MAGNUSCRITOS de Iván Ulchur

Modesto Ponce Maldonado

Es una novela, y no lo parece; puede ser juzgada como incoherente, algo loca, y no lo es; es muy subjetiva, pero no cae en las trampas de la personalización; posee un extraordinario sentido del humor y de la ironía, y es, a la vez, humana y tierna; muchos dirán que es insolente, pero no deja de ser altamente poética. Tiene además una cualidad indispensable en la narrativa: el interés. No es fácil desprenderse de sus 207 páginas. ¿Cuál es el secreto? Muy simple: está bien hecha.

"MAGNUSCRITOS", editado por Abrapalabra, es un libro escrito por Iván Ulchur, colombiano, Licenciado en Humanidades de la Universidad del Cauca y Ph. d. de la Universidad de Texas (Austin). Vive en Quito desde hace ocho años y es profesor de Literatura.

Cuenta la historia de Magnus Shorter, un pequeño-gran escritor. Dentro del plano estructural, los hechos que relata, combinados con comentarios, reflexiones y "escapes", no siguen una frecuencia, ni siquiera están unos detrás de otros; simplemente parecen contarse como salen, a la buena de Dios o, mejor dicho, a la buena de Iván, el dios sabio y burlón que está atrás -y dentro- de todo. Hay otro plano, que se refiere a cómo se cuentan las historias, a su ritmo, donde resalta una extraordinaria calidad literaria. Un tercer plano se encuentra en el contrapunto entre los profundos conocimientos literarios y las actitudes ante la vida, la vida misma -al fin y al cabo están emparentados-. El cuarto nivel, que corre por debajo de todo, es el que hace de la obra una novela, y podría identificarse en definitiva con la trayectoria del personaje, sus peripecias, sus ansias y amores, sus angustias y soledades. Esta dimensión otorga sentido al libro y tiene una proyección que inclusive excede a los textos. Se manifiesta tanto por los comentarios "sueltos", que no están porque sí sino como parte del alma del personaje-escritor, como también por los espacios dejados en blanco. A estos hay que interpretarlos como giros no encontrados, frases no consumadas, o que se ha preferido guardarlas bajo el silencio, o que serían dichas en otra ocasión. No es difícil descubrirlo aun antes de que el autor lo revele: "Una vez inventado el relato, )a dónde van a parar los datos terribles que se han quedado en la penumbra de lo no dicho? Lo que no se dice atormenta el lado utilitario del escribidor y de quien se atreve a leerlo". Justamente la novela -es difícil definir lo que es una novela- aparece en este transfondo que no es otro que el oficio de escribir con sus vivencias, fantasmas y tormentos: "La literatura es una especie de confidencia irresuelta". "Todo narrar es un malabar para encubrir los verdaderos miedos y develar apenas los artificios".

"MAGNUSCRITOS" es un libro inteligente. Implica una capacidad imaginativa y de expresión inusuales, desde los juegos de palabras y los malabares hasta lo más hondo y trascendente, pasando por la poesía y el humorismo fino y desgarrado. Iván Ulchur dice las cosas a su modo, pero sabe decirlas bien, con gran sentido estético. El libro es inteligente también porque tiene finura, desenfado y la humildad propia de quien está seguro de lo que hace. Tiene razón cuando escribe: "Burlarse es ganar tiempo". ¿Libro irreverente? Así lo ha presentado. Pero, ¿qué es lo irreverente? ¿La sacralizaciones no serán una irreverencia hacia lo simplemente humano?

"MAGNUSCRITOS" es una obra cargada de universos y de cosas. Por eso es una novela. Está llena de vida, de optimismo, de amor. Hay que "escribir pensando no en las bofetadas de la vida sino en el gozo de estar vivo". "Todo se acaba, es cierto, menos el deseo del deseo. La gana de la búsqueda. El prurito de fiestar". Es un libro que se puede, y se debe, releer a gusto; más todavía, que permite que se lo abra en cualquier sitio.

Al acabar, el autor -y el personaje- no pueden disimular su pena, su desconcierto al sospechar que el punto final se acerca. Son temas que no desearon quedarse rezagados, como si hubiesen exigido suspender la edición y solicitar un lugar en las últimas páginas.

Me gustaría leer relatos cortos de Iván Ulchur. ALGUIEN AL OTRO LADO DE LA LINEA (95) es una pauta. LA AVENTURA DE UNA PAREJA (136) es una muestra bien lograda de minicuento. Él ha escrito que "el cuento es la novela de un desmemoriado". No sé cómo se comportaría su temperamento inquieto, buscador, lleno de inventivas y sorpresas ante la violencia interna que presupone escribir cuentos.

(VII-1995)