2012 - Sueños de niño
Con motivo de la inauguración de las
"Escuelas Graduadas" de Callosa de Segura en 1927
Antonio Marco Botella
(De mi libro "Episodios y Leyendas callosinas")Sueños de niño
En mis días de niño…
las noches estrelladas solía mirar
para contemplar la luna y luceros
que allá arriba solían brillar,
y a veces soñaba, no se si dormido,
que volando hasta allí llegaba
donde seres extraños se movían,
y hasta las estrellas me parecían
magos envueltos en capas de plata
que dulcemente me sonreían…
También fantástica flora había,
que emanaba aromas de rosas
que llegaban hasta el cielo azur
perfumando imágenes hermosas.
Allí arriba también ver se podía
palacios y figuras preciosas
habilmente con arte construidas,
y que las nubes al envolverlas
parecían de plata adornarlas
con perfiles aquí ni soñadas!
Los seres vivos que allí había
tenían bello encanto, ¿eran dioses?
imposible de identificarlos,
vestían trajes con lujosos encajes
y hablaban con una tal dulzura
que parecía fuesen ángeles,
por su forma, dicción y ternura,
eran como un canto de ruiseñor
en un amanecer de mágicos candores
algo que respiraba embrujo y amores .
Pero… ¿porqué escuelas no veía?
¿cómo las escuelas alli serían?
Yo soñaba con escuelas ideales!
En aquel cielo había también niños
que jugaban alrededor de la luna,
pero eran unos juegos tan bellos
que me parecían más que geniales
que yo quería copiar para mis amigos,
mis buenos amigos terrenales,
pero la luna me dijo con claro tino
que unos bellos juegos celestes
no eran aquí en la tierra jugables.
Aquella noche memorable
no llegó a repetirse jamás,
fueron tan bellos aquellos sueños!
que yo siempre evocarlos quería
mirando cada noche las estrellas
y rogando que la luna me premiara
con una nueva serie de fantasías…
Pero ahora contemplando lo real
entendí que mis sueños posible no eran,
pero sí lo de la nueva y maja escuela,
hecha realidad en mi soñar despierto,
y es que a veces políticos honrados
hacen realidad algunos bellos sueños.
La realidad ahora era,
que no habrá más paredes mugrientas,
en las nuevas inaguradas escuelas,
ni repetiremos la lección cantando,
ni pasaremos horas y más horas
a golpes de dura regla estudiando,
que eso"del saber con la sangre entra"
es cosa de maestros poco ilustrados
que desde hoy ya no tendremos
porque van a ser todos renovados…
Nuevas escuelas, nuevos maestros,
como homenaje y loa entusiasta
dedico en forma de poema-recuerdo
a las inaguradas"Escuelas Graduadas"!