Bajo el nombre de frutos rojos se engloba un conjunto de frutos de color negro o rojo, mayoritariamente dispuestos en forma de bayas, como la fresa, la cereza, la frambuesa roja, la frambuesa negra, la mora, el arándano rojo, la grosella negra y la uva.
Estos frutos aportan una importante cantidad de fibra, son bajos en calorías tienen cero colesterol, lo que hace que sean excelentes para aportar energía al cuerpo, además son ricos en antioxidantes, minerales y vitaminas.
Su aporte calórico oscila entre las 30 y las 50 Kcal por 100 g, y tienen un contenido graso prácticamente nulo, poca cantidad de proteínas, y la energía que proporcionan proviene fundamentalmente de los hidratos de carbono (12-15 g por 100 g).
Los frutos rojos son los aliados perfectos para nuestra salud. Las fresas y los arándanos nos aportan mucha vitamina C y B, mientras otros frutos rojos, como la mora, son ricos en vitamina E. Además de minerales, como el hierro, está muy presente en los arándanos.
Las frambuesas rojas contienen antioxidantes potentes como la vitamina C, la quercetina y el ácido gálico, que combaten el cáncer, las enfermedades cardíacas y circulatorias y el deterioro relacionado con la edad. Tienen un alto contenido de ácido elágico, un conocido quimio preventivo, y se ha demostrado que tienen propiedades antiinflamatorias.
Aportan una considerable cantidad de vitaminas y minerales como la vitamina C, E, B, K o betacarotenos. Consumir frutos rojos puede ayudar a reducir el colesterol, cuidar la salud cardiovascular y combatir los radicales libres.