Somos historia de colegios

Ay! por esas mismas calles

que han crecido con nosotros

pasa lo que va a venir, lo sé.

Esos ómnibus cargados

esos cines atestados

esas luces, pobres, se ancharán.

Vivimos la prehistoria

del futuro enmascarado

en la circunstancia del amor.

Cuántos ritos naturales

llenarán los nuevos trajes

y cuántos demonios quedarán,

también lo sé.

Nacerán los nuevos hijos

de sus viejos, viejos padres

y quizás seremos lo peor.

Nuestras mismas agonías

sembraremos en sus días

como vieja ya generación.

Los poetas amaremos

en virtud de su cinismo

porque nuestra vida nos costó.

Y tendremos nuestro muertos,

nuestra historia y un desierto

imaginario para defender siempre de Dios.

Y seremos feos y hermosos

como, en fin, han sido todos

llenos de defectos y virtud.

Nunca seremos perfectos

pero nunca dejaremos

de tratar de serlo, por amor.

De las tablas de valores

cada vez sabremos menos

todo cabe en un mundo sin hambre.

Dentro de un siglo seremos

esa historia de colegio

que aburre a los niños porque ya,

ya pasó.