La cuajada es un producto lácteo, de textura cremosa, elaborado con leche coagulada por acción del cuajo. Es un postre originario de Navarra y típico de la gastronomía del norte de España. La cuajada se consume habitualmente como postre y tiene un valor nutricional similar al de la leche. Tiene unas 90 calorías en 100 g.
La cuajada tiene propiedades que mejoran la salud de tus huesos. Y no solo eso, una investigación publicada en el International Journal of Preventive Medicine sugiere que el calcio y la vitamina D que se encuentran en la cuajada también son esenciales para mantener la salud de los huesos.
La cuajada casera es un producto lácteo que se obtiene al coagular la leche con el cuajo, un fermento que se produce en el estomago de los mamíferos rumiantes y que podemos encontrar fácilmente en las farmacias. La cuajada casera se puede elaborar con leche de vaca, de oveja o con una mezcla de ambas.
Hay dos variedades de cuajada, la que se obtiene de forma espontánea o natural —apenas con tiene nata ni suero y es muy rica en proteínas lácteas (caseínas) y minerales como el calcio— y la obtenida por coagulación, que es la más consumida.
La cuajada es rica en proteínas de alto valor biológico. Además, aporta vitaminas esenciales como la A, crucial para la formación y reparación de las células cutáneas, contribuye a una piel más saludable y luminosa