Diario EL EXPRESO
Diario El Expreso, Guayaquil, 11 de julio, 1999
Este libro ya huele a clásico. Esa paciencia de orfebre que tuvo su autor lo confirma como un libro modelo, para reafirmar que puede resistirse en el tiempo. Modesto Ponce, el obsesivo y meticuloso escritor de cuentos, publica en 1997 la primera edición de este ejemplar totalmente ciudado y vuelto a corregir por esta pluma amante de la perfección y de las historias precisas y consistentes. Con un título que convoca inclusive a la transgresión de la sintaxis, se abre el mundo mítico de estos personajes sencillos, totalmente terrenos, que no se dejan llevar por una profunda obsesión de su autor. Diría, más bien, que caminan por sí solos. 13 cuentos de carácter y buena factura. Todos an-tológicos. Se diría que es un libro donde no hay cuento malo, aquí la afición por una historia es gratuita. Todos son para escoger. La crítica más respetable del país se ha expresado masivamente sobre este libro-isla en la biblioteca de narrativa corta del país. Es un libro continente, que en su contenido se puede vislumbrar la maravilla de la paciencia. Muy recomendado.