La oveja negra

Se ha perdido la oveja negra.

Se me ha ido para las piedras,

a ese pasto que queda arriba

de la montaña, cerca del sol.

O estará buscando otra oveja

de su color.

Es la misma oveja oscura que de noche

no se ve bajo los rayos de la luna.

Es la misma que se atora en los barrancos.

Es la misma que anteayer maldijo el cura.

Ahora es la maldición de mi rebaño.

Ahora es la incertidumbre de mis hijos.

Ahora es cuanto hay de triste en estos años

porque el padre por su boca la maldijo.

La mañana vendrá temprano,

y estaré para echarle mano.

Romperé con su mal ejemplo

para el rebaño que manda Dios,

porque el pasto de mis ovejas

lo siembro yo.

(1971)