Tatsukuma Ushijima (1904 - 1985)
Tatsukuma Ushijima nació en Kumamoto, Prefectura de Kumamoto, Japón, el 10 de marzo de 1904 y falleció el 26 de mayo de 1985.
Hijo de una familia de refinadores fue un judoca japonés y ex campeón de judo de Japón. Comenzó judo a los 15 años. Ushijima ganó el segundo y tercer campeonato de judo en Japón.
Ushijima es conocido como uno de los luchadores de koryu jiujitsu y competidores de judo más duros de su tiempo.
En 1944, intentó asesinar a Hideki Tojo, general y líder del Imperio de Japón, pero falló. Fue arrestado por la Policía Militar (Kempeitai).
Fue fundador de la Asociación Internacional de Judo en 1950.
Ushijima era temido por sus oponentes como el "tigre feroz", y en la leyenda lo recordaba como "Ushijima the Undefeated" y "Ushijima el diablo" ("The Demon Ushijima"), por su rudeza y su firme personalidad. Tenía un brillo de águila en sus ojos que podía atrapar a alguien con una mirada.
Por la mañana salía a correr mientras tiraba de un trineo que pesaba 60 kg. Por la noche, se ponía pantalones cortos y entrenaba su cuerpo con piedras. Después del entrenamiento, se metía algunas hojas de té en la boca para despertarse. Realizaba uchi komis contra un árbol grande; también se colocaba el cinturón alrededor del árbol y realizaba 1000 seoi-nages.
En la noche antes de una pelea, él bebía la sangre de una tortuga mordedora, y el día de la competición entraba a pelea tras una bocanada de polvo de serpiente víbora. Con la señal de inicio, cargaba a su oponente y se mantendría implacable en sus ataques. Este despiadado estilo de ataque se convirtió en el credo de Ushijima Judo, y lo heredó su amado discípulo: Kimura Masahiko.
En el Koutaishi Seitan Kinen Tenran Shiai (Nacimiento conmemorativo del Torneo Príncipe Heredero) Un parásito se apoderó de su hígado, donde perdió más de 9 kg e incluso el caminar se convirtió en una hazaña imposible. Para prepararse mentalmente, se refugió en una cueva durante un mes, practicando meditación Za Zen, y cantando el “Libro de los Cinco Anillos” de Miyamoto Musashi en preparación para su pelea. Fue su determinación de compensar su cuerpo con su mente y su espíritu, pero perdió. Algunos dicen que, si no hubiera sido por su enfermedad, la victoria era una certeza.
Varias de sus citas famosas son:
"El judo es nada menos que un arte marcial. Cuando un soldado rompe su espada y se queda sin flechas, al final, la vida y la muerte se determinan con newaza".
"La pérdida es equivalente a la muerte".