Capítulo 79- READY STEADY GO
El escorpión gigante fue quien disparó el primer golpe para iniciar la batalla.
"――――"
Sus ojos rojos compuestos brillaron intensamente, e inmediatamente después, un rayo de luz blanca brotó de su cola oscilante. Lo aterrador de eso, fue que su golpe, que significó como fatal para ellos, había sido disparado sin ni siquiera uno de sus típicos gritos. Sin ni siquiera un siseo, el escorpión gigante hizo llover con indiferencia la muerte hacia ellos.
Subaru tenía toneladas de malos recuerdos asociados con esa luz blanca. Específicamente, lo había matado en aproximadamente la mitad de sus más de quince intentos dentro de la torre.
Sin embargo, dado que lo había matado tanto, aprendió un par de cosas, a pesar de lo mucho que lo despreciaba.
A saber…
Subaru: ¡El tiempo que tarda en cargarse y las señales que muestra cuando está a punto de atacar ...!
Los ojos compuestos del escorpión y el aguijón brillaron un poco más cuando estaba a punto de desatar un ataque. Estos signos eran tan sutiles, hasta el punto de que pensó que solo estaba viendo cosas, pero este ojo para la supervivencia era lo que Subaru había desarrollado a través de sus pruebas y errores mortales.
Haciendo pleno uso de él, Subaru corrió con Beatrice en sus brazos, tomando la responsabilidad de cerrar la brecha entre ellos y el escorpión gigante. Con la razón de ser…
Subaru: ¡Su velocidad de carga es muy lenta…!
Con un giro de su cuerpo, esquivó el rayo de luz blanco que había brotado mientras decía eso.
Incluso si había dicho que el rayo de luz era lento, seguía siendo mucho más rápido que un lanzamiento de un jugador de béisbol de secundaria de mala calidad. Sin embargo, afortunadamente, confiaba en su capacidad para saber si un lanzamiento era bueno o no. Y en cualquier caso, no había forma de que se mantuviera vivo sin poder hacer eso.
Un gran hombre había dicho una vez que la vida se trataba de ensayo y error. Sin embargo, probablemente no había imaginado estas situaciones de vida o muerte cuando dijo eso.
Aun así, aprendes cometiendo errores. Esa era una verdad inmutable. Subaru "afortunadamente" tenía la capacidad de pasar por prueba y error en situaciones de vida o muerte.
Había hecho un uso completo de eso para encontrar su ojo para sobrevivir. Así que esta era la arena de Natsuki Subaru.
Subaru: ¡Lamento no poder estar a la altura de todas tus expectativas, otro yo!
(NT: Subaru de hecho se refiere a sí mismo usando 俺 aquí. Opté por usar "otro yo" simplemente porque suena más nítido en inglés, pero él literalmente solo está diciendo "yo")
Subaru ofreció una sincera disculpa a su otro yo que había buscado al todopoderoso Natsuki Subaru. Era como si les estuviera diciendo: "Lo siento por solo poder pelear sucio". Beatrice, sin embargo, reaccionó con un bufido "Hmph". Ella todavía estaba sostenida con fuerza entre sus brazos, bailando en este giro de vida y muerte con él.
Beatrice: De qué estás hablando, de hecho. Supongo que nunca has dejado de estar a la altura de nuestras expectativas.
Beatrice habló, luego levantó la mano en un instante. Con sus finos labios, cantó la palabra "Murak", una especie de Magia Yin que manipuló la ley de la gravedad.
El escorpión gigante una vez había sido golpeado con sus efectos y empujado muy por debajo de ellos. Así que esta vez, el escorpión reforzó su caparazón negro azabache y plantó sus patas firmemente para que no volviera a pasar por lo mismo.
Sin embargo…
Meili: ¡Estás jugando en mis manos si te vas a quedar quieta!
Un aluvión de mabestias comenzó a atacar al escorpión gigante inmóvil.
Las mabestias de aspecto extraño de las que Meili había ordenado el ataque se llamaban "Hanemogura". Se parecían a lo que obtendrías si cruzaras alas y cuernos juntos. Y al igual que las balas que no tenían miedo a la muerte, dispararon hacia el escorpión gigante y sin vacilar golpearon su duro caparazón con sus cuernos. Los sonidos de ellos chocando contra él se superpusieron con los sonidos de romperse.
El escorpión gigante se retorció de dolor y levantó sus grandes tenazas en represalia.
???: ―――― ϡ ϡ
Lo que siguió al ataque en su lugar fue la más extraña de todas las figuras de aspecto extraño. Un ser que fue la manifestación misma de una noche plagada de pesadillas, el Centauro que fue un cruce entre hombre y caballo, el “Rey Caballo Hambriento”.
El terrible llanto de los bebés se colaba por el balcón de la atalaya. Junto con él vino un rugido rechinante que le hizo querer taparse los oídos, y luego una ráfaga de llamas que llenó violentamente el área a su alrededor, casi hasta el cielo.
Rey Caballo Hambriento: ―――― ϡ ϡ
El Rey Caballo Hambriento no dudó y clavó su lanza de fuego en el corazón de las llamas. Su punta al rojo vivo iba a dar un golpe crítico que quemaría incluso el caparazón de hierro del escorpión.
El escorpión gigante era abrumadoramente fuerte cuando se trataba de una fuerza de combate simple. Sin embargo, eso no significaba que los ataques no funcionarían en su contra. Sentía dolor si lo golpeaban, como cualquier criatura viviente.
Sentía dolor si lo golpeaba. Si es golpeado.
Subaru: ――――
Por lo tanto, el escorpión gigante encarnaba el mantra "Entonces todo está bien, siempre y cuando no me alcancen".
Atrapó la lanza de fuego con una de sus enormes pinzas y cortó el brazo del Rey Caballo Hambriento de un solo golpe. El Rey Caballo intentó regenerar su herida, pero había sido cauterizado sin piedad por su propia lanza de fuego. La carne que se retorcía y burbujeaba de su herida tratando de regenerarse se detuvo en seco.
Subaru había podido obtener un poco de información innecesaria de esto, es decir, que no podría regenerar sus heridas quemadas. El Rey Caballo Hambriento ahora se detuvo en seco, pero luego, el aguijón del escorpión gigante se disparó con un estallido en el cuerpo del Rey Caballo Hambriento, haciendo que su gran cuerpo se abriera desde adentro.
"――――"
La carne y la sangre del Rey Caballo Hambriento se esparcieron por todas partes, y con ella se fue su vida.
Incluso el Hanemogura que había sido aplastado contra el caparazón del escorpión terminó muerto cuando su cuerno, que estaba fusionado con su cabeza, se rompió. La forma en que lucharon al tirar trágicamente sus vidas fue una que naturalmente podría ser maldecida como completamente bárbara.
Sería un error que Subaru cerrara los ojos a esto y lo descartara como "No hay problema con eso, ya que son unas mabestias". Sin embargo, tampoco planeaba pasar por alto las cosas diciendo "Todas las vidas se crean por igual".
La vida tenía valor y, sin duda, había diferencias en sus valores.
Había claras diferencias en la forma en que se sentía sobre el peso de las vidas de aquellos que eran preciosos para él y los que no lo eran. No iba a ocultar eso detrás de ningún engaño. Por eso iba a hacer un uso completo de las vidas de las mabestias para ganar esta pelea.
Por lo tanto…
Subaru: ¡Aunque estás haciendo lo correcto ignorándome, sigues cometiendo un gran error!
Con la vanguardia de la mabestia repelida, Subaru cruzó con confianza el suelo que ahora estaba cubierto de rojo. Llevando a Beatrice en su brazo izquierdo, sacó su látigo con la derecha y lo levantó.
Apodado el Guiltywhip, sus blasfemos toques finales se habían hecho usando el cadáver de su antiguo enemigo, Natsuki Subaru lo rompió en el aire, su latigazo súper rápido anotó un golpe directo en el caparazón del escorpión gigante.
El escorpión dejó escapar un grito atronador y miró a Subaru con sus ojos rojos compuestos. No había señales de que le hubiera causado algún daño, ni de que sintiera ningún dolor.
Pero estaba bien con eso. Su objetivo no había sido infligirle ningún daño. Probablemente esa había sido la razón por la que había pospuesto el trato con Subaru hasta el final, después de las otras mabestias.
La decisión del gran escorpión fue correcta e incorrecta.
Subaru: ¡¡WHRAAAAAAA!!]
Beatrice: ¡¡De hecho atrapamos uno grande!!]
Su látigo se había enganchado alrededor del caparazón del escorpión. Con eso, el enorme cuerpo del escorpión se dispararía cuando tirara con todas sus fuerzas, gracias al retroceso. Esto fue posible por el hecho de que los efectos de la Magia Yin de Beatrice todavía estaban en juego, disminuyendo drásticamente el peso de la bestia titánica.
El escorpión gigante inmediatamente trató de plantarse firmemente en el suelo. Sin embargo, la gran cantidad de sangre y vísceras a sus pies hacían que las condiciones fueran extremadamente malas para conseguir un agarre firme. Subaru hizo tambalear al escorpión de un solo golpe mientras trataba de aferrarse al suelo con sus afiladas garras.
Desde la perspectiva de un extraño, la situación casi parecía como si Subaru estuviera presionando a la bestia gigante para que usara alguna forma de fuerza sobrehumana. Pero este grandioso espectáculo en exhibición solo había sido posible gracias a la ayuda de Beatrice. Y así siguió balanceando el cuerpo del escorpión gigante tanto como pudo con su látigo, hasta que finalmente, lo arrojó lejos.
Subaru: ¡¡BOOON VOOOOYAGE!!
El cuerpo del escorpión gigante giró en el aire, llevando su impulso de balanceo supergigante.
Mientras giraba incontrolablemente, trató de golpear a Subaru con un rayo de luz blanco, mostrando un objetivo preciso. Sin embargo, Beatrice levantó la mano para apartarlo.
Ella materializó brillantes cristales de color púrpura en el aire y los usó para disparar al rayo de luz blanca de frente. Cuando su coordinación cobró vida, Subaru soltó al escorpión gigante de su látigo y voló hacia el cielo una vez más.
Subaru: Esto debería comprarnos más ...
"Tiempo."
Subaru encontró un alivio a este lío con este precario ataque, aunque tuvo que permitir algunas concesiones para ganar al final. Sin embargo, sus ojos se abrieron con sorpresa antes de que pudiera terminar lo que estaba diciendo.
Justo ante sus ojos, el escorpión gigante comenzó a realizar una asombrosa hazaña de acrobacias mientras se alejaba.
Escorpión: ――――
Con un tajo de sus enormes pinzas, cortó su propia cola desde la raíz. Así, su cola se alejó volando, esparciendo fluidos corporales de color rojo oscuro a su paso. Sin embargo, un rayo de luz blanca se disparó desde la misma punta.
Se estrelló contra el escorpión ahora sin cola y lo lanzó hacia el balcón de la atalaya con una fuerza tremenda. Todo ese trabajo para hacerlo más liviano y prácticamente ingrávido, y ahora había regresado al balcón, trayendo consigo una onda de choque. Clavó sus enormes pinzas en el suelo para detener su impulso, antes de apuntar con su mirada hacia ellos.
Subaru: E-Esas fueron algunas de las acrobacias que hiciste. Pero si eso significa que ha perdido la cola, entonces mucho mejor para nosotros ...
Escorpión: ――――
Subaru: Como, quiero decir, ¡oye, espera un segundo, espera un segundo, espera un segundo, espera un segundo!
El escorpión gigante había aterrizado y bajado su cuerpo, poniéndose en guardia mientras más sangre de color rojo oscuro brotaba de su cola. Pero su herida no se había vuelto más profunda. Todo lo contrario, de hecho. Su cola cortada estaba volviendo a crecer de su muñón.
Y no era solo su cola. Las grietas en su caparazón que provenían de disparar el rayo de luz blanca contra sí mismo, para hacer retroceder, también estaban burbujeando. Podía ver esas heridas llenándose también.
Subaru: Es duro, inteligente y se cura, ¿¡No estamos obteniendo más y más de estas características no similares a Shaula!?
Dejando de lado la curación, el cuerpo de Shaula era suave y no era en lo más mínimo inteligente. Sin embargo, el escorpión gigante se había despojado de todos estos rasgos y ahora venía hacia ellos con su abrumador poder asesino.
Agitó al azar su cola recién desarrollada, soltando sus aguijones por todas partes en los alrededores. Su ataque fue a distancia, que no mostró signos de sus típicos relatos, por lo que era seguro decir que fue el peor tipo de ataque al que Subaru y Beatrice fueron sometidos, dado lo poco que les faltaba de fuerza.
Subaru: ¿¡Whoooooaaaa!?
Beatrice: Gh ... Subaru, ¡tendremos que volar, supongo!
No tenían forma de escapar de los blancos rayos de luz que había disparado el escorpión, al menos en tierra firme. Dicho esto, un medio de escape se había presentado en los cielos. Beatrice rápidamente liberó su magia del escorpión y llamó a Subaru.
Subaru despegó del suelo y saltó en el aire con todas sus fuerzas, confiando en su compañera, sin importar si su magia realmente iba a funcionar. Los rayos blancos de luz comenzaron a destrozar el balcón, y uno de ellos apenas le rozó los pies.
Subaru: Eso estuvo muy cerca ...
Beatrice: ¡No hables tan pronto, de hecho ...!
Literalmente habían pasado por alto la posibilidad de la muerte, pero no tenían tiempo para el alivio.
Lo mismo había sucedido que antes cuando Subaru y Beatrice atacaron al escorpión gigante. Escapar a los cielos significaba que habían perdido tanto su punto de apoyo como su ruta de escape. Todo lo que les quedaba era ser destruido por uno de los ataques del escorpión.
Subaru: ¡Beako! Hechizo original, Parte 2!
Aunque esta carta de triunfo solo se podía usar tres veces al día, no había forma de que corrieran el riesgo de equivocarse al no usarla y morir como resultado. En el momento en que Subaru apretó sus hombros con fuerza, Beatrice también llegó a la misma conclusión.
Tendría su técnica especial lista para su despliegue en un santiamén, lo que haría a Subaru invencible durante un tiempo determinado ...
???: ―――― ϡ ϡ
Subaru: ¿¡Whoa!?
Beatrice: ¡¿Qué?!
Ella y Subaru fueron agarrados por un lado antes de que pudiera lanzar la técnica. Un rayo de luz blanca atravesó el espacio en el que habían estado hace un momento, casi evaporándolos.
Lo único que los había salvado de esa desaparición y estaba evitando que los persiguiera el gran escorpión fue ...
Subaru: E-Eso estuvo cerca. ¿Qué pasó… Ghe?
Beatrice: ¿¡Supongo!?
Subaru comprobó lo que estaba pasando mientras se agarraba a algo gomoso. Su voz quedó atrapada en el asombro, del mismo modo, Beatrice también tenía el ceño bastante fruncido.
Esto se debió a que quien los había salvado del ataque del escorpión gigante, y todavía estaba dando todo lo posible para protegerlos, era una mabestia de color malva y aspecto feroz, un Rey Caballo Hambriento.
Subaru: ¡Nunca pensé que estaríamos aquí peleando juntos en el clímax cuando te vi por primera vez en el subsuelo!
Rey Caballo Hambriento: ―――― ϡ ϡ
El Rey Caballo Hambriento dejó escapar un grito ensordecedor en respuesta al engaño de Subaru. Su rostro se tensó ante eso, luego, otro Rey Caballo Hambriento se detuvo junto a ellos. Aferrado a la espalda de ese Rey Caballo estaba el pequeño cuerpo de Meili.
Meili: Me pareció que estabas a punto de sacar tu carta de triunfo, ¿no es así? Trate de ser un poco más cuidadosa. ¡La carta de triunfo de Onii-san y Beatrice-chan es un salvavidas para mí también después de todo!
Subaru: ¡Buena salvación! Buen apoyo! ¡Lo hiciste bien Meili! ¿Podemos cambiar el campo de batalla a este ritmo?
Meili: ¿Quieres decir que quieres que cambiemos de ubicación? Seguro que puedo, pero ~ ...
Subaru: ¡Entonces hazlo! ¡Tenemos muy pocas rutas de escape aquí para empezar!
Escaneando los alrededores, Subaru decidió batirse en retirada desde el balcón, ya que no quedaban muchos lugares donde pararse. Toneladas de cadáveres de mabestias ya estaban esparcidas por allí, y como estaban las cosas, sería probable que ocurrieran accidentes extraños.
Meili pensó en la eficiencia de su decisión y luego asintió. Le dio una palmada a su Rey Caballo Hambriento en la espalda y les dio las órdenes a los dos. Tan pronto como escucharon sus palabras, los dos Reyes Caballo aceleraron el paso y saltaron desde el balcón hacia la pared de la torre de vigilancia. Empezaron a correr por él sin perder tiempo, a velocidades vertiginosas.
Subaru: ¿¡WHAAAAAA!?
Beatrice: ¿¡WABABABABABABA, DE HECHO!?
Subaru y Beatrice gritaron a la vez, abrazándose mientras se enfrentaban a este inesperado viaje duro. Sin embargo, al mismo tiempo, solo pudo quitarse el sombrero ante Meili, por poder domesticar a los Reyes Caballos Hambrientos de todas las cosas, y hacer que formen parte de sus tropas.
Subaru: ――――
Con los supremamente poderosos Reyes Caballo Hambrientos a la cabeza, los Hanemogura volando por los cielos, los colosales gusanos de arena, los osos cortesanos y otras innumerables mabestias en el suelo como sus aliados, tenían una amplia gama de estrategias a su disposición.
Se podría decir que eran los socios ideales para Subaru, ya que su plan era seguir ganando tiempo repartiendo una táctica de demora tras otra.
Subaru: ¡Realmente estamos teniendo muchas opciones para elegir cuántas formas tenemos de atacar! ¡Tú y yo podemos ser mucho más compatibles de lo que pensé, Meili!
Meili: No digas eso, Onii-san. ¡Realmente no me gustaría que Petra y Beatrice-chan me miraran!
Subaru intercambió gritos con Meili mientras galopaban por la torre de vigilancia en forma vertical. Este último le dio a Subaru un ceño hosco en respuesta a su charla casual mientras ella se aferraba a la espalda de su Rey Caballo Hambriento. Su reacción hirió levemente su inocente sensibilidad masculina, pero ahora era el momento de ignorar esas triviales heridas.
Subaru: La segunda ronda comenzará cuando caigamos al mar de arena. ¡Ella vendrá por mí! Entonces, por el momento, no debería interferir con nadie dentro de la torre ...
Meili: Pero, todavía estamos atrapados sin una forma de vencerla, ¿no? No importa cuánto tiempo pasemos corriendo, no seremos capaces de ganar, ¿verdad?
Como estaban en las Augria Sand Dunes, tenían mabestias en un suministro interminable. De ahí su munición de mabestias nunca se iba a acabar. Sin embargo, todo lo que les dio fue la capacidad de continuar librando su batalla, en lugar de una forma segura de vencer al escorpión.
Subaru: ――――
Miró a Meili. El sudor goteaba de su frente, que se estaba limpiando, y su respiración era un poco trabajosa.
Eso se debió en parte a lo tensa que estaba, al ser atrapada entre el martillo y el yunque que era el campo de batalla. Sin embargo, no pudo evitar pensar que también se debía en parte al precio que tenía sobre ella el control de las mabestias. Aunque esto era algo que Subaru realmente no podía comprender, ya que no tenía una Protección Divina, había suficientes posibilidades de que una Protección Divina se volviera tóxica cuando se usaba en exceso.
Subaru: Otto bromeó sobre esto, diciendo cosas como que el mundo era infernal cuando no podía controlar su Protección Divina ...
Quizás esas palabras que Otto había balbuceado cuando estaba borracho no eran nada despreciable.
Si las Protecciones Divinas se volvían pesadas como había dicho Otto, entonces habría un límite en cuanto a cuánto podría luchar Meili también. Su derrota se grabaría instantáneamente en piedra si Meili cayera en la batalla.
En otras palabras…
Subaru: ¡De hecho, esta batalla se decidirá por lo mucho que mimo a Meili como princesa!
Beatrice: ¡Qué plan tan imperdonable, supongo!
Justo después de que Beatrice enarcó las cejas en respuesta a la declaración de Subaru, una conmoción recorrió todo su cuerpo. Sirvió como señal de que los Reyes Caballos Hambrientos habían llegado a su última parada después de correr por la torre a velocidades vertiginosas.
Lo que significa que habían atravesado la pared vertical de la torre de vigilancia y habían regresado al mar de arena.
Subaru: No es como si se hubiera ido a ninguna parte al final del día ... Pero cuando lo bajas de esta manera, se siente mucho más diferente.
Beatrice: ¿Cómo se siente, de hecho?
Subaru: Absolutamente horrible, odio que los desiertos estén llenos de arena. También me recuerda cómo nunca me gustaron las etapas del desierto que a menudo se encuentran en los juegos.
A veces, dependiendo del sistema del juego, el HP de su personaje comenzaba a disminuir sin hacer nada más que caminar en el calor abrasador. Este mar de arena no tenía nada que ver con la arena abrasadora que tenía en ellos, pero aun así, no tenía buenos recuerdos de eso.
Empeorado por el hecho de que estaban rodeados por innumerables enjambres de mabestias.
Subaru: Aunque, sé que no van a atacarnos ...
Un aroma dulce y enfermizo que le hizo querer arrugar la nariz estaba flotando, acompañado de un hedor mucho peor y bestial, prácticamente podría decir que el aire alrededor del mar de arena era uno de los más miserables del mundo. Aunque con el ambiente lleno de toneladas de mabestias, algunas familiares, otras no; tal vez investigadores de mabestias o lo que sea que se le caiga la baba por eso.
Desafortunadamente, solo hizo que Subaru y su equipo se sintieran incómodos.
Meili: ¿cuál es tu respuesta a mi pregunta?
Meili montó a su Rey Caballo Hambriento hacia Subaru y Beatrice mientras la primera se estremecía. Quería una respuesta a su pregunta. Subaru miró hacia la torre y luego respondió.
Subaru: Es como dices, no podemos hacer nada sobre el escorpión gigante ... sobre Shaula. Por eso Emilia-tan tiene la clave de todo.
Meili: ¿Estás hablando de esa Onee-san de cabello plateado de antes?
Subaru: Sí. Emilia-tan y la quinta regla son la clave de todo.
Subaru asintió con la cabeza a la desconcertada Meili antes de poner la palma de su mano frente a ella. Extendió los cinco dedos, marcando las reglas que se les imponían como retadores de la Atalaya de Pléyades.
Subaru: No podemos irnos sin completar las 『Pruebas』. No podemos romper las reglas de las 『Pruebas』. No podemos faltarle el respeto a las "Bibliotecas". No debemos dañar la torre. Y finalmente…
Meili: ¿Hm?
Meili debería haber escuchado las primeras cuatro reglas.
Pero ella no conocía la quinta. Shaula había estado tratando de ocultarlo, por lo que solo Subaru, quien había usado el 『Regresó de la Muerte』, sabía lo que era. Además de la propia Shaula, por supuesto.
La quinta regla de que Shaula cerró los labios y se negó a decirles era ...
Subaru: … No está prohibido destruir las 『Pruebas』. Lo que significa que podemos destruir las reglas de esta torre.
Como retadores, las 『Pruebas』 limitaron sus acciones. Sin embargo, al mismo tiempo, las reglas también restringieron las acciones de Shaula ya que ella era una de sus examinadores.
Shaula estaba sujeta a las reglas de la torre. Entonces, a pesar de que no quería matarlos, no podía escapar del destino que la obligaba a intentar hacerlo a través de su transformación de escorpión gigante.
Si esos grilletes la habían estado atando durante más de cuatrocientos años, entonces ...
Beatrice: … tch. ¡Ella viene, supongo!
Una gran columna de humo se elevó ante sus ojos justo después de su advertencia.
Una onda de choque acompañante vino de la silueta gigante que había saltado desde el balcón sin dudarlo, en lugar de correr directamente hacia la torre.
Podía oír el pesado sonido chirriante de sus grandes pinzas procedente de la espesura del humo. El escorpión gigante emergió lentamente desde adentro, sus ojos compuestos apuntaban directamente a Subaru en lugar de a los innumerables enemigos que los rodeaban.
Subaru: ¡Beako, Meili! ¡Necesitamos ganar algo de tiempo! ¡La victoria de Emilia-tan es la condición para la nuestra!
Beatrice: ¡Te escuchó fuerte y claro, de hecho!
Meili: ¿Y exactamente cuánto tiempo tardará en lograrlo?
Subaru: Tan rápido como le sea posible.
Emilia siempre fue seria y extremadamente trabajadora.
Por lo tanto, no había forma de que ella se comprometiera o aflojara con los problemas que estaban enfrentando. Los resultados que entregó fueron siempre los mejores que pudo dar, y con ellos llegó la mayor potencia de fuego que pudo reunir.
Subaru creía en eso, amaba eso, lo apreciaba. Por eso iba a poder mantenerse firme aquí.
Subaru: Ahora bien, hagamos esto. Vamos a romper el destino ... No, ¡vamos a romper el sistema de la torre!
※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※
???: Ya veo, por eso es que estás ...
???: ¡Sí, es así! ¡Subaru me dijo que definitivamente encontraría una manera de reescribir la situación en la que estamos si subo a lo más alto de la torre!
Emilia se concentró en correr tan rápido como pudo, dándole solo una respuesta enérgica. Sostenía a Echidna en sus brazos mientras corría, y esta última intentaba hacer que su cuerpo fuera lo más pequeño posible.
Al principio Emilia la había tomado de la mano mientras corrían, pero al ser frenada por ella, terminó recogiéndola a la mitad, y permaneció así desde entonces.
De hecho, fue mucho más rápido de esta manera y tensó mucho menos su cuerpo, por lo que fue de gran ayuda. Aún así…
Echidna: ¿No deberías ser tú quien necesita salvar su fuerza? No tienes ni idea de lo que te espera, ¿verdad?
Emilia: ¿Eh? ¡Oh, no necesitas preocuparte! El cuerpo de Anastasia-san es realmente liviano, y no es como si se hubiera vuelto más pesado incluso contigo en él. ¡No me suda la espalda!
Echidna: Mi presencia realmente no tiene nada que ver con el peso de Ana ... Como, en absoluto.
Frente a esas respuestas ligeramente equivocadas, Echidna miró a Emilia, más bien, a la belleza de la desconocida semielfa mientras sentía las luchas dentro de sí misma.
Este semielfo desconocido era uno de sus compañeros a quienes la autoridad de 『Gula』 le había robado su 『Nombre』. Sus circunstancias eran muy parecidas a las de Julius, pero la forma en que se comportaba era muy diferente en comparación con él. ¿Fueron diferentes sus personalidades intrínsecas? ¿O quizás fue una diferencia en las personas que estaban allí para apoyarlos?
Echidna: ¿No te aterroriza que te hayan olvidado?
Emilia: Es realmente aterrador y solitario. Pero no tengo tiempo para sentarme y acurrucarme con miedo, ¿no crees?
Emilia dio una respuesta brutalmente honesta a la pregunta silenciosa de Echidna. La fuerza detrás de su cambio parecía un testimonio de su fortaleza mental, o quizás se debía a algún otro factor.
Emilia había dicho antes: "No estoy preocupada porque Subaru me recuerda".
Habían sido palabras terriblemente simples, las cosas que verías en sueños. Sin embargo, al mismo tiempo, parecían ser la verdad.
Echidna: ――――
No estaba claro qué hacía que Natsuki Subaru fuera impermeable a los efectos de la autoridad de 『Gula』. Aunque estrictamente hablando, no era como si ni siquiera él fuera completamente impermeable. De hecho, ¿no había dicho que la razón por la que había perdido sus 『Recuerdos』 se debió a un encuentro inesperado con 『Gula』?
Entonces Echidna no podía decir definitivamente que la especialidad de Subaru fuera la causa principal detrás de todo lo que sucedió. Es decir, todavía debería haber una cierta posibilidad.
Como en, ¿no podrían haber protegido sus 『Nombres』 y 『Recuerdos』 de alguna manera?
Si hubieran podido hacer eso, entonces tanto Anastasia como Julius ...
Echidna: ――――
Cuando se detuvo a pensar en cómo se sentía Julius, habiendo sido olvidado por todos, ¿alguien podría culparlo por vacilar? Sin embargo, cuando miró la fuerza de Emilia después de haber sido colocada en la misma situación, no pudo evitar preguntarse qué era diferente entre los dos.
La diferencia debe haber entrado en quién estaba a su lado. La diferencia debe haber estado en quién estaba a su lado, apoyándolos.
Del mismo modo, ¿no se habría derrumbado Julius si hubiera tenido algún apoyo? ¿Y no debería haber alguien allí como Natsuki Subaru para Emilia?
Echidna: ¿Qué debería ...
"¿Qué tengo que hacer?" Echidna no pudo encontrar una respuesta a esa pregunta dentro de sí misma.
Era tan malo que sintió que esta podría haber sido la primera vez en su vida como un Espíritu Artificial vacío en el que había estado tan perdida consigo misma.
Emilia: ¿Echidna?
Echidna: ... No es nada. Más importante aún, ¿es cierto? ¿Que lograste encontrar un camino a través de la violencia de Reid Astrea ... y pasaste el 『Juicio』 del segundo piso antes?
Emilia: Sí, lo es. Es realmente difícil de explicar ahora que lo has olvidado.
Emilia le dio una adorable sonrisa de mejilla a mejilla. Pero, el porque de la cuestión era que estaba avergonzada por cómo había vencido el 『Juicio』 de ese hombre, que era la imagen misma de la violencia.
Echidna nunca imaginó ni por un momento que estaría mintiendo en esta situación. A pesar de conocerla por poco tiempo, Echidna se dio cuenta de que su naturaleza no era adecuada para decir mentiras. Entonces todo debe haber sido cierto. Solo había sido por unos momentos, pero a juzgar por cómo se había enfrentado al escorpión gigante en el balcón, no había duda de que era una luchadora bastante capaz.
Entonces, el único problema que quedaba era ...
Echidna: Entonces, puedes encontrar una manera de arreglar esta situación si subes a lo más alto de la torre. ¿Cuál es tu base para eso?
Emilia: Subaru me dijo que escuchó cuál era la quinta regla de Shaula. Además, Subaru ha pensado mucho en esto antes de tener la idea, así que estoy bastante segura de que es la forma correcta de hacer las cosas.
Echidna: A mí me parece una idea basada en una fe ciega excesiva, pero ...
Emilia: Si todavía tienes dudas, podemos abordarlas, pero no creo que sea el momento de hacerlo ... Eso, ¿y no viniste conmigo porque también crees en Subaru?
Echidna se quedó sin palabras cuando Emilia volvió sus ojos cristalinos hacia ella. Al ver la reacción de Echidna, Emilia le dedicó una sonrisa teñida de alegría, incluso si parecía un poco fuera de lugar.
Emilia: Verás, mi estimado caballero está realmente dando todo por nosotros.
Emilia demostró con su actitud que estaba orgullosa de que se apreciara su arduo trabajo. En respuesta a eso, Echidna también sintió una extraña punzada de emoción. Colocó la palma de la mano sobre el pecho plano de Anastasia y exhaló un suspiro.
Equidna: ――――
“Este tipo de emociones son peligrosas”, se advirtió Echidna.
Eran completamente irracionales y fuera de lugar. Por lo menos, no era algo que debiera sentir en un momento como este. Necesitaba olvidarlos si podía, y si no, al menos debería olvidarlos por el momento.
Emilia: ... ¡Subaru confía en mí!
Echidna sintió, entre otras cosas, envidia de ella. Ella, que creía tanto, tanto en su compañera, que estaba mucho más cerca de ella.
"Necesito olvidar este momento presente y concentrarme en superar la situación en la que estamos", pensó Echidna para sí misma.
Equidna: ――――
Las largas piernas de Emilia se movían con gracia mientras subía las escaleras. Luego, después de haber subido lo que deberían haber sido bastantes escalones, un tremendo destello de plata apareció a la vista, esparciendo chispas por todas partes.
Con su visión ahora despejada, vieron una batalla desarrollándose dondequiera que miraran. Con su cabello lila alborotado y su uniforme blanco manchado de sangre, estaba Julio Juukulius.
Y la persona a la que se enfrentaba era ...
Julius: ¡Gh, khh…!
???: ¡Whoa, whoa, whoa, whoa, whoa! No parece que puedas hacer algo así por mí, idiota. No me subestimes, idiota. ¿Viniste aquí para jugar? Si quieres jugar, ponte un poco de maquillaje. Cuando lo hagas, te pisaré, te acosaré y te molestaré, maldito idiota.
La personificación misma de la violencia, Reid Astrea, soltó un corte de pesadilla con el par de palillos que tenía en sus manos mientras maldecía. Estaba bailando un baile macabro, con el segundo piso como escenario.
La suya fue una batalla que trascendió lo que la humanidad podía imaginar, aun así, el hecho de que Julius fuera muy inferior en fuerza a él era algo que era tan tristemente obvio, que podía captarse instantáneamente, incluso para el ojo inexperto.
Julius: … tch.
Lidiando con la ráfaga de cortes y patadas provenientes de Reid, Julius contraatacó girando su Espada de Caballero y metiéndola en uno de los huecos.
Su fuerte empuje derivado de una técnica extraordinaria parecía no ser más que un borrón de luz. Sin embargo, Reid lo evitó fácilmente con un bostezo, y eso fue con su parche en el ojo bloqueando parte de su vista.
Reid: ¡¡RRRRHAAA!!
Julius miró, sorprendido de que Reid hubiera evitado su estocada. Inmediatamente después, una patada de aspecto casual se estrelló contra el torso de Julius, con las plantas de su zōri clavándose directamente en sus músculos abdominales. Julius retrocedió unos pasos y dejó escapar un grito de dolor.
Entonces, un golpe de uno de sus palillos cayó hacia su cabeza ...
Reid: Ponte pulverizado, idiota.
Con un destello vertical, su barra, que llegó con una onda de choque, cortó el aire, el espacio y la razón misma.
El corte de su espada era tan abrumador que las formas de expresarlo ya no les venían a la mente. Era tan hermoso, que a pesar de que su arma había sido un palillo, uno no podía evitar sentirse cautivado por él, incluso si eran un aficionado a la esgrima. Fue el pináculo de la esgrima, la culminación misma que fue lo que se estaba manifestando allí.
"――――"
Un corte tan hermoso, que probablemente morirías con solo admirarlo.
Julius saltó a un lado, esquivándolo. El borde de su capa no llegó a tiempo y fue tragado por la hoja de Reid, evaporándose. Se dejó tallada una ranura vertical en el segundo piso de la torre de vigilancia, que estaba hecha de materiales desconocidos, como si todo fuera una broma.
Y para empeorar las cosas ...
Reid: Hey, hey, hey, ¿no estás siendo ingenuo si piensas que te has escapado con eso?
Julius: … hk.
Dándole una sonrisa burlona, el aire que había atravesado en la habitación se deformaba y se doblaba, con una ráfaga de viento que comenzaba a rugir.
Julius, que debería haber logrado saltar a un lado, tragó saliva y luego fue instantáneamente arrastrado de nuevo a sus pies, como si lo tiraran hacia el espacio desgarrado, de regreso al rango de los cortes de espada de Reid.
Para su incredulidad, esto se debió a la fuerza de gravedad del espacio desgarrado que se restauró. Estaba tirando de Julius hacia atrás después de su estrecho roce con la muerte directamente al alcance del siguiente golpe.
Reid comenzó a lanzarle un puñetazo a Julius, incapaz de moverse debido a lo que estaba sucediendo ...
Emilia: ... Eso es suficiente.
Una fracción de segundo antes de que soltara su puñetazo, el sonido de una campana plateada replicando intervino entre los dos espadachines.
Sin embargo, en contraste con el hermoso timbre de su voz, la forma en que se había unido a la pelea era bastante audaz. Echidna se quedó sin palabras, ante ese espectáculo extremo frente a ella.
Reid: ¿Haah?
Julius: ――――
Reid miró por encima de él, incapaz de ocultar la sospecha en su voz. Julius, por otro lado, abrió los ojos de par en par con sorpresa, completamente sin palabras.
Estaban mirando lo extraño que había aparecido sobre ellos, un bloque de hielo que era tan grande que cubría el techo.
Este bloque de destrucción que instantáneamente podría hacer añicos incluso un carruaje del dragón en pedazos cayó hacia los dos espadachines.
Las reacciones de Reid y Julius fueron muy diferentes. Julius se apartó de un salto para evitar el bloque de hielo que se precipitaba, mientras Reid curvó sus labios en una sonrisa y se rió.
Reid: ¡¡Hah!!
Con una sonrisa feroz en su rostro, Reid empujó uno de sus palillos hacia el bloque de hielo que caía. Su palillo levantado chocó con el punto de caída del bloque. Por algún milagro, las fuerzas entre los dos puntos se mantuvieron en equilibrio entre sí, lo que hizo que el palillo de Reid se doblara, pero impidiendo su caída.
Reid golpeó firmemente el suelo con su zōri, la fuerza viajó a través de su palillo y fluyó hacia el bloque de hielo que aún estaba sostenido por dicho palillo. Una grieta comenzó a correr por el bloque cuando su palillo se partió por la mitad.
Reid: ... Ahora no era 'ese algo'.
Reid escupió esas palabras, y una fracción de segundo más tarde, el bloque de hielo con una grieta atravesando su centro, se rompió en un abrir y cerrar de ojos.
Trozos de hielo empezaron a llover y, mientras disfrutaba de ellos, Reid se dio la vuelta lentamente. Al recibir la mirada penetrante de su ojo azul descubierto, Emilia le apuntó con la palma de la mano, con una mirada de determinación en su rostro.
Sus miradas se cruzaron entre sí, lo que hizo que Reid la mirara con sorpresa.
Reid: Eres realmente luchador, frizzlin. No es que no me gusten las mujeres como tú, pero ... ¿¡Eh!? ¡¿Qué diablos, idiota, estás realmente muy caliente frizzlin?! ¡Un bombón increíble! ¿Por qué diablos hay un bombón tan humeante en medio de este mar de arena? Vamos, vas a ser mi oponente, idiota.
Emilia: Mis disculpas, no quise interrumpir, pero necesito que Julius te gane ...
Reid: ¿Qué?
Emilia no prestó atención a la charla egoísta de Reid, y en su lugar continuó con una mirada preocupada que apareció en su rostro. Reid frunció el ceño ante lo que había dicho, pero Julius era el que estaba mucho más desconcertado, ya que acababa de ser rescatado.
Aunque había logrado escapar del bloque de hielo que Emilia había desatado, no pudo ocultar su sospecha hacia el hecho de que ella había aparecido de repente. Manteniéndose a distancia de Reid, volvió sus ojos amarillos para mirar a Echidna, que estaba de pie junto a ella, y habló.
Julius: Entiendo que ella me ayudó, pero ... ¿quién diablos es ella Echidna?
Echidna: Es un poco difícil para mí explicar su identidad. Pero, si puedo decirlo simplemente, ella es alguien que está en el mismo barco que tú, Julius.
Julius: ¿Qué diablos ...?
Julius miró a Emilia una vez más, con los ojos muy abiertos, probablemente porque sus rasgos coincidían con un ser que conocía.
Julius: Un elfo de cabello plateado y ojos color amatista ... No, me cuesta creer que un ser tan distintivo hubiera aparecido de repente en la torre. Entonces, ¿podría ser que ella es ...
A la luz de la situación en la torre, así como de las peculiaridades de su apariencia, y del hecho de que su presencia no se encontraba en ningún lugar dentro de él, Julius sintió, por su propia voluntad, que algo no estaba del todo bien.
Julius llegó a la respuesta solo. Al ver sus ojos sorprendidos, Emilia asintió con firmeza.
Emilia: Julius, ahora mismo sé exactamente cómo te sientes.
Julius: Entonces sí que lo eres ...
Dado que ambos habían tenido sus 『Nombres』 arrebatados por Gula, Julius comprendió inmediatamente lo que estaba pasando. Y tan pronto como lo hizo, su convicción de que Emilia era su aliada pareció crecer.
Se paró frente a Echidna y Emilia, protegiéndolas, una vez más apuntando con su espada a Reid.
Julius: Tienes mi agradecimiento por ayudarme antes. Pero todavía no entiendo por qué ustedes dos han venido corriendo aquí considerando lo que está sucediendo en la torre. ¿Qué está pasando con la biblioteca 『Taygeta』 y con la señorita Rem y la situación afuera?
Echidna: Hay un intento en marcha para tratar de reunir todos estos asuntos para tratarlos todos a la vez. La idea es de Natsuki-kun, y los que lo ayudan somos todos nosotros en la torre.
Julius: ¿Es de Subaru? Pero el es…
Un ceño desconcertado apareció en el rostro de Julius cuando escuchó el nombre de Subaru encajado en medio de su explicación.
Por lo que sabía, Subaru debería haberse enfrentado al 『Libro de los muertos』 de Reid en la biblioteca 『Taygeta』, y su conciencia debería haber estado en un estado de confusión desde su regreso. Beatrice le había dicho que su regreso había sido difícil, por lo tanto, Julius había continuado luchando contra Reid para que pudieran superar la confusión en la torre a su manera.
Por lo tanto, incluso si ella estaba diciendo que Subaru se había despertado y se le ocurrió esta idea, se podría decir que era natural que no hubiera un vínculo real entre la espontaneidad y el reconocimiento. Sin embargo…
Reid: No tengo nada en contra de que todos ustedes se pongan amistosos entre sí, ¡pero no se vayan los idiotas parloteando mientras me ignoran!
El suelo explotó con un fuerte estruendo, lo que provocó que Julius recibiera un golpe del palillo de Reid. Aunque había perdido un palillo, todavía le quedaba otro. Y no era como si tuviera que usarlos. Incluso si solo peleaba con las manos vacías, no era como si su fuerza fuera a disminuir.
Julius: ¡Kh!
Mientras golpeado por los fuertes ataques de Reid, Julius se recuperó y se concentró en mantener su desesperada defensa. Al ver eso, Reid desató un golpe con una de sus manos que literalmente podría haber derribado incluso a un dragón. Al mismo tiempo, le tendió la mano libre a Emilia mientras ella buscaba una abertura, extendiendo sus dedos hacia ella.
Reid: No tengo ni idea de lo que intentas hacer, pero no creo que te deje hacer lo que quieras, idiota. Voy a ser tu oponente cuando termine de lidiar con este novato ... ¿Eh?
Reid inclinó abruptamente la cabeza en duda a mitad de la frase. Luego se llevó los dedos de la mano libre a su ojo izquierdo con parche y escupió una diatriba venenosa de: "Hey, Hey, Hey, Hey".
Reid: Diablos, idiota. Por alguna razón, mi mano no se mueve para detenerte. A menos que me haya gustado de repente enamorarme de ti ... ¡De ninguna manera, debes haber pasado la 『Prueba』!
Emilia: ¡Sí, lo hice! ¡Perdiste porque tocaste mi pecho con tus palillos!
Reid: ¡Kah! ¡Esa es una forma de perder que realmente puedo respaldar! ¡Qué gran desperdicio que ni siquiera puedo recordarlo, bombón!
Reid chasqueó la lengua. Sus palabras indicaron que tenía un grillete que no le permitiría detener a Emilia. En otras palabras, significaba que la obstrucción que se interponía entre ella y su deber había desaparecido.
Emilia: Julius, yo ...
Julius: Puede ir mi hermosa dama, tú, que como yo, eres de nombre desconocido.
Girando solo la cabeza, interrumpió a Emilia cuando estaba a punto de decir algo. Al ver su Espada de Caballero ahora preparada nuevamente, Emilia se mantuvo en silencio ante sus palabras.
Al ver la sorpresa en su rostro, Julius le dio una sonrisa galante.
Julius: Tienes tu deber que cumplir. Sé que es algo en lo que no podré ayudarte, pero por mí está bien. Rezo para que todo salga bien.
Emilia: … ¡Sí, para ti también!
Recibiendo el aliento de Julius, Emilia asintió con la cabeza y luego echó a correr. Reid no hizo ningún intento por detenerla. El león rojo de un solo ojo la dejó pasar y la despidió.
Luego, cuando Emilia llegó al frente de la escalera en la parte más interna del segundo piso que conduciría el camino hacia arriba, se detuvo en seco y se dio la vuelta.
Emilia: Soy Emilia.
Julius: ――――
Emilia: Mi nombre es Emilia, solo Emilia. ¡Definitivamente volveré a verte más tarde!
Dejando su nombre atrás, Emilia subió corriendo las escaleras con un aire de elegancia. Echidna dejó escapar un largo, largo suspiro mientras la veía desaparecer de la vista.
De aquí en adelante, el deber de Emilia era ir a la cima. Entonces, el deber de Echidna era ...
Julius: ¿No vas a ir a ningún lado? ¿Estás pensando en verme pelear?
Echidna: Solo si me dejas hacerlo ... Bueno, no, supongo que no. Yo soy el que ha decidido hacer eso.
Julius: ――――
Julius miró a Echidna, que estaba de pie junto a la pared, y luego frunció los labios. Ella tomó una rápida bocanada de aire cuando fue testigo de todo tipo de emociones revoloteando por el perfil de su rostro.
Echidna: No es que pueda hacer nada, pero si Ana estuviera aquí, probablemente lo habría hecho. No importa dónde me encuentre en esta torre, siempre estaré sujeto a peligros. Dado eso, estaré detrás de ti por mi propia voluntad. Porque…
Julius: ――――
Echidna: ... Porque eres el caballero de Anastasia Hoshin. ¿No es así?
Se necesitaba una gran cantidad de valor para creer en algo que no parecía real.
Era casi imposible comprender cuánta fuerza necesitaba para creer en algo que no tenía una base concreta, hasta el punto de que la haría sentir aliviada, al menos en comparación con creer en algo realmente tangible.
Independientemente, Echidna le dijo esas palabras al hombre ante sus ojos, con la espalda de espaldas a ella, mientras creía en esa incertidumbre.
Julius: ――――
Julius bajó sus ojos de largas pestañas en respuesta y suavemente dejó escapar un profundo y largo suspiro.
Julius: Eres capaz de darme más fuerza de la que crees. Simplemente por el hecho de que alguien fue y reunió su coraje para creer y mantener expectativas en un yo que puede que ya no sea nadie.
Echidna: Julius ...
Para Julius, el equilibrio que había perdido se había vuelto incierto.
Para Echidna, los vínculos que se suponía que debía conocer se habían vuelto ambiguos.
Los dos tuvieron que confiar en algo tan inestable para construir esta relación que en conjunto difería de la que deberían haber estado vinculados. Sin embargo, en este mismo momento, los dos seguramente deben haber estado viendo lo mismo.
Entonces por esa razón ...
Echidna: … Julius, tengo un mensaje para ti.
Julius: ¿Un mensaje?
Echidna: Sí. Todo el mundo está peleando por toda la torre, así que ... dijo: "Apúrate y arregla las cosas aquí, luego ven a ayudar a los demás".
Julius: ――――
Echidna se dio cuenta de que este era su tipo de aliento, por lo que se lo transmitió exactamente como lo había escuchado. Los delgados hombros de Julius se tensaron ligeramente después de escucharlo.
Dijo el contenido del mensaje y lo tomó a bordo. Su respuesta a continuación fue fuerte y clara.
Julius: Hah.
Casi parecía que hubiera dejado escapar una breve y aguda bocanada de aire, pero no fue así en absoluto.
Dejó escapar una carcajada. Había exhalado una sola bocanada de aire desde la boca del estómago para soltar esa risa.
El hecho de que Julius Juukulius se enfrentara a la batalla con una sonrisa en su rostro habría sido algo para maravillarse, si hubiera habido alguien aquí que conociera a Julius.
Julius: ... Si él ha salido de su caparazón, entonces tampoco debo perder aquí.
Su expresión de determinación era tranquila, pero llena de celo oculto.
Julius levantó su Espada de Caballero frente a él y enfrentó a su enemigo, reflejándose en su espada. Reid había estado mostrando una mirada aburrida en su rostro por un tiempo… Pero ahora, estaba sonriendo como un tiburón.
Reid: Realmente te pusiste en marcha, ¿verdad, idiota?
Julius: Disculpe, pero cuando se trata de pelear, siempre me lo tomo en serio.
Reid: No, eso no es lo que quiero decir. ¿Lo entiendes bien? Incluso si no te lo deletreo, idiota.
Reid levantó su mano izquierda con una sonrisa todavía plasmada en su rostro. Se levantó el parche y se descubrió el ojo. Por lo tanto, con sus ojos azules en perfecto funcionamiento, la cima de todos los espadachines señaló su alegre intención asesina hacia su retador.
Su espíritu de espada era tan formidable que cualquiera que tuviera el corazón débil habría muerto solo por el brillo de sus ojos. Sin embargo, Julius se encontró con ese fuerte destello de su cabeza, y Echidna detrás de él también se preparó y lo aguantó.
Al verlos a los dos soportar la furiosa tormenta de su espíritu espada, Reid apretó ruidosamente sus colmillos.
Reid: Yo soy el Reid un 『Stick Swinger』. Recuerda solo mi nombre, antes de desaparecer.
Julius: ――――
Intercambiar el nombre de uno en la batalla antes de cruzar espadas era una señal de reconocer a un guerrero como su igual. No se sabía cuánto le importaba realmente a Reid esa norma, pero independientemente de lo que pensara, las consideraciones de la persona que se había deleitado con eso habían cambiado drásticamente.
Julius respiró hondo y se preparó, calmando su corazón enfurecido.
Julius: Te daré mi nombre una vez más. Soy Julius Juukulius. Un y único caballero de Anastasia Hoshin-sama, quien se presenta como Candidata de Selección Real en el Reino de Lugunica. Es hora de que deje de hacer el papel de un caballero sin nombre.
Proclamó magníficamente su 『Nombre』 para que quedara grabado tanto en él como en el mundo mismo.
※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※
Dejando atrás a Julius y Echidna abajo, Emilia siguió subiendo los escalones corriendo.
Sus largas piernas se movían tan rápido como podía, subiendo las escaleras de dos a tres pasos a la vez. Aunque la velocidad a la que iba era excesiva, sus propios pensamientos le gritaban que fuera más y más rápido.
Emilia: … gnh
Emilia apretó los dientes con fuerza, una mirada de desesperación adornaba su hermoso rostro de perfil.
Estaba preocupada por los dos que había dejado atrás en el segundo piso. Reid era extremadamente fuerte, mal hablado y además un matón. Los dos fácilmente podrían lastimarse tanto física como mentalmente al tratar con él.
Naturalmente, las preocupaciones de Emilia no se limitaban a Julius y Echidna. ¿Subaru, Beatrice y Meili se las arreglarían para mantener a Shaula bajo control? ¿Ram también podría representar su papel? ¿Vigilaría Patrasche a Rem?
Sus ansiedades, como si tendría que reconstruir todas sus relaciones desde cero con su 『Nombre』 comido, eran interminables. Sentía que iba a estallar en lágrimas si se tomaba un momento para detenerse.
Sin embargo, ella no se detuvo. Ella tampoco derramó lágrimas. Soportó la sensación de hormigueo en la parte posterior de la garganta.
Emilia: ¡Nada ha terminado todavía después de todo…!
El hecho de que creyeran en ella, y de que pudieran creer en ella, era lo que estaba apuntalando la totalidad de Emilia en este momento.
Estaba llena de preocupaciones, rebosante de ansiedad, pero también estaba llena de un "Creo en ti", que superó esas emociones.
Emilia: … ¡hk! ¡Hay una luz!
Mientras seguía vertiendo su corazón y su alma corriendo por las escaleras, los ojos color amatista de Emilia vislumbraron un resplandor blanco en el otro extremo de su campo de visión. Se dio cuenta de que venía del final de esta escalera extremadamente larga y que conduciría al primer piso desconocido.
En el momento en que comprendió eso, pateó firmemente desde el suelo y aceleró aún más.
Entonces finalmente…
Emilia: … ¡Lo logré!
Emilia irrumpió en la luz, donde la escalera había terminado frente a ella. Lo que se desplegó ante sus ojos en ese instante no fue un área que pudieras llamar un "piso".
Emilia: ¿Eh ...?
Emilia se detuvo en seco, completamente atónita, y sin querer dejó escapar su sorpresa ante la escena a la que se enfrentaba. Reflejada en sus ojos amatistas, no era la siguiente parte de la torre de vigilancia familiar que había llegado a esperar.
Las paredes habían desaparecido, al igual que el techo, extendido a su alrededor yacía el cielo azul vibrante, Emilia no estaba de pie dentro del edificio, sino que estaba afuera. Terminó emergiendo directamente en la azotea en la parte superior de la torre después de subir corriendo las escaleras del segundo piso.
Emilia: ¿El primer piso está afuera ...? Este lugar está incluso más alto que las nubes ...
Había un piso vasto y circular en la cima de la torre sin otras particiones ni nada que pareciera un pasamanos en su borde. Por lo tanto, podía mirar hacia abajo fácilmente yendo al borde del piso.
Nubes que deberían haber estado muy arriba en el cielo rozaban la torre. Emilia se quedó sin aliento cuando se dio cuenta de que había llegado hasta las nubes, o incluso que estaba por encima de ellas.
Era la primera vez que Emilia llegaba a un lugar tan alto como este. Sin embargo, a pesar de recibir tal conmoción, otra emoción profunda la distrajo rápidamente.
???: ――――
... Había una presencia allí, que ella no había podido notar debido a lo quieta y grandiosa que se mantenía.
Emilia: … Ah.
Emilia había estado ocupada mirando cosas como dónde estaba, la altura de las nubes y cómo era la situación en el primer piso. Había tardado en darse cuenta del ser que había pasado por el rabillo del ojo. Lentamente se dio la vuelta y dejó escapar un gran jadeo.
A pesar de que Emilia casi había caído en la desesperación por haber sido olvidada por el mundo con su 『Nombre』 siendo arrebatado, su corazón aún se había mantenido firme al final. Pero incluso esa Emilia se quedó sin palabras de puro asombro.
El "ser" que había aparecido ante sus ojos estaba completamente más allá de los límites de su imaginación.
Porque ese ser era ...
Emilia: Eres ...
???: ... Tú, que has llegado a la cima de la torre. Avanza por el primer piso, todopoderoso peticionario.
Su voz era solemne y se sentía como si estuviera rugiendo directamente en su alma. Se dio cuenta de que le temblaba la voz.
¿Había alguien que pudiera culpar a Emilia y llamarla débil de mente? Nadie podría hacerlo. Seria imposible. Porque todas las criaturas vivientes no tenían más remedio que postrarse ante este ser.
Porque el nombre de este ser era ...
???: Yo, soy Volcánica. De acuerdo con el antiguo pacto, te pido la voluntad de ti que has alcanzado la cima.
Con su enorme cuerpo cubierto de brillantes escamas azules, el 『Dragón Divino』 Volcánica miró hacia abajo a Emilia y declaró que mientras ejercía una presencia que parecía que haría volar incluso su alma hasta desaparecer.
※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※ ※
Fuera de la torre, comenzó la batalla de Shaula, quien se había transformado en el escorpión titánico, contra Subaru y el resto.
En el segundo piso de la torre, el juego de espadas del sonriente portador de la violencia, Reid Astrea y Julius.
En el primer piso de la torre, Emilia logró un encuentro imprevisto con la poderosa existencia que allí esperaba.
Y, en la escalera de caracol que conecta el cuarto piso y el sexto piso de la torre ....
???: ¡A ~ h, maldita sea ~ tsu! Incluso después de robarlo y todo, se siente como si no lo hubieras utilizado de manera decente, ¿no es así? ¡Caramba!
Escupiendo con irritación, el joven chasqueó la lengua mientras se arrancaba el cabello castaño oscuro. Al bajar la mano que se rascaba la cabeza, lo que se había generado allí era una espada hermosa y ornamentada con forma de hielo.
Con el 『Nombre』 robado como base, era un poder especial que él había reconstruido, pero contrariamente a su apariencia, su regulación de Maná era exquisitamente ardua y era bastante difícil de usar junto con otros 『Recuerdos』. En primer lugar, combinar las habilidades de muchos otros requería un sentido adecuado, y eso era algo en lo que Roy y Louis eran torpes.
???: Lo ~ vamos, es porque nos destacamos en eso que somos tan capaces, pero ya lo sabes.
Incluso dentro del trío de hermanos que poseen la Autoridad de la 『Gula』, la forma en que cada uno usa la Autoridad difiere sutilmente. Entre ellos, como alguien que se enorgullecía de ser 『Gourmet』, los puntos a los que le gustaría objetar en la forma de su hermano y hermana menores no eran pocos. Fuerte, conectado con el sentido de superioridad. Aunque algo así como un consejo, era inadecuado para él.
???: El mensaje no llegará al querido y lindo Louis, o al tipo Roy ...... a ~ h, no se puede evitar ~ tsu! Si los dos dicen que no pueden hacer nada, ¡no se puede evitar! ¡Eso significa que podemos lamer a fondo los grupos presentes dentro de esta torre hasta las raíces ~ tsu! ¡Qué lindo, tan lindo, bastante lindo, muy lindo, tan lindo, ciertamente es lindo, seguramente es lindo, seguramente debe ser lindo, como debe ser lindo! ¡Bebida glotona ~ tsu! ¡Gula ~ tsu!
Crujiendo la espada de hielo en su mano, con sus afilados colmillos desenredados, 『Gula』, Ley Batenkaitos decidió detallar todos los objetivos dentro de la torre para su propio plato, sin dejar uno solo.
Afortunadamente, la situación se había solucionado. Lo que quedaba era simplemente seleccionar el orden y cuál sería el plato principal.
???: ¿Crees que tienes el privilegio de elegir eso? Qué despreocupado.
Ley: ――――
Al oír la voz que descendía desde lo alto de la escalera de caracol, Ley agarró el hielo masticando y levantó la cabeza. Arriba, en el cuarto piso, había unos ojos carmesí claros mirando a Ley, quien estaba de pie en la escalera entre el cuarto piso y el quinto piso.
Con el mismo tono que la sangre o el resplandor, unos ojos con un calor terriblemente helado, miraban el hambre feroz de Ley como si sintieran lástima.
Y ...
Ram: Por lo que se dijo, parece que fuiste tú quien rompió el amor fraternal de Ram y Rem, ¿no es así? Amablemente muere mientras gritas como un cerdo.
