Sobre la estructura de Cántico (1935)
Sobre el título del poemario
Sobre el tema de la poesía de Cántico
El contenido total (de "Cántico --1935") está ordenado en cinco partes, tituladas «Al aire de tu vuelo», «Las horas situadas», «El pájaro en la mano», «Aquí mismo» y «Pleno ser».
Para saber cuál es (la visión del mundo que recoge y transmite "Cántico") debemos partir de la primera palabra de su obra, de la que es también la última, del título definitorio: Cántico. Ni canto, ni cantar, ni canción, ni cante, sino precisamente eso, cántico. La palabra lleva infuso un sentido de gracias y alabanzas a la divinidad. La raíz de la poesía de Guillén está precisamente en el entusiasmo ante el mundo y ante la vida.
El tema de esta poesía de la exaltación y del júbilo es la belleza del mundo y del ser.
[...] La hermosura de la vida no está rebuscada, no se oculta, no hay que buscarla con laberínticas introspecciones. Está ahí, aparente, delante de nosotros. La vida es bella porque es vida.
[...] A despecho de las apariencias, sin necesidad de que los ojos vean nada, una fe ciega y segura de la perfección de lo creado se impone sobre todo.
[...] De suerte que siendo una poesía de la vida en su dimensión total, entera, no canta el poeta nociones abstractas, sino que nos entrega lo vital en condensaciones precisas, en cristalizaciones ejemplares, que responden todas ellas a un nombre, a una cosa, a un estado momentáneo de ser o de sentir.
[...] Por aérea, incorpórea y altanera que parezca esta poesía está siempre referida a una circunstancia o a un hecho real perfectamente visible.