Sobre argumentos y adjuntos. Una propuesta mínima

Mínima introducción teórica

Fuente: Semántica y SIntaxis: argumentos y adjuntos del verbo.

Desde el punto de vista semántico, los argumentos y los adjuntos complementan el significado del núcleo de un grupo sintáctico.

¿Qué es un argumento?

Expresión lingüística exigida semánticamente por el núcleo de un grupo sintáctico. Por ejemplo, el verbo puede seleccionar uno, dos o tres argumentos:

(i) Alguien tose

(ii) Alguien quiere {algo o a alguien}

(iii) Alguien cuenta algo a alguien

El argumento en (i) es Alguien, en (ii) son Alguien y algo o a alguien, y en (iii) son Alguien, algo y a alguien.

Un argumento puede cumplir distintas funciones sintácticas y semánticas.

Los complementos del verbo

Al igual que el sustantivo y el adjetivo, también el verbo tiene dos tipos básicos de complementos:

I. Los argumentos

Son complementos necesarios para el verbo; es decir, el verbo los exige. Sin ellos, o la oración es agramatical o el verbo presenta otro significado.

Entre los argumentos se encuentran:

1) Los complementos directos

Tengo frío [CD] en el despacho.

2) Los complementos de régimen o regidos

Confío siempre en mi familia [CR].

3) Algunos complementos indirectos

He dado un libro [CD] a María [CI].

4) Complementos adverbiales (complementos circunstanciales según la gramática tradicional)

Esa casa cuesta mucho [C. adv.].

María reside en Madrid [C. adv.]

Puse el libro [CD] en la mesa [C. adv.].

5) Los atributos

El niño se quedó triste [atrib.]

II. Los adjuntos

Son complementos no exigidos por el verbo; sin ellos, la oración es gramatical y el verbo no cambia de significado.

Entre ellos se encuentran:

1) Los complementos circunstanciales propiamente dichos

Ayer [CC] vi a Juan en el parque [CC].

2) Algunos complementos indirectos

Pinté un cuadro a mi madre [CI].

3) Los predicativos

Trajeron limpia [predic.] la ropa.

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