado ese día, nadie habría...
No hubo respuesta a la pregunta. Pero la voz temblorosa de Volcánica parecía ser la respuesta en sí misma. El Dragón arrepentido respiró pesadamente, y luego vino el aliento que volvería a quemar el mundo en blanco. Antes de eso, Emilia tendría que intervenir y golpear esa escama blanca. Si no pudiera hacer eso, Emilia, y por supuesto, todos los demás, no podrían salvarse.
Emilia: Subaru, Beatrice, Ram, Rem, Meili, Patrasche-chan, Echidna, Julius y Anastasia-san.
Piensa en todos los que están en esta torre y están pasando por mucho. Todos los que necesitan ser salvados, todos los que buscan el mismo propósito. Al hacerlo, en lo profundo del pecho de Emilia, un poder desconocido surge de allí.
Volcánica: 『Bruja de la Envidia』, Satella.
Emilia: No, no. Soy Emilia, la Bruja de Hielo del Gran Bosque de Elior.
Está segura de que podrá averiguar más sobre esto con sus propias palabras. Es una buena idea poder echarle un vistazo. No va a ser la única. Así que...
Emilia: Sólo recuerda mi nombre, ¿sí?
La fase final que rodea la Atalaya de Pléyades, la luz explota por encima y por debajo de las nubes simultáneamente.