Diario El Comercio, Quito, 5 de abril de 2008

MODESTO PONCE REEMPLAZA LA CIUDAD POR LA MENTE DE UN INSANO

'La casa del desván' obtiene su reconocimiento internacional'


Estímulo

La segunda novela del escritor quiteño Mo­desto Ponce se ubicó entre las lO fInalistasdel premio Planeta-Casa de América. En junio apa­recerá en Ecuador.

Redacción Cultura

Entre los grupos literarios -intencionales o no- del Ecuador hay presencias benéficas. Es decir pre­sencias que son ausencias. Que navegan entre los fragmentos de 'buena sociedad' literaria sin aca­bar por anclarse en ninguna isla.

Uno de estos 'outsiders' es Mo­desto Ponce Maldonado (Quito, 1939),quienacabadeserrecono-cido en la segunda edición del premio continental Planeta-Casa de América. Su novela, titulada 'La casa del desván' y presentada bajo el seudónimo Sergio Lozada, resultó elegida entre los 10 finalis­tas del ya prestigioso premio.

El jurado que reconoció la nove­la del quiteño de entre un total de 557 enviadas, estuvo compuesto por los escritores Gioconda Belli, Alvaro Pombo y Marcela Serrano, junto al director general de Casa de América, Miguel Barroso, y el director editorial de Planeta Ar­gentina, Ignacio Iraola.

El ganador -consabido es- de es­ta segunda edición del galardón fue el escritor chileno Jorge Ed-wards por su novela 'La casa de Dostoievski'(USD 200 000). El fi­nalista (USD 50 000) resultó el narrador colombiano Fernando Quiroz con la obra 'Justos por pe-cadores'. La primera edición laga-naron el argentino Pablo de Santis ('El enigma de París') y el peruano Alonso Cueto ('El susurro de la mujer ballena) el año pasado.

Según sus propias palabras esta segunda novela significa un cam­bio completo en cuanto a compo­sición y temática respecto de la primera'El palacio del diablo' que fue publicada en2005 por el mis­mo autor. En aquella la pluma de Ponce se regodea a sus anchas en la pintura de un personaje que da sentido narrativo a todos los de­más: la ciudad de Quito. En las en­trañas de ese personaje bebe esa suerte de complejo fresco de un tiempo que hace el autor.

En esta -eso es lo que ha adelan­tado hasta que aparezca la edi­ción en junio próximo, según la promesa de Oswaldo Obregón, principal de Planeta Ecuador- la narración transcurre "en el inte­rior de la cabeza de un demente". ¿Cómo será la cabeza de ur. de­mente? Dependerá, sin curaa¿. ie.demente. El de Ponce es un de­mente fragmentado, .roto, con imágenes y trozos de vida que van y vienen en un zigzag entre su pro­pia existenciay lo real.

Esta dialéctica está armada en dos bloques de tres capítulos cada uno. Con una oscilación temporal y de voces narrativas, el relato avanza y retrocede alternativa­mente hasta encontrarse, al final, en un punto clave a partir del cual se descrifra la arquitectura narra­tiva de toda la novela.