La cereza es el fruto del cerezo, árbol de la familia de las rosáceas que alcanza hasta 20 m de altura. El fruto es una drupa de unos 2 cm de diámetro, cuyo color oscila desde el rojo claro hasta el morado oscuro.
Es rica en hidratos de carbono, principalmente azúcares simples como fructosa, glucosa y sacarosa, si bien su valor calórico es moderado, solo 58 kcal por cada 100 gramos. Una ración de cerezas equivale a unos 150 gr o lo que es lo mismo unas 15-18 cerezas (dependiendo de su tamaño).
Presentan un alto contenido en vitaminas, sobre todo vitamina A (en forma de betacaroteno) y vitamina C, y también hidratos de carbono, calcio, potasio y magnesio. La fibra que contienen les confiere un carácter laxante y "depurativo" del organismo.
Casi el 85% de su composición es agua, lo que le confiere propiedades diuréticas y depurativas. Además, aportan fibra, que mejora el tránsito intestinal.
Ayudan a prevenir enfermedades cancerígenas, la diabetes, conciliar el sueño o a reducir los dolores musculares gracias a su poder antiinflamatorio. Además son muy buenas para adelgazar y para el cuidado de la piel.