El espárrago (familia Asparagaceae) es la yema tierna de la esparraguera. La planta de espárrago está formada por tallos aéreos de follaje muy ramificado y aspecto plumoso y una parte subterránea constituida por raíces y yemas.
Esencialmente, los espárragos no tienen contraindicaciones. Sin embargo, no se recomienda su consumo a quienes padezcan cistitis, cálculos renales, insuficiencia renal y nefritis, ya que estimulan la diuresis. La presencia de purinas y ácido áurico los hace poco recomendables para quienes padezcan gota o hiperuricemia.
Los espárragos son ricos en ácido fólico y betacarotenos importantes para prevenir enfermedades del corazón e hipertensión arterial, tienen propiedades rejuvenecedoras, ayudan a la vista y generan un cambio en el metabolismo con efectos adelgazantes, gracias a su alto contenido nutricional.
Las mayores ventajas de los espárragos incluyen bajo valor calórico, ácido fólico y muchas otras vitaminas y alto contenido de minerales. Los compuestos valiosos que se encuentran en la planta también incluyen glutatión (un compuesto con propiedades antioxidantes) e inulina (un prebiótico natural). Tienen muy pocas calorías, entre 18-21 kcal/100 gramos, un 0% de materia grasa. También es un alimento bajo en hidratos de carbono, apenas tiene un 2%.