Quejigo de Garinoain

19 de diciembre de 2021

Quercus faginea - Quejigo - Erkametza

           En la profundidad de la niebla, en ambiente de puro invierno nos movimos este domingo, las manos se helaban dentro de los bolsillos. ¿Qué jornada botánica se podía vivir así?

           Y, sin embargo, las plantas estaban allí, álamos, aladiernos, rosales, hinojo… ¿a dónde iban a ir? Vimos las hojas de Phlomis diferentes, de orquídeas, de murajes… y hasta flores abriéndose de Pallenis, de Anacyclus. Una mariposa incluso, que nos sorprendió aferrada a una flor de viuda silvestre, y revoloteó aterida.

           Risas con Santiago, cuentos variados con Carmen, reflexiones con Raquel sobre las prácticas agrícolas de invierno, visita a una ermita y…

el postre anunciado, los quejigos, y con título de monumento natural el quejigo de Garinoain… para llenar el alma o algo aquí dentro.

           Tras almorzar vimos las devastadoras podas de los olivos, los restos de la cosecha de las cebollas… y así nos fuimos, con alguna que otra cebolla y pensando que así sí se puede pasar una mañana de invierno.

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