Marinar la carne de pollo en 2 cucharadas de salsa de soja, sal y pimienta al gusto.
Verter, en una cazuela que pondremos a fuego medio, 4 vasos de agua, 2 cucharadas de salsa de soja, 2 cucharadas de vinagre de sidra o arroz, pimienta, sal al gusto y el pollo marinado.
Cocinar hasta que la carne cambie de color.
Pasado el tiempo, sacar el pollo del caldo y desmenuzarlo en un plato.
En 1/4 de vaso de agua, diluir la harina de maíz y reservar.
Incorporar de nuevo el pollo desmenuzado en la cazuela.
Agregar también los brotes de soja, los champiñones, los guisantes, 2 cucharadas de pulpa de tomate y el aceite de sésamo.
Dejar cocinar 15 minutos a fuego medio.
Pasado el tiempo, añadir los langostinos pelados y la harina de maíz diluida.
Removemos un poco hasta que la sopa espese y rectificamos de sal al gusto.
Opcionalmente, podéis adicionar una pizca de jengibre en polvo y una cucharadita de salsa de ostras.