Crónica de Javi. Media Maratón de Montaña El Tanque 2011

El sábado 19 de noviembre se disputaba la 4ª media maratón de montaña de El Tanque. A tenor de la lluvia que caía en la zona de La Laguna, entre la una y las dos de la tarde, cuando me disponía a partir hacía el norte de la isla, dudaba bastante de que la carrera se fuera a disputar, no obstante parece que la climatología se alió con los amantes de las carreras de montaña y una vez pasado el Valle de la Orotava aunque estaba cubierto no llovía. En la salida muy buen ambiente, allí nos encontramos Tervi y yo, los guachincheros que íbamos a participar en esta prueba. Unos 370 corredores estaban inscritos y por la cantidad de gente que se agolpaba en las inmediaciones de la línea de salida se puede decir que no faltó nadie para disputar esta carrera que, aunque se denomina media maratón, tiene casi los 23 kilómetros de recorrido (dos kilómetros más se notan y sobre todo al final).

A las 4 de la tarde se inicia la prueba y tras apenas 400 metros de rodar en llano por las calles de El Tanque se comienza una subida por asfalto hacia la zona del colegio donde de inmediato se abandona el asfalto y te introduces ya en un pinar sobre terreno volcánico con una pendiente muy pronunciada que a la mayoría no nos permitía correr. Esta es la tónica durante los 2,5 - 3 primeros kilómetros, dura pendiente sobre terreno volcánico bien compacto donde sólo se puede correr en determinados tramos.

A partir del kilómetro 3 aproximadamente el terreno sigue siendo muy parecido pero la pendiente suaviza un poco y permite marcar un trote muy lento para no reventar. En breve, pasado el km 4 de carrera, se cruza la carretera que une San José de Los Llanos con La Montañeta, y nos metemos en una pista con buen firme y pendiente no tan pronunciada donde se puede aumentar el ritmo de carrera. Este tramo de la carrera es precioso, los primeros kilómetros de la pista discurren entre una vegetación de Monteverde para ir dando paso según continuamos ascendiendo a un pinar que en el día de ayer, y debido a las recientes lluvias, se encontraba plagado de setas. Ya en el último tramo de ascenso la pista deja paso a un sendero cubierto de pinocha por el que se puede correr en todo momento. Para rematar esta subida, a los 7,5 km culmina este tramo subiendo en zigzag por un sendero sobre cenizas volcánicas que te dejan justo en la ladera del Volcán de Montaña Arenas Negras (precioso). A partir de aquí comienza una larga bajada con buena pista para correr donde te dejas llevar y casi vuelas. Yo en este tramo iba casi a 4 minutos por kilómetro y lo mismo le pasaba a Tervi que me comentaba que aquí había bajado a 4:20 min/km.

En el kilómetro 13 aproximadamente desembocas nuevamente en la carretera de San José de los Llanos, ahora dejando a Erjos a la izquierda bajamos por la ermita de San José hacia Ruigómez. Esta bajada es más técnica que la anterior, normalmente discurre por senderos estrechos alternado algún tramo de pista agrícola y pasando también por pequeños enclaves de Monteverde y un pequeño bosque de castaños.

El ritmo de bajada sigue siendo fuerte, o por lo menos a mi me lo parece, lo que te hace temer que en algún cambio de terreno las piernas digan basta. En torno al kilómetro 18 de carrera viene el postre que nos tenían reservado para el final, primero para romperte el ritmo tienes un kilómetro aproximadamente de sendero con duras subidas, donde sólo se puede caminar, que se alternan con bajadas pronunciadas y sinuosas con continuos cambios de dirección que no te dan tiempo ni a pensar. Además en esta parte sí que se notaba la lluvia caída estos días y estaba bastante resbaladizo. Para rematar, al acabar este tramo está lo que llaman la subida a las antenas, una pendiente durísima de “sólo 300 metros” pero en la que se asciende 80 metros en altura. Al llegar a las antenas hay que bajar por la otra cara de la montaña hasta conectar con la carretera de Tierra del Trigo a El Tanque. El cambio de la fuerte bajada para enlazar con el asfalto que en este tramo es ascendente se hace muy duro. De un grupo de 6 corredores en el que venía, dos de ellos se quedaron clavados en el asfalto porque los calambres les impedían correr. Ya sólo queda poco más de un kilómetro hasta la línea de meta en El Tanque, todo por carretera, pero este último kilómetro se hace duro, las piernas vienen machacadas de las bajadas y el asfalto te deja medio clavado. Al final la recompensa de haber acabado una buena carrera con unos paisajes preciosos y un ambiente fantástico.

El ganador de la prueba fue Roberto Vera (1h:47´) del Trivalle de Güimar seguido de cerca por Pepe Padrón del CAVT también con 1h:47´.

De los guachincheros Tervi hizo una gran carrera y se marcó un tiempo de 2h: 38´, y Javi entró 63 de la general con 2h:15´ y 5º en la categoría de M-45.

Francisco Javier González Viera