Patatas con níscalos
Ingredientes para 4 personas:
4 patatas
10 níscalos
3 rabanitos
10 pimientos de padrón
1 cebolleta
1 cebolla
2-3 dientes de ajo (según tamaño y gusto)
pimiento choricero
1 ajo negro
laurel
1 tomate rojo maduro (tamaño mediano-grande)
100 gr de jamón ibérico
1/2 vaso de brandy
1/2 pastilla de caldo de ave
1/2 vaso de vino blanco (Jerez)
Aceite de oliva
Agua
Sal
Preparación:
En una cazuela con un chorrito de aceite, pon dos dientes de ajo cortados en láminas.
Corta la cebolla en brunoise y cuando esté dorado el ajo añade la cebolla a la cacerola. Pon un poco de sal para que sude.
Mientras pocha la cebolla, limpia los pimientos. y trocea. Corta en brunoise los rabanitos y añade a la cazuela.
Limpia los níscalos de tierra con ayuda de un paño y corta la parte del tallo que contiene parte de tierra. Trocea en trozos que sean cómodos para comer.
Pela el tomate y corta a cachitos.
Mientras tanto trocea el jamón, pela las patatas y chasca para que suelten la fécula.
Cuando esté la cebolla transparente, añadimos el tomate, dejamos que se mezcle todo bien. Deja que siga cociendo a fuego lento hasta que el tomate y se pueda aplastar con la cuchara.
Añade 1/2 vaso de brandy y deja que evapore todo el alcohol removiendo de vez en cuando.
Una vez que tenemos el sofrito preparado, retiramos de la cacerola y lo pasamos todo con la batidora junto a un ajo negro.
Con el poco aceite que nos quede en la cazuela, vamos a freír el jamón cortado en taquitos. Añade los níscalos y deja que se hagan poco a poco junto al jamón. Es importante comprobar que el níscalo quede bien guisado. Prueba para comprobar que no esté duro. Añade 1/2 vaso de vino de Jerez y 2 hojas de laurel .
Añade las patatas a la cazuela y remueve para que impregnen del gusto de jamón y níscalo.
Incorpora a la cazuela el sofrito con ajo negro pasado por la batidora. Aclara el vaso de picar con un poco de agua y añade al guiso
Deja que de un primer hervor a fuego lento e incorpora 3 cucharaditas de pimiento Choricero y media pastilla de caldo de ave.
Deja hervir lentamente hasta que la patata quede tierna y reduzca el caldo (que quede con cuerpo, no aguado pero tampoco muy espeso), moviendo de vez en cuando para que todo se mezcle y se cueza por igual.
Prueba y rectifica de sal si es necesario.
Podemos ir añadiendo agua según necesidad (espesor del caldo y tiempo de cocción de las patatas).
Una vez que las patatas están cocidas , el plato está listo, buen provecho.
TruquiJuanky. Espolvorear unas ramas de cebollino picado.