Nació en Villa Mercedes el 25 de Mayo de 1925, en medio del desamparo y la miseria, en una humilde «casa» de la calle Belgrano. Muere en Buenos Aires el 12 de Noviembre de 1963. Descolló en el Boxeo nacional hasta llegar a ser Campeón Argentino. Como muchos otros provincianos, sus padres decidieron probar suerte en Buenos Aires cuando José María tenía apenas 10 años; la Plaza Constitución lo vio trompearse y lustrar zapatos a más de un compadrito hasta que alguien lo conectó con el boxeo amateur donde su ingenua fanfarronería despertó la adhesión de incontables aficionados al que bautizaron con el apodo de «Tigre». En 1942 por primera vez se enfrenta a Alfredo Parra: un duelo entre dos titanes aficionados. En 1946 se encuentran nuevamente, pero ya en el campo profesional y con el imponente marco del Estadio Luna Park. Las batallas boxísticas entre ambos se prolongaron hasta 1953, repartiéndose dos victorias cada uno. En 1953 gana Parra por nocaut en el 6° round y fue el comienzo de la noche negra de Gatica, ese hombre que era capaz de darlo todo por un amigo, o de regalarle plata a cualquier chico que se lo pidiera. Comenzaron a aparecer las malas compañías, el alcohol, la separación conyugal, el abismo. El 10 de noviembre de 1963, cuando Independiente y River peleaban por el Campeonato, un colectivo que circulaba habitualmente por el barrio de Barracas, lo atropelló destrozando aquella humanidad que otrora fuera Campeón Argentino. Dos días después falleció.