Hoy, en la primera salida del año, hemos querido homenajear a nuestro buen amigo Rolando. Como las previsiones meteorológicas son inciertas, decidiremos en el punto de salida nuestro destino para este sábado.
Lugar: La fuente de Roland
Fecha: 4 de Enero de 2025
Hora: 09:00
Punto de encuentro: Aparcamiento Ciudad Deportiva Artica
Convocante: Sección de Excursiones Naturalísticas
Contacto: excursiones.sabados@gorosti.org
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La Fábrica de Armas de Orbaizeta es paso obligatorio para muchos paseos por las proximidades de Irati. Este poblado nos trae a la memoria diversos parajes visitados y recorridos realizados en grupo: la cueva de Harpea, la torre romana de Urkulu, Errozate, Mendizar, Txangoa… Hoy nos hemos encaminado, a iniciativa de Ángel Sanz, a la Fuente Roland, donde hace un par de años esparcimos las cenizas de nuestro compañero Rolando. Él mismo había seleccionado para este fin ese bello rincón rodeado de un entorno único.
Con nuestra presencia hemos querido rememorar aquel acto multitudinario y emotivo. La iniciativa ha tenido respuesta positiva, si tenemos en cuenta los inconvenientes de la distancia y las fechas. Sin embargo, algún fallo mecánico y la propia meteorología han impedido una visita masiva a la Fuente Roland. Un reducido grupo hemos llevado a cabo la iniciativa de Ángel desde Azpegi. A las 10:30 nos poníamos en marcha, a las 12:15 hemos alcanzado el objetivo.
El viento, la niebla y la baja temperatura (aún no había despejado) no nos han permitido permanecer en la Fuente más de 25 minutos. Un breve homenaje a nuestra manera, unas fotos y poco más. No ha faltado el habitual almuerzo en el que ha circulado la bota, como le gustaba a nuestro amigo. ¡¡A tu salud!!
Hacia las 14:00 hemos llegado a los coches. Pintxos y jarras en Orbara. Agur!!
Félix.
Es de esperar que los avatares y “susedidos” de este día 4 (primera salida del año) no sean una premonición de lo que nos espera a lo largo del año.
Si ya lo de ir al punto de referencia (Fuente de Roldan), desde dos puntos distintos y por tanto volviendo también cada grupo a su punto de partida, tenía su aquel, porque pudiera ser que no confluyeran a la vez en ese punto de referencia (como así ha sido según deduzco de las fotos pues no lo he visto en persona porque estaba en el tercer grupeto que se ha formado), sólo faltaba que los hados regalaran al coche de Mari Jose con un clavo para su rueda trasera derecha, con parada obligada en el Alto de Erro y aviso a la grúa porque era sitio imposible para los sucesivos que lo hemos intentado (y también para el de la grúa con sus herramientas), soltar la rueda repuesto del maletero.
Apaño de reparación por el gruista (a base de tapar el agujero del clavo e hinchar la rueda otra vez) poco eficaz por lo que se ha visto luego, con dos grupos cada uno por su lado hacia la Fuente de Roldan, y los que estábamos en el Alto de Erro esperando a la grúa hemos optado, una vez ha venido y se ha ido, por una tercera alternativa: ida y vuelta al Measkoiz, que es la cumbre más alta del cordal que baja desde el alto de Erro hasta Ilurdoz separando los valles de Esteribar y Arriasgoiti.
Un sube y baja por el cordal hasta la cumbre y en algunos tramos bastante barroso y resbaladizo (de esos no hay fotos, suficiente mantenerse) con una cumbre enmarañada pero accesible, lo que nos ha llevado a almorzar en la primera campa limpia un poco más abajo, ya de vuelta.
Al llegar, la sorpresa nada agradable de que la rueda se había vuelto a desinflar y el “apaño” no ha valido. Vuelta a llamar a la grúa y los que no aportábamos nada allí nos hemos vuelto.
Sed buenos/as.
Blas.
Nuestro pequeño grupo, con retraso y desde Roncesvalles emprendió rumbo hacia la fuente de Roland, siguiendo el Camino de Santiago. En nuestro caminar, disfrutamos del bosque sugerente cubierto de nieblas, sufrimos/disfrutamos de la nieve que ralentizaba nuestros pasos, nos azotaron rachas de frio viento que nos abrieron las vistas sobre nuestra vecina Francia. Disfrutamos del sol y luego de nuevo de la niebla, acabando la jornada con sol.
Tuvimos un recuerdo por aquellos peregrinos, que en invierno, se internan en estas montañas en esta larga etapa, con frio, nieve, nieblas y en algunos casos sin experiencia montañera...
Recordamos a Rolando, que a menudo, cogía la mochila y se iba a hacer caminos..., en contacto con la tierra, el cielo, las gentes..., acompañado de sí mismo y en ocasiones de otros peregrinos.
Sabemos que allá donde esté, nos sigue acompañando...
Acabamos en Casa Sabina con unas cervezas, después de 17 km y 530 metros de desnivel.
Julián