Los guisantes no son verduras, son legumbres, aunque con un menor aporte calórico que otras de su misma familia, como las lentejas o los garbanzos. Pertenecen a la familia de las leguminosas, a pesar de que el acerbo popular los considere verduras. Los guisantes secos son las semillas maduras de la planta homónima, y se encuentran encerradas dentro de una cubierta o vaina de color verde intenso, de 5 a 10 cm de longitud.
Pisum sativum es una planta herbácea de la familia de las leguminosas, más o menos trepadora, propia de la cuenca mediterránea, aunque muy extendida en todo el mundo. Se cultiva para consumir las semillas.
Contiene proteínas, fibra, fósforo, potasio, tiamina, niacina, folatos y vitamina C. Una ración media de guisantes tiene casi tanta proteína como un huevo entero (aunque es de menor calidad), menos de un gramo de grasa, y nada de colesterol. Además es fuente de minerales tales como el fósforo y el potasio.
Los guisantes son ricos en nutrientes, destacando como fuente de proteína vegetal, fibra, antioxidantes y vitaminas C y ácido fólico. Podrían ayudar a reducir el riesgo de enfermedades crónicas cardíacas, diabetes y algunos tipos de cáncer.
Valor Nutricional por cada 100gr: Valor energético 82kcal, Grasas 0,4gr de las cuales saturadas 0,2gr, Hidratos de Carbono 11,2 de los cuales azúcares 2,8gr, Fibra 4,6gr, Proteínas 5,9gr y Sal 0,3gr.
Son una excelente fuente de proteína vegetal, fibra y vitaminas y minerales esenciales que benefician a nuestra salud. Son bajos en calorías, grasa y sodio, lo que los convierte en un alimento ideal para el control del peso y la salud cardiaca.