La cúrcuma es una planta de la India Oriental que pertenece a la familia del jengibre, y que se usa como especia y colorante alimentario. Dado que es un potente antiinflamatorio es útil para tratar el dolor y las enfermedades inflamatorias: artritis, artrosis, enfermedad periodontal, etc. Previene el parkinson y el alzhéimer. Es útil para tratar las enfermedades gastrointestinales, como la fibrosis hepática y la enfermedad inflamatoria intestinal.
Es una especia sabrosa que es nutritiva para consumir, también se ha utilizado tradicionalmente en la medicina ayurvédica y china para tratar la inflamación, enfermedades de la piel, heridas, dolencias digestivas y condiciones hepáticas.
Mejora de la digestión ya que estimula la producción de bilis, mejorando la digestión de las grasas y la eliminación de toxinas. Una digestión eficiente puede mejorar la absorción de nutrientes y la eliminación de desechos, contribuyendo al control del peso.
Tiene propiedades antioxidantes, lo que significa que puede reducir la hinchazón y la inflamación. Se está explorando como tratamiento oncológico. También ayuda al cuerpo a desintoxicarse, ayudando al hígado a modificar, inactivar y eliminar toxinas y sustancias en exceso producidas por el cuerpo (incluidas las hormonas).