Imagen: Joaquín Sorolla, "Helena en la cala San Vicente, Mallorca"

Joaquín Sorolla, Helena en la cala San Vicente, Mallorca (1919). Museo Sorolla. Madrid.

Concluida la decoración de la Sociedad Hispánica Sorolla se retira a descansar en Valencia. En el mes de agosto se traslada a Pollensa (Mallorca), instalándose en la Cala de San Vicente. Recogerá dicha cala en distintas versiones, en las que predomina su obsesión por la luz, fuerte y refulgente. La figura que nos presenta en primer término corresponde a su hija Elena.