Guía para Elegir un Maestro

¿Quién es un verdadero Maestro?

Al experimentar que el cuerpo es frágil como un cántaro, y manteniendo su mente como una fortaleza, el discípulo debería atacar a Mara con el arma de la sabiduría, y luego, guardar preciosamente lo que ha conquistado.

Dhammapada

El Libro Tibetano de los muertos es un texto con consejos muy útiles a este respecto:

"Debes examinar su estilo de vida, sus enseñanzas, las cualidades de aquellos a su alrededor. Puedes encontrar faltas. Esto está claro.

Aquél que necesita una enseñanza clara, cuyas opiniones a menudo contradicen los textos tradicionales (pero puede argumentar y explicar), que no practica lo que predica, que utiliza a sus discípulos para obtener dinero o fama, que se permite demasiados caprichos sin apenas control, debe evitarse en todo caso, sin que importe el título que ostente ni su formación y antecedentes.

El maestro digno de confianza debe ser lúcido en su enseñanza, está normalmente de acuerdo con los textos tradicionales, y se comporta de acuerdo con ellos.

Hace esfuerzos en beneficio de los demás: se preocupa por las necesidades y no por la utilización de los discípulos. Desprecia el dinero o la fama, tanto si vive cómodamente y es conocido como si no, lleva un estilo de vida moderado, aunque no por ello la diversión signifique siempre algo perjudicial.

Un maestro así, aunque carezca de un gran titulo o linaje, aunque no cuente con una formación exótica, probablemente es de toda confianza".

¿Crees que tu maestro es así?

Pero de todas las cosas que más distinguen a un Maestro de verdad de uno falso es su compasión... Algunas veces puede ser sencillo y dulce y en otros momentos "rugir como un león", pero dentro se puede ver su corazón y compasión.

Buda dice que no debe ser confundido por su ropas, su manera de ser, su estilo... Son las Enseñanzas lo que es importante. Respeta a este Maestro o Maestra con tus palabras y acciones.

Hay dos tipos de Maestro

Por tanto, hay dos maneras de enseñar el Dharma. La primera se parece al canto del magnífico pájaro cantor, el karavika. La segunda se parece al rugido de un león.

Cuando el Sutra del Nirvana afirma que hay situaciones en las que no hay necesidad de palabras hirientes que señalen las faltas y errores de los demás, está hablando del método del karavika.

Pero el Sutra también dice que es necesario llevar palos y espadas para cortar cabezas. Esta es una clara referencia al segundo método, el rugido del león. Uno es dulce y el otro el claramente severo, pero el Sutra afirma que los dos traen beneficios.

dice:

El Sutra del Nirvana

"El bodhisattva Kashyapa se dirigió al Buda, diciendo: `El cuerpo de la Ley que tú, El Así Llegado, posees, es tan indestructible como un diamante. Pero aún no comprendo los medios por los cuales lo adquiriste. ¿Me lo puedes contar?´.

"El Buda contestó: `Kashyapa, es por haber sido un defensor de la enseñanza correcta por lo que pude obtener este cuerpo diamantino. Kashyapa, dado que (en el pasado) me dediqué a la enseñanza correcta, he podido obtener este cuerpo diamantino que dura por siempre y nunca se destruye.

"Buen hombre, los defensores de la enseñanza correcta no tienen que observar los cinco preceptos ni practicar las reglas de la conducta apropiada. Al contrario, deberían de llevar cuchillos y espadas, arcos y flechas...

"Los monjes (que no entienden el Dharma en profundidad) predican varias enseñanzas, pero aun así son incapaces de proferir el "rugido del león". ... Tampoco son capaces de refutar y convertir a los malvados que van contra la enseñanza correcta. Los monjes de esta ralea no pueden aportar ningún beneficio a sí mismos o al pueblo. Deberías darte cuenta de que en realidad son unos vagos y unos gandules.

Aunque ponen cuidado en observar los preceptos y seguir una conducta impecable, deberías darte cuenta de que no pueden conseguir nada. (Entonces cuando un monje profiere el "rugido del león"...). Al oírle predicar, los que rompen los preceptos se enfurecen todos hasta el punto de atacarle.

Este predicador de la Ley (el del rugido de león), aunque al final pueda perder su vida, sigue siendo digno de llamarse una persona que observa los preceptos y trae beneficios tanto a sí mismo como a los demás".

En las enseñanzas está claro que algunos defensores de la enseñanza correcta no tienen que observar los cinco preceptos o practicar las reglas de la buena conducta. (Más bien deberían llevar cuchillos y espadas, arcos y flechas, pinchos y lanzas)´.... Pero otros deben ser dulces y llevar ramos de paz.

¿Qué sentido tiene esto para los que desean encontrar un Maestro?

El Sutra del Nirvana afirma claramente que uno debería asociarse estrechamente con quien gobierne, llevando arcos y flechas y ayudando a derribar a los malvados, pero el Sutra del Loto dice que uno debería mantenerse alejado de los que están en el poder y debería comportarse con humildad y amor benevolente.

Parece como si hubiera un conflicto entre la amabilidad de uno y la severidad del otro.

El "Comentario al Sutra del Nirvana" afirma:

"Cuando los monjes o laicos defienden la Ley, lo más importante para ellos es adoptar la actitud mental básica apropiada.

Deberían hacer caso omiso de los detalles exteriores, ceñirse a los principios, y así extender las enseñanzas del Sutra del Nirvana".

Por tanto dice que los defensores de la enseñanza correcta no tienen que obedecer a las minucias del reglamento. Y por eso es por lo que dice que no tienen que practicar las reglas del comportamiento apropiado.

En este Sutra del Nirvana que pone énfasis en el enfoque severo y también menciona que es preciso morar en el estado en el que uno mira a todos los seres vivos como si fueran sus propios hijos. De esta manera, está claro que quien profiera el "rugido del león" también debería morar en la compasión.

Por otra parte, el Sutra del Loto que dirige su énfasis al enfoque del "pájaro cantor" recomienda la severidad en ciertas ocasiones.

El Maestro Chang-an declaró:

"Deberías asegurarte de que tus elecciones sean adecuadas y nunca adherirte sólo a uno u otro".

En la enseñanzas T´ien-t´ai queda claro que

"el método elegido debería ser el que encaje con las circunstancias".

Esto parece un consejo lógico.

Pero hay otro factor importante, que es la naturaleza de la persona que recibe las enseñanzas. Para algunos el dulce canto del karavika resulta demasiado aburrido y artificial, mientras que paraa otros el rugido del león les parece insensible y cruel.

Es cierto también que parece darse la posibilidad de una correspondencia perfecta entre los maestros del "rugido del león" con gran compasión y los que responden al enfoque directo sin adornos ni ceremonias. También parece haber un encaje perfecto entre los que enseñan con la voz del karavika que sabe cuándo aplicar presión y los que responden al enfoque amable y no rudo.

Entonces, ¿cómo conseguir este encaje? Parece que hay una gran correlación entre los que acuden al Dharma con el potencial de la discriminación y la gran compasión, que no obstante moran en el reino de los fantasmas hambrientos (codicia) y la hipersensibilidad al "rugido del león".

Igualmente, parece haber gran correlación entre la preferencia por el estilo directo y severo de los que tienen el "rugido del león" y los que tienen potencial para la gran sensibilidad, los demonios de confusión, y también los que tienen potencial para la inteligencia natural y la comprensión de la unidad de todas las cosas, las bestias salvajes.

Por eso, se recomienda que los Confundidos y los de Aversión y Hostilidad busquen un maestro con rugido de león y compasión.

Por eso, se recomienda que los tienen apego y deseo, los de Codicia, busquen a los maestros con Voz de Karavika y juicio sutil.

Pero el maestro no vale si no hay un buen discípulo... y recuerda, los que se apegan a ritos, ceremonias y rituales y no entran profundamente dentro de las prácticas no pueden andar en el camino con tranquilidad.