Comentarios de Ignacio Carvallo. Mayo de 1997.

Presentación del libro "También tus Arcillas  de Modesto Ponce Maldonado en el Museo Nahim Isaías B., de Guayaquil

 

Distinguido público, señoras y señores:

El escritor quiteño Modesto Ponce Maldonado, aquí presente, merece esta noche una cálida bienvenida. Y un voto de gratitud, al querer estar con nosotros y traernos una primicia de sus desvelos y voluntad narrativa, su libro "También tus Arcillas".

En Quito se dijo que era "un cuentista escondido"... Nosotros agregaríamos, un cuentista silencioso, aunque parezca un contrasentido, un cuentista silencioso que en homenaje a la vida y en homenaje a los lectores de hoy y de mañana, rompe ese silencio y nos convoca a su alrededor para ayudarnos a comprender algo más la naturaleza humana.

Como, en verdad, no lo hemos conocido por acá, nos remitimos a lo indicado en una parte de la solapa de su libro, que dice que siguió estudios de Ciencias Políticas y Sociales hasta su licenciatura; escribe en revistas como 15 Días y en El Comercio; y ha colaborado en publicaciones literarias como Con Texto, de Quito; o Solotextos, de Cuenca, sello editorial de la Casa de la Cultura....

Al leer el volumen que nos trae es que quedamos bastante intrigados por los nutrientes que pudieran tener su instinto de cuentista y su vocación evidente, pero son las más directas vías para que llegue a nosotros un conjunto de cuentos que salen de lo común.

Esto de que "salen de lo común" es frase también bastante común... O sea que, siendo frase común esta de que algunos asuntos "salen de lo común", si se refiere a los cuentos de TAMBIÉN TUS ARCILLAS, la frase nos ayuda por lo siguiente:

    - Casi es una moda narrar en forma que se descuida la limpieza de la atmósfera del cuento, la levedad y la precisión del motivo que anima la narración. Esto, salvo las excepciones perfectamente conocidas dentro del predominio de la hojarasca.

     - Casi es una moda "moderna" ignorar voluntaria o involuntariamente, la condición plenamente humana de la gente, por no haberla podido descubrir por un genuino acercamiento a su esencial realidad individual y social. O porque se carece de la capacidad de entender al otro que está un poco más allá de uno y que, en parte, también es uno. I para cuyo entendimiento nos ayudará el habernos descubierto nosotros mismos

    - Casi es una moda abusar sin la menor consideración para los lectores, de lo cansino, exageradamente intelectual, abstracto y hermético, de tal manera que son los mismos escritores carentes de un sentido acertado de la función del Arte, quienes han alejado a los lectores de los libros "modernos" o  de la literatura actual...

De ahí que la más grande sorpresa que traiga para nosotros Modesto Ponce Maldonado es la que se va contra todas esas corrientes supuestamente de moda. I que, por esto, el volumen TAMBIÉN TUS ARCILLAS se escape de lo que ahora es tan común....

En la edición de hoy del periódico La Razón, en su página Cultural, consigné: Los comentarios que proceden a esta visita, son unánimes en reconocer que estamos frente a un escritor que reconcilia los valores de la auténtica narración con el lector y la sociedad actuales.

Para contar se necesitan las cualidades que demuestra Ponce Maldonado.

Básicamente, atraer a quien oye o lee, trasmitir sin artificios, "con pleno Arte (así con mayúscula) una realidad humana, un ensueño también humano, un cúmulo de vidas, momentos y circunstancias que de alguna manera nos lleguen a tocar lo esencialmente cordial que llevamos en lo íntimo.

Para esto, el cuentista debe haber vivido, haber entendido a la gente, haberse introducido con sutileza en mundos y vidas ajenas que sean, para su personal selección, interesantes. Y esto no quiere decir que los personajes o motivos deben ser grandilocuentes o heroicos. Hoy -y de esto hace más de 40 años- vivimos la época de las tragedias secretas de anónimos, grises personajes que resultan de intenso contenido para comprender mejor la naturaleza del hombre, las deformaciones de nuestra sociedad, los alcances del dolor secreto o de las tragedias mínimas que oscurecen destinos y fracturan legítimas esperanzas.

Nuestro compatriota Ponce Maldonado ha sido visto como "un cuentista escondido" porque no ha hecho vanidad su virtud de contar. Pero sí ha hecho estudio, responsabilidad de deleite interior de su vocación narrativa. El resultado es este volumen donde "cada cuento es como un pozo en el que parece haber caído una estrella..." Perfecta definición de lo que es un conjunto de historias y momentos en los que brillan como antológicos: Tengo un compromiso a las doce; También tus arcillas; Todo es cuestión de tiempo, Renata; Nos veremos pronto, mi amor o Sara... ".

....Hasta aquí, la cita tomada del comentario de La Razón, de nuestra autoría, sí al que agregamos:

Cuando unas páginas de También Tus Arcillas nos llevan a los altibajos vitales de un joven que es el típico paracaidista de los cocoteles, de las exposiciones de arte, de los brindis y matrimonios donde es posible burlar ciertos controles de ingreso... nuestro escritor revive las clásicas perspectivas, inmortales, que proyectaron maestros como Chejov, Pushkin o el inolvidable Leónidas Andreiev... 

¿Los habrá leído, lo apasionarán, lo acompañarán estos maestros a nuestro Modesto Ponce Maldonado?.... Muy posible, pero misterio de todas maneras. Misterio que quizás lo resuelva pensar que hay hermandades espirituales que no necesitan de influencias de lecturas, sino que esas hermandades colocan en el mismo sitio de sensibilidad y percepción a artistas sumamente alejados por el tiempo, por el espacio geográfico, por las circunstancias sociales... Lo cierto es que el cuento que no muere se sustenta en los valores de la sensibilidad y el humos, en la sutileza del diagnóstico social, en la ironía solidaria con las flaquezas humanas, como lo descubrimos en las páginas de TENGO UN COMPROMISO A LAS DOCE, el cuento del paracaidista social cuyo compromiso auténtico de asistir al sepelio de la madre se agita irónicamente en la desazón que le causa no encontrar la corbata negra de rigor y que, con toda seguridad, la madre sabía dónde se guardaba....

Y, como de todas maneras, es indefinible e inaprensible para las palabras de cualquier comentario lo que son el estilo, la técnica casi de sincretismo que viajan en estas páginas, subrayamos -según otras historias de honda interioridad- la ternura, el lirismo, la agonía existencial de las páginas de SARA, cuento que abre el volumen. De inmediato deja un aire de misterio y añoranza en un agónico ir y venir de edades que se necesitan y van del crepúsculo marino a la noche que se aferra a una esperanza en algún amanecer llegado de mano en la ternura....

Pero siendo También Tus Arcillas una caja de sorpresa, saldrán a nuestro encuentro el fluir denso, sabio, amplio y poderoso de ESTA VEZ CON ZAPATILLAS DE CUERO.... O el cuidadoso tratamiento perfectamente cantado, de la dureza y la fealdad, de la miseria andina y pueblerina, del menosprecio humano empapado en dolor de soledades asfixiantes que transmite el cuento HAY UN BOSQUE ESPESO HACIA EL OESTE, con Mención de Honor en la III Bienal del Cuento Ecuatoriano Pablo Palacio. Quiero cerrar mi intervención repitiendo lo que en el final párrafo de la segunda solapa del libro se consigna con honesta síntesis en referencia a cuanto nos entrega Modesto Ponce Maldonado:

"Cuentos adultos pero con aire liviano y nuevo, cuentos para leer y salvarnos en un tiempo en que la vulgaridad y la desesperanza parecen ser el paradigma de este país...."

No olvidemos: si cuento es síntesis y precisión, si cuento verdadero y moderno es una vía para vivir vidas ajenas apenas en un minuto de sus originalidades, si cuento clásico es un empujo de imaginación en alas de realismo y verdad y dimensión desconcertante, la selección hecha por nuestro autor lo presenta como un clásico moderno, al mismo tiempo. Como un escritor comprometido con todos, con el múltiple interior de sí mismo y con las realidades de los otros, personajes oscuros que en algo llevan un a luz a la que -dolorosa o esperanzada- este cuentista descubre y nos invita a descubrir cómo es de contradictoria, paradójica, desconcertante, la realidad humana, nuestra realidad, la realidad que vive y alimenta el escritor, la realidad que sigue pidiendo una mirada, una atención, una denuncia, en nuestras sociedades bulliciosas, superficiales y duras, sociedades en descomposición...

Gracias por su presencia, gracias por su responsabilidad de escritor, gracias por sus páginas que nos reconcilian con la literatura que merece admiración, compañía y respeto....

Y gracias a la acogida que para conocer este nuevo y significativo libro de cuentos, ha brindado el Museo Nahim Isaías y su Directora Violeta de Orrantia, cultora de trascendente poesía. Si no creamos una atmósfera favorable para nuestras expresiones espirituales, más sacrificado se volverá el camino de nuestros artistas. I, a propósito, participo al culto público que ha respondido positivamente a esta presentación, que suele decirse en el medio periodístico que es enfática la promoción que se hace en el deporte, de la farándula; siendo escasa la que se hace a la cultura, a la literatura....Pero si nosotros no nos respaldamos y acompañamos, no nos unimos como se ha visto esta noche, ¿quien, qué futbolista, que rockero vendrá promover la cultura?..... Gracias, entonces, al sensible y atento público aquí presente....