Despertad sin vergüenza ni complejos
Suele decirse que las cosas se ven del color del cristal con que se miran. Es verdad si la percepción no se corrige, hay gafas por medio, o están sucias. Los héroes y mártires navarros por Dios y por España, lo son, pues dieron todo sin recibir nada a cambio para defender la Religión perseguida, a España y sus familias, a punto de desaparecer por la irreligión y el bolchevismo. Los móviles patrióticos no excluyeron los religiosos, aunque estos últimos fueron los primerísimos, máxime por fundarse España en la religión católica. Esto es tener buena vista, sin necesidad de gafas. ¿El quid de la cuestión?: que la guerra de España fue una Cruzada, lo que -según mons. Zacarías Vizcarra- las logias de París acordaron combatir en 1937 (“Ecclesia”, nº 658, 1954), y se puso en solfa en 1942 (Laín Entralgo), hacia 1961 (Gironella, Southworth) etc.
Aquí las cosas no han terminado sino que van para largo. Las gafas tienen la marca de las ideologías que necesitan del activismo para subsistir. Se ha editado libros sobre la Navarra de 1936 que rezuman aversión, y suponen una limpieza política -histórica o actual- de fatxas. A su corifeo se unen Diario de Noticias, las concentraciones y teatros callejeros, las manifas que apoya todo un Parlamento... Pese a todo, mueven poca gente. Sume Vd. los actos talibanes contra símbolos, la Laureada y el Monumento, las exhumaciones de héroes y mártires impuestas por el “ordeno y mando” del alcalde ¡EH Bildu!, y el entreguismo de Diario de Navarra que huye de su propia historia. Mientras unos huyen y se consolidan falsos sambenitos, los talibanes van a por todas y a por todo: a “catalogar” todo resto físico de la Cruzada, a identificar a sus contrarios y a proyectar el pasado sobre el presente con talante vengativo, conforme a lo totalitario y estalinista de sus gafas. De seguir así, veo un triste porvenir.
Este es el instrumento actual de lucha. Enconan. Contraponen en falso idiomas identificando a Navarra con el invento batúa. Se “cargan” el vasco de siempre. Entre los separatistas están los románticos y los marxistas, avenidos entre sí “a la contra”. Son revanchistas. Buscan el ensayo intelectual -es su deporte- e ideológico. ¿Qué más?: pues producen pobreza, crean descontento hasta en sus amigos, nos hunden a impuestos, son manirrotos y amigos del enchufe. Dicen que el 74% de los navarros están en su contra (DdN, 7-XII). El terrorismo de sangre o calle depende de ellos. Republicanos de conveniencia, rechazan la República por española, y desde luego no pueden quitarse la responsabilidad del terrorismo etarra de casi mil víctimas mortales, más los heridos, mutilados… ni el indecible reguero de sangre y sufrimientos físicos y morales. Sí; el marxismo utiliza el nacional separatismo, el PNV-Geroa Bai se alía con los comunistas como en 1936, y ambos siguen una Hoja de Ruta arruinando a todos.
Los navarros ¿son pusilánimes hasta desaparecer? Sin Verdad, la paz es un cuento. Cuando el mal avanza, hay que desvelarlo y trabajar más. Ceder es un gran paso atrás. Háblese del miedo de muchos ante los que no condenan a ETA y le apoyan. Quien ceda para protegerse y guarde silencio por temor, tenga la valentía y libertad -pensando en el Bien Común- de decirlo. ¿Contentar -¡oh paz!- a los amigos de ETA, para hacer práctico el pacto con ella? Ante el actual activismo ideológico marxista y separatista, ¿se impregnará la cultura social de Verdad, después de años de dejarles el campo libre?
A la increíble y penosa cesión del Sr. Arzobispo ante el alcalde ¡EH Bildu! a las exhumaciones de los restos mortales de héroes y mártires -¡justicia y reconocimiento, por favor!-, Orreaga Fundazioa respondió con un blasfemo cartel contra mons. Olaechea a todo color convocando una manifestación el día de Navarra. La libertad del Sr. Arzobispo no puede depender de la manipulación de los impíos sobre la Cruzada de hace 80 años, ni de la soledad provocada por un régimen que desvertebra, paraliza, y anula la previsión.
¡Qué vergüenza para Navarra! Entre los navarros sólo han actuado la Hermandad de Caballeros Voluntarios de la Cruz, la Comunión Tradicionalista Carlista de Navarra, y por supuesto Siempre P’alante. ¿Los demás?: silencio y complicidad. Pero tampoco los anteriores han sido eficientes. Las estupendas y leales familias opuestas a exhumar los restos mortales se los llevaron la noche del 16-XI, seguramente para que no cayesen en manos de ¡EH Bildu!
Ya estáis enterrados en privado. ¡Como héroes y mártires entrasteis en la Cripta aquel 17-VII- 1961 y en 2016 los navarros os han desmerecido! La boina roja del presidente de la CTC de Navarra os esperó, llorando en tinta a la salida de vuestra exhumación nocturna. ¿Nadie se da cuenta que en vosotros están los 4.653 muertos en el Frente en la Cruzada por Dios y por España? ¡Qué vergüenza! Hermanos Joaquín y Dimas Aznar Zozaya, y Severiano Arregui Olalquiaga, cuyos restos mortales duermen juntos en el cementerio de Javier.… ¡que os recuerden los peregrinos de las Javieradas, que la HCVC empezó en 1939 y 1940! Generales Sanjurjo y Mola, y otros compañeros: aunque se gane el pleito en los Tribunales contra la decisión del alcalde ¡EH Bildu! -temo por la Justicia-, vuestros restos mortales ya no volverán a la Cripta. Tampoco los dos -de ocho-, cuyos familiares han quebrado el deseo de sus antecesores. ¡Qué vergüenza, Dios mío, qué vergüenza para Navarra! A nosotros ¡que Dios nos lo demande! Y ojo que esto sigue. Y para vosotros ¡la gloria, allá, pero para siempre!
José Fermín Garralda