UNA PUERTA ALTERNATIVA: MAHAMUDRA

大符:门选择

¿Qué es el Mahamudra?

Maha, como sabe todo el mundo, significa “grande”, pero la parte del mudra causa muchos problemas, ya que hay todo tipo de supersticiones y creencias adheridas a ese concepto que no tienen nada que ver en absoluto con el verdadero proceso y función de los mudras.

Los mudras no son algo secreto ni misterioso.

Consisten en movimientos simbólicos de manos que actúan como refuerzo para la conceptualización del Gran Sello –algo similar a un sello oficial de aprobación del sistema natural, con vistas a unificar el principio femenino del hemisferio cerebral derecho (que contiene los programas para el desarrollo correcto del ser humano) y el principio masculino (que es su expresión en el hemisferio izquierdo).

¿Por qué funcionan?

A un nivel funcionan porque proporcionan un estímulo externo más allá de las palabras, lo cual ofrece una manera más eficaz de almacenar la información del Mahamudra libre de contaminación.

Pero hay otro factor importante que debemos recordar. En las clases elementales de fisiología, muchos habrán visto la figura llamada “homúnculo”, que es una pequeña imagen del ser humano dibujada sobre el cerebro como representación de la importancia neuronal que tienen las diversas partes del cuerpo.

En ese diagrama se puede apreciar la relación tan importante que existe entre las manos y el sistema central nervioso. Eso no resulta nada sorprendente una vez se entiende que los primeros procesos que se despiertan en el bebé recién nacido con vistas a mamar del pecho de su madre implican la coordinación entre manos, ojos y boca.

Ahora que entendemos qué es lo que hace que resulten eficaces los movimientos de las manos, podemos preguntarnos cuál es el objetivo aparente del Mahamudra. Pues bien, su objetivo aparente es despertar la conciencia a los principios naturales de los procesos femeninos, que son programas pasivos esenciales para que haya una armonía y equilibrio correctos en el ser humano.

El Mahamudra y el Chan

Como sabrán los lectores de esta página web, Mahabodhi Sunyata se dedica a los estudios avanzados del Dao y Chan, que son compañeros de viaje a la hora de entender cómo se abre la puerta a lo que el Dao llama la “madera sin tallar”. En lo esencial, por tanto, si eliminamos los ritos y ceremonias superfluos, el Mahamudra y el Chan sólo difieren en que el Chan no emplea los mudras en los procesos de contemplación.

El Mahamudra, por supuesto, brota de los maestros indios, como todo el budismo, y más tarde fue adaptado y transformado para ajustarse a las condiciones espirituales predominantes tanto en el Tíbet como en China.

Dado que el Chan no cierra la puerta a los métodos beneficiosos de otras disciplinas y tampoco cree que se deba adoptar un enfoque sectario en algo tan importante como abrir la puerta a la propia naturaleza del Dharma, no sólo apoyamos el Mahamudra correcto (que no es tan fácil de encontrar), sino que también lo enseñamos como parte de la comprensión básica del Chan. No enlazamos ambos de la misma forma que enlazamos el Chan con el Dao, pero sin embargo nuestra unión con las ideas del Mahamudra hace que el Chan sea mucho más importante y flexible.

De la misma manera que usamos la Vipassana Jivindriya correcta y completa, tal como la enseñó el Buda, como la única base desde la que lanzarse a las contemplaciones de cualquier disciplina del Buda Dharma, también empleamos la comprensión del Mahamudra para reforzar la comprensión del Chan.