Asignación de recursos a la salud en el Proyecto de Presupuesto Nacional 2021


#MonitoreoCGR-IT2021 N.° 05

17 de setiembre de 2020

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Asignaciones presupuestarias en salud para 2021 no reflejan previsiones para atención de la pandemia COVID-19

Recursos asignados a la Salud disminuyen en el 2021, por efecto asociado a medidas de restricción del gasto del Gobierno.

El presupuesto asignado a la Salud en el Proyecto de Presupuesto Nacional 2021, incorporado en el Ministerio de Salud (MS), alcanzó la suma de ¢364.272 millones, monto inferior al presupuesto ajustado de 2020[1] en ¢52.232 millones (es decir un -12,5%), siendo que para el periodo 2017-2020 el crecimiento promedio del presupuesto de esa cartera ministerial fue de 9,7% (Ver Cuadro N° 1).

Esto responde principalmente al acatamiento de la solicitud del Ministerio de Hacienda[2] en la cual se comunicó que el gasto presupuestario máximo para el año 2021 debía ser igual al 90% del presupuesto ordinario aprobado para 2020, así como a recursos extraordinarios que se habían incorporado en 2020 para atender los efectos de la pandemia, que ya no se registran en 2021, y a la no incorporación de aumentos salariales por costo de vida para el período en cuestión.

Dicha asignación presupuestaria representa el 3,2% del total del Proyecto de Presupuesto Nacional (¢11.448.570 millones) y el 7,5% del presupuesto asignado a las instituciones que conforman el Poder Ejecutivo (¢4.869.286 millones), participación que se mantiene sin cambios significativos según el promedio de los últimos cuatro años[3].

El presupuesto asignado al MS incorpora gastos corrientes por ¢356.034 millones (97,7% del total), los cuales caen ¢45.572 millones (-11,3%), con respecto al presupuesto ajustado de 2020, dentro de estos gastos las partidas de transferencias corrientes y de remuneraciones, tienen el mayor peso.

En la partida de transferencias corrientes se concentran recursos por un monto de ¢232.135 millones (63,7% del total del presupuesto asignado), lo cual implica una reducción de ¢42.825 millones (-15,6%) con respecto al presupuesto ajustado 2020, explicado por disminución de transferencias a otros entes públicos, principalmente a la CCSS.

Dichos recursos se destinan principalmente a transferencias a la CCSS, por un monto de ¢197.887 millones para cubrir el seguro de salud de diferentes poblaciones[4]; transferencias que están siendo impactadas por recortes de gastos y disminución de recursos por efectos de pandemia, considerados en 2020 y que fueron suprimidos en 2021.

La partida de remuneraciones incorpora recursos por un monto de ¢88.437 millones (24,3% del total), esta partida experimenta una disminución de ¢233 millones (-0,3%) con respecto al presupuesto ajustado de 2020. La caída en la asignación presupuestaria se debe principalmente a eliminación de plazas[5] y la no incorporación de aumentos por costo de vida en 2021, ya citados.

Cuadro N.° 1
Ministerio de Salud: Evolución de los gastos por objeto del gasto, 2012-2021*/
-millones de colones-

Cuadro 1
*/ Las cifras correspondientes al periodo 2017-2020 incluyen ajustes para hacerlo comparable con 2021, incorporando los presupuestos de los órganos desconcentrados del Ministerio de Salud.Fuente: Elaboración CGR con datos del Proyecto de Presupuesto Nacional 2021.

Órganos Desconcentrados representan el 24,7% del presupuesto asignado a la Salud.

Importante de señalar que, con la entrada en vigencia de la Ley N° 9524, un total de 7[6] Órganos Desconcentrados entran a formar parte del presupuesto asignado al MS, como se muestra en el siguiente cuadro.

Cuadro N.° 2
Ministerio de Salud: Órganos Desconcentrados incorporados en el Proyecto de Presupuesto Nacional 2021
-millones de colones-

Cuadro 2
Fuente: Elaboración CGR con datos del Proyecto de Presupuesto Nacional 2021.

Estos órganos absorben recursos por un monto de ¢90.020 millones, que equivale al 24,7% del total del presupuesto asignado al Ministerio, siendo la Dirección Nacional de Centros de Educación y Nutrición y Centros de Atención Integral (Dirección del CEN-CINAI)[7] y el Instituto sobre Alcoholismo y Farmacodependencia (IAFA), los órganos que concentran la mayor proporción de recursos asignados con un 19,6% y 2,6% del total del presupuesto de dicha cartera ministerial, respectivamente.

Un aspecto a considerar es que la CNVE, el CTAMS y la OCIS se integran como subprogramas, que si bien de previo a la promulgación a la Ley N° 9524 contaban con presupuestos independientes, presentan soporte administrativo por parte del MS. Caso contrario, son la Dirección CEN-CINAI, el IAFA, el INCIENSA y el CONIS que son incorporados como programas presupuestarios, y que poseen una estructura administrativa aparte del MS. Lo cual implica acomodos en lo presupuestario, administrativo, manejo de recurso humano, entre otros.

Uno de los efectos de la incorporación de los órganos desconcentrados en el MS es el incremento de las plazas que pasó de 2.470 funcionarios en 2020 a 5.415 para el año 2021, lo que implica que los órganos desconcentrados agregaron un total de 2.945 plazas a la planilla del Ministerio, todos puestos de cargos fijos.

Asimismo, es de relevancia señalar que los superávit de los órganos desconcentrados no se incorporan en el Proyecto de Presupuesto Nacional 2021, debido a que en el momento de la formulación del Proyecto no se contaba con el dato exacto de los montos respectivos, lo cual es una situación que puede limitar la ejecución de actividades de parte de esos órganos al inicio de 2021, y que implicará una definición técnica y jurídica para su incorporación al Presupuesto Nacional en dicho año.

Finalmente, en el tema de órganos desconcentrados en el área de salud, la Contraloría General realizó un estudio[8] donde se concluye sobre la necesidad de buscar alternativas y tomar acciones que tiendan a ordenar y mejorar esta área de gestión de las funciones del sector salud, asociado al desarrollo de las competencias por parte de sus órganos desconcentrados; de manera que se revise este diseño para generar una mejor coordinación, planificación y ejecución de las políticas públicas vinculadas al quehacer de esta área de tanta relevancia para el país.

Proyecto de presupuesto 2021 limita asignaciones en salud asociadas a la atención de la pandemia.

Para hacer frente a la pandemia COVID-19, el MS ha informado[9] que ha utilizado con mayor intensidad algunas partidas de gasto tales como: tiempo extraordinario; transporte y viáticos dentro del país; combustibles; productos farmacéuticos; alimentos; materiales médicos, de limpieza y seguridad; que en 2020 fueron reforzados por un monto de ¢2.095 millones, mediante Presupuesto Extraordinario de la República[10] para la gestión del programa 631-1 de Rectoría de la Salud.

Asimismo, se destacó que en 2020, se realizó una asignación[11] de ¢200 millones para el INCIENSA[12], una transferencia de ¢28.012 millones para la CCSS[13], también relacionadas con efectos de la emergencia sanitaria.

No obstante para 2021, según informó el MS[14], solo se fortaleció parcialmente la asignación de recursos al reglón de tiempo extraordinario, el cual asciende a ¢588 millones[15], en el subprograma 631-1 de Rectoría de la Salud.

Asimismo, tampoco se visualiza en el contenido del Proyecto, recursos asociados a una previsión para la compra de vacunas contra el COVID-19, lo cual significa que el Poder Ejecutivo requerirá de un presupuesto extraordinario para atender dicha necesidad de la población en 2021.

Finalmente, se concluye que a pesar de que resulta muy probable que los efectos de la pandemia trascienden al ejercicio económico 2021, según los análisis de la Organización Mundial de la Salud (OMS)[16], esta situación no se refleja en asignaciones presupuestarias claves, para la debida preparación del MS, en la atención de la emergencia sanitaria.

Notas al pie:
[1] Refiere al Presupuesto 2020 al mes de agosto de este año (Inicial más extraordinarios y modificaciones presupuestarias), e incluye ajustes para hacerlo comparable con 2021, incorporando los presupuestos de los órganos desconcentrados del Ministerio de Salud.[2] Oficio DM-0912-2020 del 20 de julio de 2020, entre los gastos a recortar se encuentran incrementos por costo de vida, incentivos salariales, reconocimiento de horas extras, compensación de vacaciones, eliminación de plazas vacantes o congeladas, viajes al interior y exterior, viáticos, capacitación, recepciones y protocolo, publicidad y propaganda, impresión, información, transporte de bienes y otros servicios.[3] El promedio 2017-2020 en el primer rubro es de 3,6% y en el segundo de 7,2%.[4] Tales como: trabajadores independientes, asegurados voluntarios y convenios especiales, entre otras, asimismo se financian los exámenes de ADN para cumplir con la Ley de Paternidad Responsable y los procedimientos de fecundación In Vitro.[5] Según informó el MS se eliminaron 38 plazas.[6] Comisión Nacional de Vacunación y Epidemiología (CNVE), Consejo Nacional de Investigación en Salud (CONIS), Consejo Técnico de Asistencia Médico Social (CTAMS), Dirección Nacional de Centros de Educación y Nutrición y de Centros de Atención Integral (CEN-CINAI), Instituto Costarricense de Investigación y Enseñanza en Nutrición y Salud (INCIENSA), Instituto sobre Alcoholismo y Farmacodependencia (IAFA), Oficina de Cooperación Internacional de la Salud (OCIS).[7] Para financiar los gastos de operación de la Dirección Nacional de Centros de Educación y Nutrición y Centros Infantiles de Atención integral (CEN CINAI), se han consignado ¢17.067 millones, estos recursos se distribuyen entre los 596 Comités CEN CINAI de todo el país.[8] CGR. (2019). Informe de Auditoría de Carácter Especial sobre el Rol de los Órganos Desconcentrados en el Ministerio de Salud, 04 de octubre del 2019.[9] Información suministrada por la Dirección Financiera, Bienes y Servicios del Ministerio de Salud en entrevista del día 09 de setiembre del 2020.[10] Segundo Presupuesto Extraordinario Ley N° 9879 publicada en La Gaceta N° 186, Alcance N° 197 del 29-07-2020.[11] Primer Presupuesto Extraordinario Ley N° 9841 publicada en La Gaceta N° 91, Alcance N° 98 del 25-04-2020.[12] El INCIENSA informó a esta Contraloría General, que si bien en el 2020 se ha reforzado la partida 2.99.02, para la compra de insumos de laboratorio, y la partida 5.01.06, por los equipos de laboratorio requeridos para las pruebas COVID; para el 2021 no se han presentado aumentos en las partidas indicadas.[13] Para mitigar el efecto de la rebaja en la base contributiva producto de la crisis por el COVID-19.[14] Información suministrada por la Dirección Financiera, Bienes y Servicios del Ministerio de Salud en entrevista del día 09 de setiembre de 2020.[15] En 2020 corresponde a ¢1.423 millones.[16] OMS, (2020). Discurso del Director General, Tedros Adhanom Ghebreyesus, en una conferencia de prensa organizada por la Asociación de Corresponsales de las Naciones Unidas de Ginebra (ACANU). Ginebra, Suiza, 3 de julio de 2020.