Guerreras descalzas

GUERRERAS DESCALZAS

Descalza, la bailarina de marinera está indefensa.

Se enfrenta con los pies desnudos, sin protección alguna, a los suelos más terribles: tierra con piedras, cascajo, pistas ardientes y ásperas, arena gruesa, pasto reseco... Pero cuando empieza la música ella crece, se desconoce, entra en trance, se fortalece. Horas y horas de ensayos y prácticas le han curtido las plantas de sus pies, se las han vuelto duras, ásperas, resistentes, pero más aún, le han dado la fuerza de voluntad y el coraje para enfrentarse a lo que sea, para soportar lo que venga.

Le duelen los pies, las plantas abrasadas le arden, pero ella no se deja vencer, no se queja. Ella domina al dolor y a través de su pasión lo convierte en arte, en baile, en placer...¡Lo disfruta! La música, la danza la transforman, se vuelve conquistadora, imparable. La sencilla campesina se convierte por un momento en princesa, en seductora, en guerrera que enamora a su chalán, lo conquista y se deja conquistar.

¡Esta es la magia de la marinera, y por eso las bailarinas son mágicas!

20160210