Te doy una canción

Cómo gasto papeles recordándote,

cómo me haces hablar en el silencio,

cómo no te me quitas de las ganas

aunque nadie me ve nunca contigo.

Y cómo pasa el tiempo que de pronto son años

sin pasar tú por mí, detenida.

Te doy una canción si abro una puerta

y de las sombras sales tú.

Te doy una canción de madrugada,

cuando más quiero tu luz.

Te doy una canción cuando apareces

el misterio del amor,

y si no lo apareces no me importa:

yo te doy una canción.

Si miro un poco afuera me detengo:

la ciudad se derrumba y yo cantando,

la gente que me odia y que me quiere

no me va a perdonar que me distraiga.

Creen que lo digo todo, que me juego la vida,

porque no te conocen ni te sienten.

Te doy una canción y hago un discurso

sobre mi derecho a hablar.

Te doy una canción con mis dos manos,

con las mismas de matar.

Te doy una canción y digo: “Patria”,

y sigo hablando para ti.

Te doy una canción como un disparo,

como un libro, una palabra, una guerrilla:

como doy el amor.

(1970)