Adriana:  Pies de ángel

Adriana:  Pies de ángel

Adriana miró sus pies desnudos. Movió sus deditos. Sus pies estaban adoloridos luego del ensayo.

No le importaba, era capaz de todo con tal de bailar.

Levantó el pie derecho y miró su planta. El polvo dibujaba grácilmente las curvas de sus pies dejando sólo sus arcos blancos, limpios y suaves

Sintió la piel de su planta...dura, áspera, encallecida...

parecía cuero

Un par de horas atrás, nada más

ella pensaba que sus pies eran feos

que sus plantas duras eran feas.

Pero todo había cambiado

Mientras bailaba, había notado al muchacho que la veía

siguiendo sus pasos con atención

Ella le sonrió y él, embelesado, le había devuelto la sonrisa

mientras ella giraba con el pañuelo en el aire

levantando la falda con femenina coquetería

mientras cepillaba los pies en el cemento áspero y caliente

¡Dios, cómo quemaba! Pero a ella no le importaba, sólo le importaba bailar, bailar SU marinera

La música cesó, y con ella el baile. El público estalló en aplausos

mientras ella se retiraba al camerino

En eso lo oyó

"Señorita"

Volteó. Era el muchacho al que le había sonreído

"Baila usted hermoso, ¿le puedo tomar unas fotos?"

Sonriendo, ella accedió.  Apoyando delicadamente la punta del pie en el suelo, pañuelo en alto, sonrió para la foto.

El muchacho quedó encantado.  Era hermosa y bailaba como un ángel.

"Qué bonito bailas" dijo él, tuteándola ahora

"Gracias" respondió Adriana, bajando la mirada

Mientras tomaba las fotos, él le dijo

"Qué hermosos son tus pies"

"¿Mis pies? ¡Ja ja ja! Mis pies son feos"

"Mis plantas están duras y ásperas, encallecidas de tanto bailar"

"¿Me permites?" Dijo, y sin esperar respuesta, cogió delicadamente su pie, para poder ver su planta

"No, tus pies son hermosos. Tus plantas son lindas, tienen personalidad"

"Gracias" dijo ella, "Jamás me habían dicho eso, nadie me había dicho antes que tenía bonitos pies"

"Pues han de estar ciegos entonces" dijo él, mientras su dedo recorría la planta del pie de ella, sintiendo su dureza, lo áspero de su piel. "En serio creo que es hermosa....como tú"

Y repentinamente, de improviso, delicadamente, posó sus labios en el talón de ella y lo besó

***

Hasta entonces ella había pensado que sus pies eran feos, que sus plantas duras y ásperas lucían mal

pero ese beso lo había cambaido todo

"Tus pies son hermosos"

Esas palabras resonaban aún en su mente

Miró sus pies largos, esbeltos, de apariencia delicada.

Miró sus dedos largos, sus arcos pronunciados.

Sonriendo, terminó de vestirse: Una camiseta, shorts de jeans. Miró las sandalias en el piso. Sin decir nada, las metió en el bolso, y salió descalza. El la esperaba. Su rostro se iluminó al verla. Lucía hermosa en esa ropa tan sencilla.

Al ver sus pies descalzos, sonrió.

"Eres hermosa, y luces aún más bella descalza"

Empezaron a caminar, mientras hablaban como si se conocieran de años, de siempre. La amistad acababa de nacer... y con seguridad pronto surgiría algo más.

FIN